Se dice que las plantas aumentan la productividad pero, ¿qué hay de cierto en ello? ¿De verdad tener plantas en nuestro lugar de trabajo o de estudio nos ayuda a rendir más?
Vamos a ver qué dice la ciencia sobre ello y a descubrir que las plantas tienen efectos beneficiosos que nos pueden estar pasando desapercibidos.
¿Las plantas aumentan la productividad?
La respuesta a esta pregunta es un rotundo «sí». Además de embellecer los espacios de trabajo, las plantas tienen un impacto significativo sobre nuestra salud mental y física, lo que se traduce en un aumento de la productividad.
Lo hacen de la siguiente manera:
Mejora de la calidad del aire
Las plantas son purificadoras naturales del aire. Al hacer la fotosíntesis se encargan de absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno, lo que crea un ambiente más limpio y saludable.
Esto nos permite tener una sensación de bienestar general que favorece la concentración y, con ella, nuestra capacidad de trabajo.
Reducción del estrés
Estar en contacto con la naturaleza es una de las mejores formas de reducir rápidamente nuestro niveles de estrés y ansiedad. Aunque lo ideal sería pasar más tiempo al aire libre, si no podemos hacerlo, tener plantas a nuestro alrededor puede ayudar.
Porque reducen los niveles de cortisol, que es la hormona del estrés. Como calman nuestro sistema nervioso, estamos más relajados y en mejor disposición de trabajar con efectividad.
Aumento de la creatividad
Numerosos estudios han demostrado que estar rodeados de vegetación estimula nuestra creatividad y nuestra capacidad para resolver problemas.
Además, el verde tiene un efecto relajante sobre nuestra vista y favorece la concentración.
Mejora del estado de ánimo
Tener plantas a nuestro alrededor y dedicar algo de tiempo a cuidarlas contribuye a mejorar nuestro estado de ánimo y a reducir la sensación de soledad. Porque somos capaces de establecer cierta conexión emocional con ellas.
Nuestra relación con las plantas facilita la liberación de compuestos químicos que son beneficiosos para nuestro bienestar y, si estamos animados, hacer frente a nuestras obligaciones nos cuesta un poco menos.
La combinación de todos estos factores que hemos visto da lugar a un aumento de la productividad que es fácilmente comprobable. De hecho, los trabajadores que prestan servicios en lugares con plantas reportan una mayor satisfacción laboral y son más eficientes a la hora de afrontar sus tareas.
Una evidencia científica
Que las plantas aumentan la productividad es mucho más que una creencia popular, es una evidencia que ha quedado demostrada científicamente.
Uno de los estudios más relevantes en este campo fue realizado hace ya algunos años por la Universidad de Exeter.
Los investigadores compararon el rendimiento de empleados que trabajaban en oficinas con y sin plantas, y concluyeron que quienes desarrollaban su labor en entornos con plantas tenían una productividad un 15% superior al resto.
Para los expertos, esto se debe a la purificación del aire que llevan a cabo las plantas, que crea un ambiente más saludable. Pero también a que estas liberan cierta humedad ambiental y eso también contribuye a aumentar la sensación de bienestar.
Otra de las razones por las que hay una conexión entre plantas y aumento de la productividad es la biofilia. La tendencia innata de los seres humanos a conectar con la naturaleza. Por eso, establecemos cierta relación emocional con nuestras plantas y nos sentimos mejor en espacios que cuentan con su presencia.
¿Cómo cuidar las plantas en la oficina?
Con lo positivo que es tener plantas a nuestro alrededor, es buena idea darles protagonismo en nuestro lugar de trabajo. Sin embargo, debemos tener en cuenta que nunca hay demasiado tiempo para atenderlas, así que conviene tener presentes unas precauciones:
Selección de plantas
- Es importante escoger variedades que se adapten a condiciones de poca luz, porque las oficinas suelen ser espacios con poca iluminación natural.
- Si el espacio es reducido, mejor escoger variedades de porte pequeño.
- Hay que seleccionar ejemplares que sean resistentes frente a las plagas y las enfermedades más comunes y que requieran pocos cuidados.
Ubicación
- Lo ideal es situar las plantas cerca de una ventana, pero no exponerlas a la luz solar de manera directa.
- En la medida de lo posible, hay que evitar que estén expuestas a corrientes de aire frío o caliente. Por eso, las vamos a alejar de la puerta y de los aparatos de climatización.
- Es interesante rotar las plantas de vez en cuando para que reciban luz de manera uniforme por todo el cuerpo.
Riego
- La frecuencia de riego va a depender de cada planta y de la estación del año en la que nos encontremos. Pero siempre es mejor regar con poca frecuencia y en abundante cantidad, porque es más fácil solucionar una deficiencia de agua que un exceso.
Sustrato
- La tierra tiene que ser de buena calidad, que contenga nutrientes para que la planta pueda crecer.
- Debes asegurarte de que tiene una buena capacidad de drenaje, para que evacúe el agua sobrante del riego.
En la oficina no tenemos tanto tiempo para cuidar las plantas como en casa, pero es fundamental dedicar unos minutos cada semana para darles un poco de atención y comprobar que están bien de salud.
Las plantas aumentan la productividad, ¿cuáles escogemos?
Si quieres disfrutar de los beneficios de tener plantas en tu lugar de trabajo o en tu espacio habitual de estudio, necesitas especies bonitas, con gran capacidad de purificación del aire, resistentes y que no necesiten muchos cuidados.
Aquí tienes algunas buenas opciones:
- Sansevieria o lengua de suegra. Es una de las plantas con mayor capacidad para purificar el aire. Además, es muy resistente frente a la sequía y no necesita mucha luz para poder crecer.
- Espatifilo o lirio de la paz. Como en el caso anterior, también tolera la sombra y purifica el aire.
- Pothos. Es la planta de interior por excelencia, lo resiste prácticamente todo y sus cuidados son mínimos.
- Cactus y suculentas. Como las anteriores, no son exigentes en cuidados y pueden sobrevivir en manos de jardineros inexpertos.
- Zamioculcas. Aunque su crecimiento es lento, son extraordinariamente resistentes.
Ahora que sabes que las plantas aumentan la productividad, tienes la excusa perfecta para incorporarlas a tu lugar de trabajo. ¿Te animas?