
Imagen – Wikimedia/Anna Anichkova
Cuando vamos a diseñar un jardín una de las primeras plantas que tenemos que poner son los árboles, ya que son aquellas que alcanzarán un tamaño mayor y que, por lo tanto, darán sombra a las que tengan debajo.
Para ayudarte con esta tarea, hemos seleccionado para ti unos árboles de hoja perenne que, no sólo son fáciles de cuidar, sino que además son muy ornamentales. ¿Quieres saber cuáles son?
Además de la Acacia saligna que puedes ver en la imagen que encabeza el artículo, la cual alcanza una altura de unos 5m y un diámetro de copa de 4-5m, y que puede vivir en climas cálidos cerca del mar, hay otras especies muy interesantes que te queremos proponer:
Arbutus unedo
Imagen – Wikimedia/GPodkolzin
El Arbutus unedo es una especie de arbolillo originario de la región mediterránea. Alcanza una altura de 4 a 7 metros, y tiene la corteza del tronco de color rojizo. Las hojas son lanceoladas, y las flores se agrupan en panículas colgantes. Las bayas miden hasta 10 milímetros, son rojas cuando maduran, y comestibles.
Plantar al sol o en semisombra, y regar de vez en cuando. Es una planta que puede resistir bien los períodos secos cortos si está aclimatado (a partir del segundo año que esté en suelo). Asimismo, resiste heladas de hasta los -7ºC.
Brachychiton populneus
Imagen – Flickr/John Tann
El Brachychiton populneus es un árbol nativo de Australia que se conoce como árbol botella, kurrajong o braquitito. Su crecimiento es bastante rápido, llegando a los 40-60 centímetros en un solo año si se dan las condiciones adecuadas (es decir, si tiene sol y de vez en cuando agua). Su altura total una vez adulto es de 12 metros.
Se trata de una planta perfecta para regiones donde llueve poco, como el mediterráneo, ya que su raíz es resistente también al fuego. Soporta hasta los -7ºC.
Casuarina equisetifolia
Imagen – Wikimedia/PePeEfe
La Casuarina equisetifolia, conocida como casuarina cola de caballo, o pino asutraliano, es un árbol nativo de Australia, Malasia, y Polinesia. Crece hasta los 30 metros de altura, y tiene hojas alargadas, muy similares a las que tienen los pinos por ejemplo. Pero no es una conífera.
Es una planta muy adaptable. Vivirá bien tanto en la costa arenosa donde llueva poco, como en aquellas regiones montañosas donde las precipitaciones son abundantes (eso sí, en este caso, necesitará que el suelo tenga buen drenaje). Por si fuera poco, resiste hasta los -7ºC.
Citrus aurantium
El Citrus aurantium, llamado naranjo amargo, es un híbrido entre Citrus maxima y Citrus reticulata. Alcanza una altura de 7 a 8 metros, y sus hojas son de color verde oscuro brillante, olorosas. Las flores son blancas y muy fragantes. Produce frutos parecidos a las naranjas, de unos 7 centímetros, los cuales se usan para hacer mermeladas y compotas.
En cultivo no es exigente. Necesita sol directo, tierra fértil, así como riegos moderados. Soporta bien el frío y las temperaturas de hasta los -4ºC.
Cupressus arizonica
Imagen – Wikimedia/Ken Lund
Si quieres una conífera perennifolia, te recomendamos el Cupressus arizonica, o ciprés de Arizona. Es originaria del sudoeste de Norteamérica, en concreto, crece en todo el sur de Estados Unidos y llega hasta el norte de México. Alcanza una altura de 10 a 25 metros, con un tronco de 50 centímetros de diámetro. Sus hojas son de color gris verdoso, o azul verdoso.
Tiene que estar al sol, y crecer sobre suelos que no se encharquen. Soporta la sequía, y las heladas de hasta los -18ºC.
Grevillea robusta
Imagen – Wikimedia/Bidgee
La Grevillea robusta es nativa del este de Australia. Sus curiosas inflorescencias pueden ser rojas o rosas. Alcanza una altura de 18 a 35 metros, y tiene un crecimiento rápido. Las hojas son bipinnadas, similares a las que tienen algunos helechos.
Se puede cultivar en climas templados, donde haya heladas ligeras de hasta -7ºC.
Ficus benjamina
Imagen – Wikimedia/Forest and Kim Starr
La mayoría de los Ficus son árboles que no se suelen poner mucho en los jardines a no ser que sea para poder consumir los deliciosos higos de algunas especies, como Ficus carica. Sin embargo, si quieres darle un toque tropical a tu rincón verde, y siempre que tengas suficiente espacio, es interesante el Ficus benjamina, el cual alcanza una altura de 15 metros. Es nativo del sur y sureste de Asia, y del sur y norte de Australia. Sus hojas son verdes o variegadas, y produce frutos (higos) comestibles para varias aves.
Vivirá en climas tropicales, subtropicales, e incluso puede hacerlo en los templados-cálidos si las heladas son muy débiles (hasta -2ºC) y cortas.
Ilex aquifolium
El Ilex aquifolium, popularmente llamado acebo, es un arbusto árbol que puede alcanzar los 20 metros de altura. Es originario del oeste de Asia y de Europa, y tiene hojas ovaladas, con el borde espinoso. Sus flores miden unos 9 milímetros de diámetro, y se agrupan en cimas densas. Los frutos son drupas globosas de color rojo al madurar.
Su ritmo de crecimiento es bastante lento; en cambio, puede vivir unos 500 años. Plántalo a pleno sol o semisombra, y riégalo de vez en cuando. No soporta la sequía, pero sí las heladas de hasta los -12ºC.
Magnolia grandiflora
La Magnolia grandiflora es uno de los pocos árboles de hoja perenne que podemos encontrar en Asia, aparte de las coníferas por supuesto. Este espectacular árbol tiene un crecimiento más bien lento, llegando a alcanzar una altura de unos 35 metros. Sus flores son espléndidas, como puedes ver en la imagen, y además huelen de maravilla.
Pon una Magnolia si vives en una zona con clima subtropical o templado-suave, con heladas de hasta -18ºC, y disfruta.
Spathodea campanulata
La Spathodea campanulata (más conocida con el nombre de Tulipero del Gabón), es un árbol originario de África tropical cuyo crecimiento es muy rápido. Alcanza una altura de 7 a 25 metros, y tiene una copa densa formada por hojas compuestas. Las flores son rojizas-anaranjadas, o amarillas.
Es perfecto para jardines cálidos, libres de heladas, ubicado en una zona donde el sol le dé directamente.
¿Qué te ha parecido esta selección? ¿Conoces otros árboles de hoja perenne?