¿Qué hacer para que las plantas no tengan plagas?

Pulgones en la hoja de una planta.

Todos queremos saber qué hacer para que las plantas no tengan plagas, porque por muy bien que las cuidemos sabemos que tarde o temprano vamos a tener que enfrentar este problema.

No es posible aplicar una prevención que sea 100% efectiva, pero con unos sencillos ajustes en las rutinas de cuidado podemos reducir mucho el riesgo de que los insectos ataquen a nuestras plantas.

¿Cuándo podemos considerar que nos enfrentamos a una plaga?

Hoja dañada por los insectos.

Si miras de cerca cualquiera de tus plantas, es bastante probable que encuentres en ellas algún insecto. En principio, esto no debe preocuparnos demasiado, porque es normal que acudan a ellas en busca de alimento y refugio.

Cuando sí debemos preocuparnos es al notar cambios físicos en nuestras plantas. Los síntomas más habituales que nos pueden alertar de la presencia de una infestación son:

  • Hojas amarillentas o con manchas.
  • Hojas enrolladas o deformadas.
  • Presencia de telarañas.
  • Puntos negros o blancos en las hojas.
  • Presencia de agujeros en las hojas.
  • Numerosos insectos visibles.

Si estás ante una plaga, intenta aislar la planta afectada para que los insectos no avancen hacia otras. Después, empieza el tratamiento lo antes posible. Si has identificado el insecto que está haciendo de las suyas, te resultará más sencillo encontrar un producto casero o comercial que sea más efectivo.

Qué hacer para que las plantas no tengan plagas: trucos útiles

Caracol en la rama de una planta.

Con estos consejos el riesgo de que tus plantas sean devoradas por los insectos será mínimo, toma buena nota.

Dales nutrientes a tus plantas

Solemos pensar que el fertilizante solo sirve para que nuestras plantas tengan más follaje o más flores, y no es así. El abono cumple la función fundamental de proporcionarle nutrientes a nuestras plantas. Esto, lógicamente, influye en su crecimiento y desarrollo, pero también tiene efectos que no son tan visibles.

Porque resulta que una planta que está bien «alimentada» es más resistente frente a las enfermedades y las plagas.

Los insectos saben que las plantas sanas y fuertes no son el lugar idóneo para ellos, prefieren aquellas cuya salud está algo más deteriorada.

Por tanto, lo que vamos a hacer es abonar correctamente nuestras plantas durante la primavera y el verano. Usando siempre productos adecuados y en la dosis indicada por el fabricante, porque un exceso de fertilizante puede quemar las hojas y las raíces.

Revisa sus plantas regularmente

Los insectos no se convierten en una plaga de un día para otro, este proceso lleva algún tiempo. Por eso, si somos rápidos, podemos acabar con el problema antes de que se materialice.

Dentro de tu rutina de cuidado de plantas acostúmbrate a revisar el haz y el envés de las hojas. Puede que no veas «bichos» pero sí algunas de las señales que dejan (agujeritos, decoloraciones, etc.).

Si notas algo mínimamente sospechoso aplica un tratamiento preventivo. Una buena opción es rociar la planta con una mezcla de jabón potásico y agua.

La unión hace la fuerza

Promover la biodiversidad en nuestro jardín nunca es mala idea. Además, cuando se trata de qué hacer para que las plantas no tengan plagas, esta es una solución natural muy efectiva.

No a todos los insectos les atraen las mismas plantas. De hecho, hay variedades que les resultan bastante repelentes. Pues bien, si ponemos estas plantas junto a otras que les parezcan más apetecibles, podemos evitar el ataque.

Es muy sencillo, si tienes problemas como los mosquitos o la mosca blanca, prueba a poner una maceta con albahaca cerca de las plantas a las que suelen atacar. Si tu problema es con los caracoles o las hormigas, entonces dale protagonismo a la capuchina.

Este fomento de la biodiversidad también puede atraer a insectos que son beneficiosos para tus plantas y que se alimentan de otros como los pulgones. Es lo que ocurre con las mariquitas.

Asea tus plantas

Planta atacada por una plaga de insectos.

Cuanto más limpias estén nuestras plantas y su entorno, mucho mejor para prevenir la aparición de plagas.

Si las tienes en macetas, asegúrate de que no queda agua acumulada en el platillo, y procura retirar las hojas, tallos y flores que estén en mal estado. No te olvides de los desechos vegetales que hayan caído en la superficie del sustrato, estos también los tienes que retirar. ¿Por qué es esto efectivo? Porque estamos eliminando cualquier posibilidad de que los insectos se puedan refugiar.

En el caso de plantas cultivadas directamente en el jardín, es importante que elimines las malas hierbas, porque estas atraen a una gran cantidad de insectos.

Si aseas bien tus plantas las mantienes a salvo de plagas y, a la vez, consigues que se vean más bonitas, así que no dudes en hacerlo.

Riega de forma correcta

En innumerables casos un riego inadecuado está detrás del desarrollo de plagas.

Si no regamos las plantas con suficiente frecuencia se van a debilitar y eso atraerá a los insectos. Por el contrario, si las regamos en exceso corremos el riesgo de que las raíces se encharquen y se empiecen a pudrir. Si esto sucede, existen muchas posibilidades de que las plagas hagan acto de presencia y, además, aparezcan hongos.

La solución pasa por proporcionar un riego adecuado a cada especie. En la mayoría de los casos hay que dejar que el sustrato se seque ligeramente entre un riego u otro, aunque hay variedades como las suculentas en las que es mejor esperar a que la tierra esté totalmente seca antes de proporcionarles agua de nuevo.

Airea la tierra

Tanto a las plantas de exterior como a las de interior les va bien que aireemos el sustrato de vez en cuando. Esto es algo que podemos hacer con un rastrillo o con la mano y siempre de forma superficial (no se trata de ponerse a excavar).

Lo que hacemos es descompactar el suelo, algo que favorece la absorción de agua y nutrientes. Además, al hacer esto también acabamos con los insectos que han podido anidar en la superficie de la tierra.

Ya sabes qué hacer para que las plantas no tengan plagas, ahora solo falta que pongas estos consejos en práctica. ¿Te animas?


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