Rhaphidophora tetrasperma. ¿Te suena ese nombre? Lo más seguro es que no. Pero si decimos monstera mínima la cosa puede cambiar. Se trata de una planta muy parecida a las monsteras más conocidas, pero esta no lo es tanto (a pesar de su belleza en sí).
¿Quieres saber más de ella? ¿Te gustaría que te hablásemos de las diferencias que hay con otras monsteras o por qué elegirla frente a otras plantas? Pues dicho y hecho, a continuación tienes toda la información que debes saber sobre ella.
Características de la Rhaphidophora tetrasperma
El nombre Rhaphidophora tetrasperma es el científico, pero en el mercado, además de por ese nombre, la puedes encontrar por monstera mínima, philodendron Ginny o philodendron Piccolo (entiendo esa palabra por «pequeño», no por cierto namekiano que vive en la Tierra).
Es originaria de Tailandia y Malasia y por lo que has visto, se la confunde habitualmente con la monstera deliciosa (porque es muy parecida) o con algunos philodendron o epipremnum (sobre todo el pinnatum). El hábitat natural de esta planta suele ser un bosque que va de seco a húmedo (es decir, que puede tolerar distintos ambientes).
Llega a crecer entre un metro y metro y medio de altura si está en interior. Sin embargo, si la pones en el jardín y está bien cuidada, que no te extrañe que pueda superar los tres metros y medio.
Lo más bonito de la Rhaphidophora tetrasperma son sus fenestraciones. Si no has oído antes esta palabra te diremos que son esos agujeros que tienen las hojas. Es trepadora y lo cierto es que crece bastante rápido. En algunos países incluso la consideran invasiva de lo rápido que crece, sobre todo al aire libre.
Una de las principales diferencias entre la Rhaphidophora tetrasperma y la monstera deliciosa está, sobre todo, en su tamaño. Esta de la que te hablamos suele ser más pequeña y además difiere también en cuanto al tono de color de las hojas y a la textura.
Las hojas de la Rhaphidophora tetrasperma
En este caso las hojas son de forma lanceolada u ovada. Cada hoja tiene agujeros o siluetas diferentes (sus fenestraciones) y eso la hace única entre ellas.
Si tocas sus hojas sentirás que son muy delgadas y al mismo tiempo flexibles. Esto, en la monstera deliciosa no pasa, son más rígidas.
En cuanto al color de las hojas suelen ser verdes claras, no tan oscuras como las de la deliciosa.
¿La Rhaphidophora tetrasperma echa flores?
Si te lo estás preguntando, la respuesta es sí, las echa. Pero no es fácil verlo en el interior. Esto solo ocurre cuando la tenemos en el jardín o fuera de casa.
Si tienes la suerte de tener una fuera, y está bien cuidada, lo más seguro es que te produzca flores en forma de canoa. Primero sale una especie de espata. Dentro estará un espádice que es de donde saldrán unos racimos de flores muy pequeñas, pero muy hermosas.
Ahora bien, lo cierto es que, si esperas que tengan fragancia, te vas a quedar con las ganas, porque no ocurre. Es una planta que no emite ningún tipo de olor. Así que si alguna vez te huele mal, entonces ya puedes revisarle la tierra y raíces porque es un aviso de que estas se están pudriendo por un exceso de riego.
Cuidado, es tóxica
Al igual que con otras plantas aroides, la Rhaphidophora tetrasperma no iba a ser menos en cuanto a toxicidad. No es adecuada si tienes mascotas o niños porque contiene cristales de oxalatos de calcio.
Si eres sensible a este elemento puedes sufrir de irritación (al tocarla o rozarla) así como de molestias.
Si además los animales o niños se comen alguna hoja pueden tener irritación en la boca y la garganta, además de ardor, adormecimiento, etc. Y si se toma demasiado (por ejemplo, por un perro al que le gusten las plantas), podría causarle la muerte.
Cuidados de la Rhaphidophora tetrasperma
Tener una Rhaphidophora tetrasperma en casa es un lujo. Pero has de asegurarte de que la cuidas bien. Por eso, queremos dejarte aquí los principales cuidados que no deberías descuidar. Estos son:
Iluminación
En su hábitat natural esta planta crece en semisombra, por lo que podemos intuir que te va a pedir luz, pero no directa sino indirecta.
Si la colocas en el exterior, una buena idea puede ser ponerla bajo un árbol. De esta forma lo usará para trepar.
Temperatura
Lo ideal para esta planta está entre 12 y 29 grados. Las temperaturas bajas no las soporta, y tampoco es especialmente ducha con las altas. Así que si vives en una zona donde hace mucho frío y mucho calor, salvo que consigas adaptarla, lo vas a pasar mal con esta planta.
Sustrato
La tierra para la Rhaphidophora tetrasperma debe ser muy rica en materia orgánica. Una mezcla de turba con perlita sería lo ideal. Eso sí, asegúrate de que el pH del suelo sea ligeramente ácido o neutro.
Riego
La Rhaphidophora tetrasperma es un poco exigente en este aspecto. Le encanta tener la tierra húmeda, pero no encharcada porque eso lo único que hará será pudrirle las raíces.
Intenta establecer un orden, y solo cuando veas que se le está secando la tierra, podrás regar.
En verano es posible que te demande más agua pero en invierno, con la humedad que haya, a lo mejor no tienes que regarla.
Hablando de humedad, lo mejor para esta planta es conseguir tenerla entre un 50 y un 60%. Puede tolerar menos, pero si baja a 30 o menos es mejor tener un humidificador cerca que le ayude a mantener su hidratación a raya.
Abonado
Desde primavera a otoño deberás abonarla porque al ser de rápido crecimiento consume los nutrientes muy, muy rápido. Al principio puedes echarle una vez al mes pero si ves que está muy activa, podrías dosificarlo cada 15 días.
Multiplicación
Se puede reproducir a través de esquejes. Cuando la podes, puedes utilizar parte de esos cortes para que salgan nuevas plantas. Para ello es importante que el tallo tenga un nudo y al menos una hoja. Si la pones en agua saldrá sin problema.
Aparte, también puedes conseguir semillas, pero estas tardarán bastante más en crecer y llegar a verla como una planta.
Usos
Finalmente, queremos hablarte de los usos de la Rhaphidophora tetrasperma. Realmente, más allá del decorativo, no tiene otros. Es ideal para poner tanto dentro como fuera de casa. Pero no solo como maceta alta, sino también colgante, ya que puede ser otra forma.
Incluso, algunos, lo que hacen es darle una determinada forma para que luzca mejor.
A nivel medicinal o para fabricar elementos no hemos encontrado ninguna referencia a esta planta.
Ahora que conoces la Rhaphidophora tetrasperma, ¿te animarías a tenerla en casa?