¿Qué es la alelopatía vegetal?

Las plantas son unos seres muy interesantes: decorativos, útiles, con un mantenimiento más o menos sencillo (dependiendo de la especie)… Pero, además, hay algunas que son alelópatas. ¿Qué significa eso? Pues que producen uno o más compuestos bioquímicos que influyen en el crecimiento, supervivencia o reproducción de otros seres vegetales. Es interesante entonces saber qué es la alelopatía, ya que así sabremos por qué algunas plantas no consiguen crecer cuando se las cultiva bajo las ramas de otras.

La alelopatía es un fenómeno por el cual hay especies que son capaces de controlar la expansión de otras mediante la expulsión principalmente a través de sus hojas, de unos compuestos bioquímicos (una especie de gas invisible a nuestros ojos), que al entrar en contacto con una semilla o una planta, puede impedirle seguir creciendo (lo que sería alelopatía negativa) o por el contrario puede ayudarla a desarrollarse (alelopatía positiva).

Así, en el primer caso poco a poco la planta que tiene debajo se va debilitando sin motivo aparente, y finalmente morirá. Por ejemplo, esto puede pasar si plantamos palmeras cerca de pinos por ejemplo. En el segundo caso, en cambio, lo que va a pasar es que los frutos tengan un mejor sabor, que es lo que pasa si por ejemplo se plantan lechugas con espinacas en una proporción de 4 a 1.

Las plantas alelopáticas son de mucho interés para la agricultura y jardinería. Así, en el huerto podemos utilizar una serie de plantas para proteger los cultivos de algunas plagas, como la lavanda o el romero. Pero debemos de tener cuidado con las especies que provienen de climas muy secos o muy húmedos, como los Ficus, las Acacia, los Salix (Sauce), o los Eucaliptus, pues sus raíces además de ser invasivas no dejarán que nada (o prácticamente nada) crezca cerca de ellas.