Si te gustan las plantas suculentas, seguro que en tu casa tienes varias de ellas. Una de las más conocidas y apreciadas es la Sedum dendroideum, conocida por otros muchos nombres.
Pero, ¿qué sabes de esta suculenta? ¿Cómo es? ¿Cuáles son sus cuidados? En esta ficha vas a poder encontrar todo lo que necesitas saber sobre ella.
Cómo es la Sedum dendroideum
La planta Sedum dendroideum pertenece a la familia de las crasuláceas. De origen mexicano, también se la conoce por otros nombres como puede ser el de lágrima de María, Siempreviva y Siempreviva amarilla.
Se trata de una planta perenne que tiene un tallo muy ramificado. Este puede llegar a medir unos 75 centímetros. En cuanto a sus hojas, se distribuyen en forma de roseta, siempre en los extremos de los tallos y con curvadas en la punta. La mayoría de las veces son verdes, pero según el sol que reciban estas pueden cambiar de tonalidad (normalmente, con el sol se volverán rojas y lo mismo pasará con el frío).
Si la cuidas bien, en algún momento entre mediados del invierno y la primavera te va a dar flores, y estas son las que le dan ese sobrenombre de Siempreviva amarilla. Y es que son de ese color, además de tener una forma parecida a una estrella.
Cuidados de la Sedum dendroideum
Ahora que conoces un poquito más la Sedum dendroideum, es hora de pensar en cuáles son los cuidados para tenerla en casa. Es cierto que hablamos de una planta que es muy fácil de cuidar, pero eso no quiere decir que no tenga algunas necesidades que tendrás que tener en cuenta. ¿Cuáles? Te las contamos enseguida.
Ubicación y temperatura
Empezamos por la ubicación, y en este caso el mejor lugar donde puedes tener esta suculenta es fuera de casa. Le encanta el sol y no debes preocuparte de que esté en una zona muy calurosa o muy seca, porque se adaptará perfectamente. De hecho, mientras tenga algo de sol, no le importará estar en una zona de calor o en una donde haya heladas y bajen mucho las temperaturas.
Eso sí, la humedad no la tolera bien, pero si le pones un sustrato que drene bien y no la riegas demasiado no le pasará nada.
Lo importante para esta planta es la luz. Es imprescindible que tengan muchas horas de luz. Tampoco hay que colocarla en sol directo (aunque si lo haces lo normal es que sus hojas se vuelvan rojas), pero sí aportarle esa claridad.
En cuanto a la temperatura, como has podido ver, se adapta tanto al frío como al calor.
Sustrato
Como buena suculenta que es, es importante que se le proporcione un sustrato acorde para plantas suculentas y cactus, ya que así podrás tener una seguridad de que drene bien y que no se le pudran las raíces.
Puedes comprarlo hecho o bien hacerlo tú mismo mezclando perlita con una tierra orgánica rica en nutrientes. Eso sí, te recomendamos echar más cantidad de perlita para que las raíces queden más sueltas. No te preocupes que no querrá decir que la planta se vaya a caer si la plantas bien.
Aun así, tampoco exigen mucho del suelo, con lo que no tendrás problema en colocarla en cualquiera.
Riego
El riego tiene dos fases. La primera, de otoño a final del invierno, que será nulo, o casi nulo (dependerá de la temperatura que haya). Y la segunda, de primavera a final del verano, donde se regará al menos una vez a la semana.
El Sedum dendroideum tolera muy bien la sequía, así que no tendrás problema si te olvidas. Pero las pautas exactas de riego van a depender del clima que tengas en la zona ya que, si por ejemplo hay humedad, no conviene regarlo tanto.
Abonado
El abonado, al contrario que otras plantas, se debe realizar solo una vez al año, en otoño, y se hará con compost, estiércol…
Poda
Para que la planta esté sana y tenga una forma compacta, se recomienda que se pode al menos una vez al año. Esta poda se hará siempre a mediados de primavera, y conforme crezca podrás recortar de manera más liviana.
Plagas y enfermedades
Como sabes, el Sedum dendroideum es una planta «todoterreno» a la que apenas le afecta nada. En el caso de plagas y enfermedades, tampoco. Pero sí hay algo que debes tener muy en cuenta: el agua. No la tolera en exceso y puede fácilmente perder las raíces por culpa de ello. Así que es lo principal a tener en cuenta.
Reproducción
Multiplicar tu Sedum dendroideum no es nada complicado. De hecho, ella misma se multiplica. Cuando veas que salen los llamados «retoños» alrededor de la planta querrá decir que tiene «hijos». Si los separas, con cuidado, y los plantas en una maceta, esta crecerá igual que su «madre» y también generará hijos.
Otra opción para multiplicarla es a través de las hojas o del tallo cuando esté debajo de una roseta. Tienes que dejarlos unos días al aire para que la herida se le cierre (es la mejor forma de conseguir que no se muera) y después plantarlo en tierra y regar solo cuando el sustrato esté seco.
También podrías ponerlos en perlita. Solo tendrías que rellenar un recipiente con ella, poner las hojas y echar agua. En cuestión de días deberían aparecer las raíces, pero cuidado, porque si la perlita se seca estas raíces podrían desaparecer y pudrir la planta (debido al agua).
Usos
Debes saber que la Sedum dendroideum no solo es una planta decorativa. Debido a su gran resistencia y a la habilidad para adaptarse a cualquier entorno, es una de las mejores candidatas para estar en tu jardín.
Pero también, en Brasil, esta planta es utilizada en medicina. De hecho, el zumo de las hojas de la planta es recomendable para aquellos que tienen problemas gástricos o bien inflamatorios.
También se le reconoce un uso antinociceptivo (es decir, que actúa sobre los nervios) y antiinflamatorio (aunque esto aún no se ha validado en humanos).
Como ves, la Sedum dendroideum es una planta ideal para aquellos que tienen problemas con la supervivencia de sus plantas o bien que no pueden proporcionar un entorno ideal para ellas. ¿Qué opinas tú de esta suculenta? ¿La tienes en casa?