Rosa Chrysler Imperial, el rosal que te falta en el jardín

Rosa Chrysler Imperial

El mundo de las rosas es bastante amplio y eso hace que puedas encontrar muchas variedades. Una de las más hermosas, sobre todo si te gustan las de color rojo, es la rosa Chrysler Imperial. Pero, ¿qué sabes de ella?

A continuación te hablamos de todas las características que tiene este cultivar y de los cuidados que debes proporcionarle para que esté sano y se mantenga en tu jardín por muchos años. ¿Empezamos?

Cómo es la rosa Chrysler Imperial

Rosas de color rojo intenso

Vamos a empezar hablándote de la rosa Chrysler Imperial, un cultivar que se consiguió en 1952 por Lammerts, rosalista estadounidense que lo creó en California. Se trata de una rosa que supone el cruce de la ‘Charlotte Armstrong’ y la ‘Mirandy’, también esta de Lammerts, conseguida en 1944).

El resultado fue un rosal que puede alcanzar el metro y medio de altura; y casi esa misma extensión a lo ancho. Dispone de unas flores bastante grandes, solitarias, de color rojo terciopelo. La componen entre 30 y 40 pétalos. Su máxima floración se da en primavera o verano. Además, debes saber que es una rosa con mucho perfume, lo que hace que el jardín se llene de ese aroma tan especial (sobre todo si florece con varias flores al mismo tiempo y estos están en capullo, que es cuando más huelen).

Ahora bien, tienen un detalle que no muchos conocen. Y es que la flor es roja pero, pasados unos días ya florecida, pierde ese color y se transforma en una más púrpura. Es por eso que es tan apreciada, por el hecho de que pueda cambiar el color una vez florece.

En cuanto a las hojas, estas no son brillantes, sino más bien mates. Tienen un color verde oscuro y son bastante abundantes en este rosal.

Su porte suele ser en vertical pero es común que, si lo tienes durante varios años, veas cómo, al ir ganando altura, su parte baja se va quedando «calva», haciendo que parezca más un rosal de copa que uno de arbusto.

Cuidados de la rosa Chrysler Imperial

Detalles de los pétalos

Ahora que has conocido más a fondo la rosa Chrysler Imperial, ¿qué tal si te dejamos una guía práctica para que, si te decantas por este rosal, sepas cuidarlo? Su compra no es difícil, hay algunas tiendas de plantas que tienen este cultivar y, si bien no es tan barato como otros rosales, suele ser bastante resistente y fuerte, con lo que merece la pena la inversión para tu jardín (siempre que lo sepas cuidar).

A este respecto, aquí te dejamos lo más importante:

Ubicación y temperatura

Como cualquier otro rosal, la rosa Chrysler Imperial tienes que colocarlo en un lugar con mucha luz directa. Necesita entre 8 y 10 horas de sol directo, por lo que no te debes preocupar porque le dé mucha luz. Eso sí, cuando son pequeños, a veces antes hay que adaptarlos (sobre todo si los compras en un vivero porque estos no están acostumbrados al sol directo ni a temperaturas demasiado altas). Pero una vez se adapte, lo mejor es ponerlo en el exterior.

Ahora bien, hay algunos que en lugar de colocarlo a pleno sol lo que hacen es ponerlo en semisombra. Y lo hacen con un motivo concreto: mantener las rosas rojas el mayor tiempo posible. Y es que, cuando el rosal está al sol, las rosas pasan del rojo al púrpura en cuestión de días; pero si lo pones en semisombra, aunque eso implicará tener menos flores, estas mantendrán algo más (no mucho) el color rojo tan característico del rosal.

En cuanto a la temperatura, es obvio que aguanta muy bien las altas temperaturas, pero también las bajas. De hecho, puede soportar hasta las heladas.

Sustrato

La rosa Chrysler Imperial necesita que le eches una tierra que sea muy fértil y, al mismo tiempo, que tenga un buen drenaje. Una mezcla bastante útil para los rosales, de la que te hemos hablado en varias ocasiones, es una con sustrato universal, humus de lombriz y arcilla expandida o perlita.

Con esta tendrá lo suficiente para que las raíces se desarrollen de manera adecuada y puedan tener la humedad que necesitan sin que se les encharque la tierra.

Riego

Son más fragantes cuando son capullos

El riego es una de las partes más importantes de este rosa. Para empezar, no le gustan los riegos cortos y repetidos; sino que prefiere que le eches bastante agua y que espacies bastante los riegos.

Para que te hagas una idea; en verano solo va a necesitar tres o cuatro riegos a la semana (en primavera con uno es suficiente), mientras que en otoño e invierno puede pasar con un riego cada dos semanas o uno al mes.

A la hora de regar no conviene que el agua roce la base del rosal ni tampoco las hojas. La parte de la base es para que no se vaya a pudrir por esa zona; mientras que el hecho de no salpicar las hojas es debido a que las gotas pueden hacer de espejo y, con el sol, provocar quemaduras en el rosal.

Abonado

Uno de los mejores para la rosa Chrysler Imperial es, sin duda, el abono orgánico, como puede ser el estiércol. Puedes echárselo al final del otoño o en invierno para que al llegar la primavera esté listo para echar nuevos brotes y florecer.

En caso de que no puedas encontrar este, entonces te recomendamos que utilices uno de liberalización rápida para aplicar uno al principio de la primavera y otro más al principio del verano.

Poda

Has de tener cuidado con la poda en el rosa Chrysler Imperial, ya que no la lleva muy bien. Esta se realiza al final del invierno o a primeros de primavera, siempre antes de que brote (si ya te ha brotado es mejor que no lo cortes o al final te lo puedes cargar).

Empieza eliminando la madera muerta, las ramas secas, débiles o aquellas que se entrecruzan y molestan entre sí. Una vez lo hayas aireado, tendrás que cortar las ramas que queden para que puedan brotar (asegúrate de que lo haces siempre por encima de una yema floral).

Plagas y enfermedades

Te podríamos decir que los pulgones o la araña roja son dos de las plagas habituales. Pero lo cierto es que este rosal los resiste muy bien.

Sin embargo, el mildiu es uno de los problemas más importantes para este cultivar. Notarás que aparece porque le salen manchas negras en las hojas. Si eso pasa, tendrás que buscar un buen tratamiento para fungicida ya que puede acabar con el rosal (e intenta escoger uno que no lleve cobre porque es muy sensible a esta sustancia).

¿Tienes alguna duda sobre la rosa Chrysler Imperial?


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