Los escombros del jardín, los residuos que se van generando cuando hacemos las labores de mantenimiento de nuestras plantas, y también cuando estas dejan caer sus hojas y sus flores, pueden tener una segunda vida.
Normalmente nos limitamos a recogerlos y tirarlos, pero lo cierto es que podemos aprovecharlos en nuestro propio beneficio o en beneficio de nuestras plantas, como te vamos a mostrar en esta ocasión.
La importancia de mantener el jardín libre de escombros
Que el jardín esté limpio y libre de restos vegetales y de otros elementos como rocas es fundamental para cuidar de la salud de nuestras plantas.
Aunque restos como las hojas o el césped cortado pueden parecer inofensivos, si no los gestionamos bien se pueden convertir en una fuente de problemas.
Al eliminar estos restos lo que estamos haciendo es:
- Prevenir plagas y enfermedades. Los restos vegetales en descomposición pueden convertirse en un caldo de cultivo para hongos, bacterias y otros patógenos con capacidad para infectar a las plantas. Además, atraen a insectos que pueden dañar el jardín.
- Mejorar la estética del jardín. Cuando está lleno de restos como ramas u hojas secas, el jardín muestra un aspecto poco cuidado y atractivo, que no invita a pasar tiempo en el mismo.
- Facilitar el mantenimiento. Si no permitimos que los restos vegetales se acumulen, hacer tareas como la poda o la siembra nos va a costar mucho menos.
- Prevenir incendios. En las épocas de sequía los restos vegetales secos pueden convertirse en un combustible para la propagación de incendios.
- Proteger el medio ambiente. Si le damos un uso alternativo a los restos vegetales que hemos recogido, evitamos que se descompongan en vertederos. Con esto conseguimos reducir las emisiones de metano, que es uno de los responsables del efecto invernadero.
Alternativas ecológicas y creativas para los escombros del jardín
Los residuos que genera tu jardín pueden servir para ayudar a que este siga creciendo y esté cada vez más bonito, solo hace falta darles el tratamiento adecuado.
Compostaje
El compost es un abono natural rico en nutrientes que consigue mejorar la calidad del suelo a la vez que promueve un crecimiento saludable de las plantas.
Puedes compostar escombros del jardín tales como restos de poda, hojas o césped. Además, le puedes añadir otros desechos que se generan en el hogar como los posos del café, cáscaras de frutas y verduras y las sobras de la comida que no sean ni carne ni huesos.
Se puede hacer compost apilando residuos orgánicos en capas, alternando materiales verdes ricos en nitrógeno como el césped con materiales marrones ricos en carbono, como ocurre con las hojas secas.
Sin embargo, lo más limpio y seguro es hacer uso de una compostera, que es un contenedor especial para compostar.
Mulching
El mulch es una capa de productos de origen natural que se extiende sobre el suelo y ayuda a retener la humedad, porque reduce la evaporación del agua.
También evita la erosión, suprime el crecimiento de malezas y regula la temperatura del suelo.
Puedes hacer mulch con los restos que genera tu propio jardín. Por ejemplo, con hojas secas picadas, corteza de pino o paja.
Lo único que tienes que hacer es extender una capa de mulch de unos cinco a 10 centímetros de grosor, pero sin llegar en ningún caso a tapar los tallos de las plantas.
Mantas térmicas
Si tienes plantas o árboles de hoja caduca, puedes aprovechar todas las hojas que pierden en otoño para hacer mantas térmicas para otras plantas que necesitan de una especial protección frente al frío.
Solo tienes que cubrir las plantas con estas hojas secas. Eso sí, asegúrate de que las hojas están sanas, porque si están infectadas por algún hongo o bacteria la planta que cubres se podría contagiar.
Nidos para pájaros
Con las ramas y otros restos naturales de tus plantas puedes construir nidos y así atraer a las aves a tu jardín.
Procura situarlos en zonas donde no perciban que tienen a los humanos muy cerca, o no querrán utilizarlos.
Construcción de elementos decorativos
Con materiales como rocas, troncos o ramas obtenidas en tu jardín puedes crear interesantes objetos decorativos totalmente naturales y personalizados.
Algunas ideas son:
- Utilizar rocas, troncos y ramas para crear estructuras que delimiten espacios dentro del propio jardín.
- Reciclar los troncos para crear maceteros.
- Emplear restos como piedras, cortezas de pino o trozos de madera para crear senderos naturales en el jardín.
Consejos para reutilizar los escombros del jardín
Para conseguir mejores resultados, prueba a seguir estos sencillos consejos que te damos:
Separa los residuos
Al limpiar el jardín procura separar los restos naturales como las ramas o las hojas de otros residuos que también pueden aparecer, como los plásticos o el vidrio.
Aprovecha para reciclar de forma adecuada aquellos materiales no naturales que hayas encontrado.
Al separar los materiales te evitas posibles accidentes al manipular los restos vegetales y también la contaminación del material orgánico si lo vas a utilizar para hacer compost o mulch.
Si alguno de los restos vegetales pertenece a plantas que están enfermas o están sufriendo una infestación de insectos, estos desechalos directamente para que el problema no se propague por el jardín.
Pica los materiales
Cuanto más pequeños sean los trozos de material orgánico antes se van a descomponer. Para dejarlos reducidos a la mínima expresión puedes utilizar una trituradora de jardín pero, si no dispones de una, con las herramientas de jardinería también los puedes picar manualmente.
Riega el compost
Si vas a usar los restos para hacer compost, es importante que lo mantengas húmedo para activar a los microorganismos que se encargan de descomponer la materia orgánica.
Pero no lo encharques, ya que en este caso vas a generar malos olores y a atraer a los insectos.
Los escombros del jardín pueden tener una segunda vida en tu propio jardín. Lo único que tienes que hacer es recogerlos y darles el tratamiento adecuado para que estén listos para ser usados como compost, a modo de mulch, etc. ¿Nos cuentas cómo reciclas tú los residuos que genera tu jardín?