Las plantas suculentas raras, es decir, los cactus y las crasas que tienen formas y/o colores curiosos, son aquellas que se convierten rápido en nuestras favoritas, y por ello a menudo también en nuestras »mimadas».
En una composición pueden quedar muy bonitas, pero su cultivo en macetas individuales consigue que se vean en todo su esplendor. La belleza de las suculentas raras es tal, que casi mejor que la veas por ti mismo.
Adromischus marianae
Podrían pasar por pequeñas piedras preciosas, pero por fortuna el Adromischus marianae es el nombre científico de una planta real, que crece silvestre en Sudáfrica. En realidad es un subarbusto pequeño, de unos 10-15 centímetros de altura, con hojas casi esféricas, de color verde, marrón rojizo o púrpura. Las flores surgen de un tallo floral, y son de color verde, y pequeñas ya que miden 1,2 centímetros.
En cultivo es una planta relativamente fácil, que estará sana solo si se tiene en sustratos que drenen rápido el agua, y se riega de vez en cuando.
Aloe polyphylla
El Aloe polyphylla, conocido como áloe espiralado es una especie rara pero preciosa. Originaria de Lesoto (África), sus hojas carnosas, más o menos triangulares, se disponen en espiral creando hasta cinco niveles. Estas son de color verde-grisáceo, y tienen algunas espinas muy cortas.
Cuando florece su valor ornamental aumenta todavía más, ya que de su centro brotan flores tubulares y de color rojizo o a veces amarillas en espigas. Lamentablemente, en cultivo es muy exigente, y además hay que sumarle que se encuentra en peligro de extinción, por lo que es difícil conseguirla.
Ariocarpus furfuraceus
El Ariocarpus furfuraceus es un cactus que parece que procede de otro mundo. Y es que no tiene costillas como tales, sino que estas son tubérculos largos con forma triangular que se disponen en espiral. Así, forma una estructura globular, de color verde-azulado claro, que llegan a medir un diámetro de 16 centímetros y una altura de 10-15 centímetros.
Las flores brotan de los tubérculos que están más cerca del centro de la planta, y miden entre 4 y 5 centímetros. Estas son de color blanco o rosado.
Aztekium hintonii
El Aztekium hintonii es una especie de cactus originario de México conocida como biznaga piedra del yeso. Su cuerpo es semi-globoso, de color verde, con una altura de 10-15 centímetros y un diámetro similar. Está compuesto por 10-15 costillas muy marcadas, de cuyas areolas brotan 3 espinas muy cortas y apenas visibles a simple vista. Las flores brotan en la parte superior, y son rosadas, con un diámetro de 1 a 3 centímetros.
Se trata de una especie que crece en terrenos rocosos, por lo que cuando se cultiva es importante que se tenga en sustratos como pómice, akadama o similares para reducir al mínimo es riesgo de pudrición.
Conophytum obcordellum
Existen unas cuantas especies de Conophytum, pero la C. obcordellum es sin duda una de las favoritas. Al igual que los lithops, se trata de una »planta ventana» compuesta por dos hojas, en este caso unidas, en cuyo centro presentan una fisura de la cual brotan las flores, que son amarillas, y las nuevas hojas.
Crece de forma silvestre en Sudáfrica, y su altura es de tan solo 4 centímetros. Si se combinan con otras crasas de pequeño tamaño pueden verse muy curiosas.
Ferocactus schwarzii
El Ferocactus schwarzii es una especie de cactus perteneciente al género Ferocactus originaria de México. Tiene un cuerpo globular con 13-19 costillas bien armadas con espinas de entre 1 y 6 centímetros de largo. Sus flores son amarillas, de unos 4 centímetros de diámetro, y brotan en la parte superior del tallo.
Su cultivo en rocallas es muy interesante: la planta mide 50 centímetros de diámetro por 80 centímetros de altura, de manera que quedará genial si se combina con, por ejemplo, otros cactus y/o crasas.
Lithops optica cv Rubra
Se trata de una variedad de Lithops muy poco común. Procede de la selección de ejemplares de Lithops optica, que es una especie endémica de Namibia, los cuales tienen las hojas de color lila. Florece en primavera, produciendo flores blancas que brotan del centro de la planta.
La altura total es de unos 3-5 centímetros, de manera que es la crasa ideal para tener en macetas pequeñas. Su ritmo de crecimiento es lento, pero por suerte se pueden encontrar plantas adultas en los viveros de cactus y crasas a precios relativamente económicos.
Tephrocactus geometricus
El Tephrocactus geometricus es un cactus que llama mucho la atención. Es endémico de Argentina, y se caracteriza por desarrollar un tallo muy poco ramificado, con forma de tubérculo, que mide como máximo 15-20 centímetros de altura. Tiene espinas, pero solo en la parte superior de cada segmento, y son de color blanco y negro con una longitud de hasta 1 centímetro.
Las flores, que son blancas, brotan en el extremo de los tallos superiores, y tienen un tamaño de 3-4 centímetros de diámetro.
¿Qué te han parecido estas plantas suculentas raras que te hemos presentado? Como ves, hay unas cuantas que son maravillosas, pero ¿cuál te ha gustado más a ti?