Peral de flor (Pyrus calleryana)

Las flores del Pyrus callyeriana son blancas

Imagen – Wikimedia/N yotarou

El Pyrus calleryana o peral de flor es uno de los árboles ornamentales más resistentes que hay. De hecho, es más común que se vea afectado por las fuertes rachas de viento o por tormentas importantes, que por cualquier plaga o enfermedad.

Su mantenimiento es muy sencillo, ya que además es bastante adaptable y es capaz de soportar heladas de cierta intensidad sin sufrir daño alguno. Por si fuera poco, está precioso prácticamente todo el año, incluso en invierno cuando se queda sin hojas.

Origen y características del Pyrus calleryana

El peral de flor es un árbol mediano

Conocido como peral de Callery o peral de flor, este es un árbol caducifolio nativo de China que puede alcanzar una altura máxima de 20 metros. Su tronco es recto, y la copa está compuesta por hojas ovaladas, de 4-7cm de largo, verde-oscuras en el haz y verde-claras en el envés. Durante el otoño se vuelven amarillas o naranjas antes de caer.

Florece a principios de primavera, antes de que broten las hojas. Las flores son blancas, tienen cinco pétalos y miden 2-3cm de diámetro. Emiten un aroma dulce que puede resultar empalagoso a algunas personas. Y los frutos son pequeños, menores de 1cm de diámetro, duros y de color marrón-anaranjado al madurar. Estos contienen semillas pequeñas que serán dispersadas por los pájaros a través de sus excrementos.

Hay distintas variedades:

  • Aristocrat
  • Autumn Blaze
  • Bradford (conocido como peral de Bradford)
  • Capital
  • Cleveland Select
  • Redspire
  • Whitehouse

De todas ellas, unas de las más cultivadas es la Bradford, ya que es la más idónea para zonas estrechas e incluso para las ciudades. Sin embargo, hay que tener en cuenta que su tronco es muy frágil, pudiéndose romper con facilidad durante una tormenta, nieve intensa o hasta por fuertes vientos. Por ello, hay quienes optan por la Cleveland, que es mucho más resistente.

¿Cuáles son sus cuidados?

Las hojas del peral de flor son caducas

Imagen – Wikimedia/Alpsdake

Si estás pensando en adquirir un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:

Ubicación

Es una planta que ha de estar en el exterior, a pleno sol aunque también puede estar en semisombra. Lo único que debes tener en cuenta es que, de plantarlo en el suelo, debe de estar a unos 4 metros como mínimo de plantas altas para que pueda tener un excelente desarrollo y para que tú puedas contemplarlo en todo su esplendor a medida que vaya creciendo.

Tierra

Poco exigente. Se adapta a una gran variedad de suelos, sean ácidos o no. Por eso:

  • Cultivo en el jardín: evitar tenerlo en tierras pobres, con mal drenaje, pues de lo contrario tendrá problemas para crecer con salud.
  • Cultivo en maceta: no es planta para tener en maceta -al menos, no por siempre-. Así y todo, durante sus años de juventud sí que se puede disfrutar si se tiene con sustrato universal (en venta aquí).

Riego

De moderado a frecuente. Durante los meses más cálidos del año, es decir, en primavera y sobretodo verano, tocará regar seguido. Hay que regar a consciencia, esto es, procurando echar toda el agua necesaria hasta que toda la tierra quede bien empapada.

Por lo general, se regará unas 3-4 veces por semana durante la temporada veraniega, y unas 1-2 semanales el resto del año.

Abonado

Desde principios de primavera hasta finales del verano (o comienzos de otoño si el clima es suave) se aconseja abonar con abonos líquidos si está en maceta, por ejemplo con guano (en venta aquí) siguiendo las indicaciones especificadas en el envase, o en polvo si está en el jardín, como puede ser el estiércol de vaca (en venta aquí) echando por todo alrededor una capa de unos cinco centímetros y mezclándola luego con la tierra.

Ambos son abonos orgánicos, aptos para la agricultura ecológica.

Multiplicación

El Pyrus calleryana se multiplica por semillas en invierno, puesto que necesitan pasar frío antes de germinar. Así, si vives en una zona donde se registran heladas con regularidad durante esta estación del año, simplemente tienes que sembrarlas en macetas con sustrato universal de unos 20cm de diámetro, poniendo 2-3 en cada una, y dejar que la naturaleza siga su curso (pero riega si ves que el sustrato se seca).

Por el contrario, si vives en una zona donde el clima es más bien cálido, para conseguir un mayor porcentaje de éxito es aconsejable estratificarlas de manera artificial por tres meses antes de sembrarlas en maceta. La estratificación artificial consiste en hacer una primera siembra en un tupperware con vermiculita (en venta aquí) previamente humedecida, y luego introducirlo con la tapa puesta en la nevera (donde los productos lácteos, fruta, etc.). Una vez a la semana hay que sacarlo y abrirlo, para que se renueve el aire y prevenir la infección por hongos.

Semillas sembradas en tupperware
Artículo relacionado:
Cómo estratificar semillas paso a paso

Rusticidad

Resiste heladas de hasta los -18ºC, pero no vive en climas tropicales. Es más, en climas templado-cálidos, con otoños e inviernos suaves, es normal que sus hojas pasen del verde al marrón (seco) antes de caer.

¿Dónde comprar un peral de flor?

Vista de las flores del Pyrus calleryana

Imagen – Wikimedia/Alpsdake

Lo encontrarás a la venta en viveros y tiendas de jardinería, tanto físicas como online. El precio va a variar dependiendo del tamaño, pero para que te hagas una idea, un ejemplar medianamente alto, de unos 3-4 metros, puede salirte por unos 150 euros.

¿Qué te ha parecido el Pyrus calleryana?


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