El Polygonum aviculare es una hierba que crece en casi todo el mundo y que además tiene propiedades medicinales bastante interesantes. ¿Te apetece saber cuáles son? Pues no lo dudes: continúa con nosotros que te vamos a contar todo sobre esta especie.
Y es que, si bien no tiene un valor ornamental lo suficiente alto para cultivarla en el jardín, ello no significa que no se pueda hacer 😉 .
Origen y características
El Polygonum vulgare es una hierba anual originaria de Europa pero introducida en todas las regiones templadas y cálidas del mundo. Popularmente se conoce como centinodia, correhuela, rompepiedras o tramaladros, y crece hasta alcanzar una altura comprendida entre los 10 y los 160 centímetros de altura.
Los tallos son delgados, rastreros o ascendentes. Las hojas son alternas, lanceoladas, con un tamaño de 1-5cm de longitud. Las inflorescencias son axilares, agrupadas en fascículos de 6 flores. El fruto es un aquenio triangular, de 3mm de largo por hasta 1,7mm de ancho.
Usos y propiedades
Se usa como planta medicinal en decocción para tratar la disentería, trastornos pulmonares, bronquitis, ictericia, flujo menstrual excesivo, y también para aliviar los síntomas de las enfermedades de la vesícula y los de los cálculos renales.
De todas maneras, hay que consultar con un profesional antes de empezar cualquier tratamiento.
¿Cuáles son sus cuidados?
Bueno, el Polygonum aviculare no es una planta que veamos en un jardín habitualmente, pero como puede que te interese cultivarla después de leer lo que te hemos contado, aquí tienes una guía de cuidados:
- Ubicación: exterior, a pleno sol.
- Tierra:
- Jardín: crece en todo tipo de suelos, aunque prefiere los calcáreos, con buen drenaje.
- Maceta: sustrato de cultivo universal.
- Riego: 4-5 veces por semana en verano, algo menos el resto del año.
- Abonado: en primavera y verano con abonos ecológicos, una vez al mes.
- Multiplicación: por semillas en primavera.
- Rusticidad: no resiste el frío ni las heladas.
¿Qué te ha parecido esta planta?