La Schefflera ‘Gold Capella’ es una planta de interior que está cobrando mucha popularidad gracias a sus hojas que combinan el color verde con el amarillo.
Una de sus grandes ventajas es que es bastante sencilla de cuidar, así que no le tengas «miedo» y dale una oportunidad para que llene de belleza tu hogar o tu lugar de trabajo.
Origen y hábitat natural de la Schefflera ‘Gold Capella’
También conocida como cheflera o árbol paraguas, es una variedad ornamental de la especie Schefflera arboricola.
Existe cierto desconocimiento sobre su lugar exacto de origen, ya que ha pasado por diferentes procesos de hibridación y selección. Si atendemos a la Schefflera arboricola de la que desciende, esta es originaria de zonas tropicales y subtropicales de Asia y el Pacífico, siendo común su presencia en países como Filipinas y Taiwán.
Las Scheffleras crecen en bosques húmedos y sombreados, utilizando sus raíces aéreas para adherirse a los troncos de árboles más grandes (son epífitas).
Como tienen una buena capacidad para adaptarse a diferentes condiciones de luz y son bastante resistentes, estas plantas se han convertido en una variedad de interior muy apreciada.
Características físicas que identifican a esta Schefflera
Es una planta que puede alcanzar una altura considerable en interiores si conseguimos crear para ella el ambiente adecuado. En cuanto a su forma, esta es redondeada y compacta, con ramas que se extienden desde el tallo principal.
Hojas
Sin duda, son lo más llamativo. Son palmeadas, compuestas por varios foliolos que se extienden desde el punto central. De hecho, nos recuerdan ligeramente a una mano.
Pueden llegar a alcanzar un buen tamaño, lo que contribuye todavía más a la apariencia exuberante que tiene esta planta.
El rasgo distintivo de esta variedad es que las hojas combinan un color amarillo dorado con bordes de un verde más oscuro. Además, tienen un ligero brillo natural que aumenta su atractivo visual.
Su textura es ligeramente coriácea (similar al cuero) y esto les confiere cierta resistencia.
Tallo
El tallo de la Schefflera ‘Gold Capella’ puede llegar a pasar desapercibido entre la frondosidad de las hojas.
Normalmente es de color verde, aunque puede variar de color en función de las condiciones de cultivo.
Su patrón de crecimiento es erguido y se va ramificando con el tiempo, creando una estructura arbustiva.
Cuidados de la Schefflera ‘Gold Capella’
Si quieres tener en casa una planta espectacular, estos son los cuidados que le tienes que dar a esta variedad de Schefflera.
Ubicación ideal
El lugar en el que situamos la maceta va a incidir de forma directa en el aspecto y la vitalidad de la planta, de ahí la importancia de escoger una buena ubicación.
En este caso vamos a buscar un rincón luminoso pero en el que la luz no llegue de forma directa. Podemos, por ejemplo, situar la maceta con la Schefflera cerca de una ventana por la que la luz llegue filtrada a través de una cortina.
Por lo que respecta a la temperatura, aunque la planta puede adaptarse a los cambios, lo ideal es no exponerla ni a corrientes de aire frío ni a temperaturas que estén por debajo de los 10º C.
Puede tolerar ambientes secos pero, dado que tiene un origen tropical, notarás que su aspecto es mucho mejor si tiene un grado moderado de humedad a su alrededor. Esto se lo puedes proporcionar pulverizando de forma regular sus hojas con agua no calcárea.
Condiciones de riego
De lo que acabamos de señalar seguro que has deducido que a esta planta no le va nada bien el agua que tiene mucha cal, porque esta se puede acumular tanto en el sustrato como en las hojas e impedir a la planta realizar sus funciones vitales.
Utiliza agua a temperatura ambiente y libre de cal. Puede ser agua del grifo si en tu zona el agua es blanda, pero también puedes recurrir al agua mineral o al agua destilada.
La frecuencia de riego va a depender de factores como el tamaño de la maceta, el tipo de sustrato utilizado o la época del año en la que nos encontremos. Pero lo más recomendable es que dejes que el sustrato se seque ligeramente entre un riego y otro.
A la hora de darle agua a tu planta, hazlo siempre con moderación, porque no queremos que las raíces se lleguen a encharcar.
Durante los meses de primavera y verano puedes enriquecer el agua de riego con un fertilizante líquido para plantas verdes.
Sustrato para la Schefflera ‘Gold Capella’
Asegúrate de utilizar un sustrato con una buena capacidad de drenaje. Aunque siempre es buena idea reforzar todavía más esa capacidad añadiéndole un poco de perlita o de arena.
Escoge un sustrato que sea de buena calidad y rico en materia orgánica y te aseguramos que notarás la diferencia en la vitalidad de tu planta y en su ritmo de crecimiento.
Poda
Como decíamos antes, esta variedad puede llegar a crecer bastante. Por eso, aunque la poda puede estar orientada a eliminar hojas secas y dañadas, en la mayoría de los casos tiene como objetivo final controlar el tamaño y la forma de la Schefflera.
La mejor época para afrontar la poda es entre finales del invierno y principios de la primavera, antes de que arranque la etapa de crecimiento activo.
A la hora de podar procura no eliminar mucho follaje de una sola vez para no debilitar a tu planta y utiliza siempre tijeras limpias y bien desinfectadas.
Tratamiento de problemas comunes
- Plagas. Si tu planta está siendo atacada por cochinilla algodonosa, araña roja o pulgones, aplica un insecticida específico o remedios caseros como el jabón potásico.
- Hojas amarillentas. Lo más probable es que sean debidas a un exceso de riego, un problema en las raíces o falta de nutrientes. Ajusta el riego y aporta fertilizante.
- Hojas marrones. Se deben a que la planta ha recibido demasiado sol, le falta humedad o está expuesta a corrientes de aire. Lo mejor en estos casos es cambiar su ubicación.
La Schefflera ‘Gold Capella’ es una planta de aspecto exuberante muy sencilla de cuidar. Si sigues las pautas que hemos visto, seguro que conseguirás que sea la protagonista de tu hogar.