Las suculentas blancas puras, realmente, son muy escasas. Pero hay muchas especies que están recubiertas de una cera que es lo que hace que se vean así. Esta cera es importante para ellas ya que les protege de la radiación solar, la cual puede ser muy intensa en sus lugares de origen.
Pero, ¿cuáles son sus nombres? Porque, claro, saberlos nos ayudará a saber más sobre ellas, y por lo tanto, a cuidarlas mejor. Pues bien, a continuación vamos a presentártelas.
Selección o tipos de suculentas blancas
Si quieres decorar tu hogar con unas plantas suculentas blancas, has de saber hay varias con las que podrás disfrutar mucho. Estas son:
Caputia tomentosa
Imagen – Flickr/Arthur Chapman
La Caputia tomentosa es una suculenta conocida como senecio lanudo, suculenta de nieve o por su anterior nombre científico, Senecio haworthii. Es una planta nativa de El Cabo, en Sudáfrica, que tiene hojas carnosas, delgadas, que crecen casi en vertical y cubiertas de cera. Alcanza una altura de 10-25 centímetros, y aunque florece sus flores son del mismo color que la planta, por lo que pueden pasar desapercibidas.
Cotyledon orbiculata
Imagen – Wikimedia/JMK
El Cotyledon orbiculata es un arbusto suculento que puede alcanzar 1,5 metros de altura. Es endémico de Sudáfrica, y desarrolla un tallo ramificado del cual brotan hojas verde glaucas con el margen rojo. Tanto su follaje como el tallo están recubiertos de cera blanca. Florece en primavera, produciendo flores con forma de campana de color naranja o amarillo las cuales surgen de un tallo de 60 centímetros de alto.
Cotyledon undulata
Imagen – Flickr/Zruda
El Cotyledon undulata es una planta que podría etiquetarse como suculenta blanca. Es un pequeño arbusto originario de África que alcanza una altura de 50 centímetros cubierto por cera blanquecina. Ramifica desde la base, y tiene hojas con forma de vieira, que es un tipo de almeja marina. Es muy curiosa esta especie, porque cuanto mayor es la radiación solar, más rojizas se vuelven sus hojas, empezando por los bordes, y después por el envés de las hojas pues es lo que queda más expuesto. Sus flores son naranjas o amarillas.
Dudleya brittonii
Imagen – Wikimedia/Zruda
La Dudleya brittonii es una suculenta nativa de México que forma rosetas de hojas carnosas, con forma más o menos triangular, cubiertas de cera blanquecina. Puede alcanzar una altura de hasta 1 metro, pero es difícil que supere los 30 centímetros. Las flores surgen de un tallo de 30-35 centímetros de alto, y son verdosas.
Dudleya farinosa
Imagen – Flickr/John Rusk
La Dudleya farinosa es una suculenta no cactácea nativa de Oregón y California. Crece formando una roseta de hojas de color verde muy claro, con un diámetro de hasta 6 centímetros y una altura aproximada de 5 centímetros. Tiene flores amarillas, pequeñas, pero muy numerosas.
Echeveria cante
Imagen – Wikimedia/Marco Wentzel
La Echeveria cante es una suculenta blanca de buen tamaño, que alcanza un diámetro de 30 centímetros por 50 centímetros de altura. En realidad, más que blanca es de color verde glauco, pero dependiendo de la cantidad de cera que tenga en sus hojas se verá más o menos blanquecina. Sus flores brotan en primavera, y son rosas.
Echeveria laui
Imagen – Wikimedia/Roland zh
La Echeveria laui es una planta a la que llaman roseta, nativa de México, que crece hasta los 30 centímetros de diámetro por unos 5-7 centímetros de altura. Sus hojas son carnosas, de color verde oscuro, cubiertas de una cera casi blanca. Florece en primavera produciendo un tallo floral de unos 10 centímetros, en cuyo extremo brotan flores también suculentas de color rosado.
Senecio candicans ‘Angel Wings’
Imagen – Ruedes Boulets
A veces llamado simplemente Senecio ‘Angel Wings’, es una planta que alcanza una altura de 1 metro, si bien se puede tener más baja si se poda. Es una variedad con hojas verdes cubiertas de cera o polvo blanco por ambas caras, con el margen algo dentado. Sus flores, de color amarillo anaranjado, brotan en invierno.
¿Cómo se cuidan?
Las suculentas blancas necesitan una serie de cuidados que, si bien no son complicados, sí que es conveniente conocer:
Ubicación
Imagen – Wikimedia/Jim Evans
En primer lugar, hablaremos de la ubicación, es decir, de dónde hay que ponerlas. Lo más recomendable es que estén en un lugar en el que haya mucha luz natural, pero también se pueden acostumbrar y aclimatar poco a poco y de forma gradual a la exposición solar directa.
El proceso de aclimatación se ha de hacer en primavera o en otoño, pues es cuando la radiación del sol es menos intensa. Consistirá en ponerlas una hora, ya sea por la mañana temprano o a última hora de la tarde, expuestas al astro rey directamente, e ir aumentando el tiempo de exposición en una hora durante las próximas semanas.
Son muy interesantes para tener en jardines con suculentas, donde aportarán color y exotismo a la zona.
¿Se pueden tener en casa?
Hay quien las tiene como plantas de interior. Pero las suculentas blancas necesitan mucha luz, de ahí que se aconseje cultivarlas en balcones, terrazas, patios, o como poco en una habitación en la que haya ventanas por las que los rayos del sol entren sin dificultad.
Eso sí, si en tu zona hay heladas, sí que tendrás que protegerlas en casa.
Tierra o sustrato
- Maceta: se ha de llenar con una mezcla de turba con perlita (en venta aquí) al 50%, o bien con tierra para cactus y crasas (en venta aquí). Es importante que la maceta tenga agujeros en su base para que las raíces no se pudran.
- Jardín: se pueden plantar en el suelo siempre que la tierra sea ligera y no se encharque.
Riego
El riego de suculentas es lo más complicado y, a la vez, lo más fácil ya que hay que regarlas cuando la tierra esté completamente seca. Para saberlo, puede ser muy útil usar un medidor de humedad, el cual al introducirlo en la tierra nos indicará cuán húmeda o seca está.
Otra forma de saberlo, si las tenemos en macetas, es cogiéndola nada más regarlas y de nuevo pasados unos días. Dado que la tierra para cactus pesa poco, cuando esté seca notaremos que la maceta casi no pesa.
Abonado
Es recomendable abonar las suculentas blancas durante la primavera y el verano. Para ello se usarán abonos específicos para cactus y crasas (como este).
Trasplante
Imagen – Flickr/cultivar413
Se han de cambiar de maceta cada 2 o 3 años aproximadamente. La época ideal para ello es la primavera. Y si quieres plantarlas en el suelo, has de hacerlo cuando las temperaturas superen los 18ºC.
Rusticidad
Todas las que hemos visto soportan el calor de hasta 40ºC, así como el frío. Pero las heladas pueden perjudicarlas, por eso es aconsejable tenerlas en casa si las temperaturas bajan de los -2ºC.
¿Conocías a las suculentas blancas? ¿Qué te han parecido?