Cómo prevenir hongos en rosal

Cuida tu rosal para que no tenga hongos

Una planta sana, cuidada, será muy resistente a las plagas y a las enfermedades. Y es que, es muy difícil, por no decir prácticamente imposible, que los insectos y/o microorganismos la perjudiquen cuando su salud está bien. Por todo ello, es interesante saber cómo prevenir hongos en rosal.

Estos fungosos inquilinos son unos de los más peligrosos, ya que normalmente cuando los detectamos suele ser muy tarde para recuperar la planta.

Ubica tu rosal a pleno sol

Rosal, colocado a pleno sol

A los hongos les favorece los ambientes sombreados, de modo que una forma de prevenirlos en nuestros rosales es colocándolos en una zona expuesta al sol, en el exterior. De esta manera, además, conseguiremos que produzcan una mayor cantidad de flores durante casi todo el año, lo cual nos permitirá tener el jardín o patio lleno de vida y color.

No mojas hojas ni flores

El rosal es una planta que necesita mucha agua; eso sí, no tanto como una acuática. Para evitar que se queme, o que pierda hojas y/o flores antes de tiempo no hay que regar nunca por arriba, ya que si lo hacemos los hongos no tardarán en aparecer y dañarlo.

Controla los riegos

La frecuencia de riego debe de cambiar a lo largo del año: mientras en verano tendremos que regar más ya que la tierra se seca con rapidez, en invierno habrá que regar menos por lo contrario. Teniendo estos dos »picos» y conociendo un poco el clima de nuestra zona, podremos saber más o menos cuándo regar dependiendo de la estación.

Por ejemplo, en donde vivo durante la época de más calor riego casi cada día, pero en la de más frío lo hago una vez por semana o cada diez días. A medida que se va acercando el verano les doy agua con más frecuencia, pero cuando se acerca la temporada invernal los riegos se van espaciando.

Abona desde primavera hasta finales del verano

El abono guano en polvo

Guano en polvo.

Para que el rosal tenga mucha más fuerza, se debe de abonar durante toda la temporada de crecimiento y floración. Dependiendo de dónde vivas, ésta puede acabar a finales del verano o bien en otoño. Si el clima es suave podría florecer incluso en invierno, de manera que también podrías abonar un poco en esa estación.

Usaremos abonos específicos para rosales que encontraremos a la venta en los viveros, o bien los abonaremos con abonos orgánicos, como el guano.

Con estos consejos, seguro que tus rosales no tendrán que preocuparse por los hongos.


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  1.   María Nieves Acero dijo

    Hola. Hace rato que estoy luchando contra la mancha negra del rosal. Aplico fungicida Mamboretá H ( El Fungoxan no me da resultado) cada 20 días aproximadamente, después de eliminar todas las hojas afectadas y en lo posible limpiar la cazuela de cada uno. Tienen riego por goteo. En realidad casi nunca hay que regar porque acá en verano llueve lo suficiente. El caso es que no se terminan de curar. ¿Qué puedo hacer?

    1.    Mónica Sánchez dijo

      Hola María.
      Cuando el ambiente es húmedo los hongos son difíciles de erradicar.
      Pero… puedes hacer una cosa cuando dejéis atrás el verano (o si tienes las plantas en sombra): consigue cobre o azufre en polvo. Echa unas dos cucharadas soperas en 5 litros de agua y riega bien por encima los rosales. Te recomiendo regadera y no pulverizador porque éste último se atasca en seguida.
      Tanto el cobre como el azufre son fungicidas naturales muy, muy eficaces.
      Un saludo.