Taraje (Tamarix canariensis)

Las flores del Tamarix canariensis son blancas

Imagen – Wikimedia/Javier martinlo

Hay árboles que necesitan poca agua para florecer y crecer con salud. Estos suelen ser además los que resisten las altas temperaturas, y los que a su vez las heladas -siempre que sean débiles- no les perjudican en exceso. Un ejemplo es el Tamarix canariensis, una especie de lo más interesante para xerojardines o jardines de bajo mantenimiento.

Sus hojas son pequeñitas, pero muy numerosas, lo cual hace que su copa sea bastante densa y que, a su vez, con el tiempo llegue a dar una agradable sombra. Además, cuando florece es todo un gustazo verlo, así que no dudes en conocerlo mejor 😉 .

Origen y características del Tamarix canariensis

Vista del Tamarix canariensis en hábitat

Imagen – Wikimedia/Javier martinlo

Conocido como taraje, taray de Canarias o tarajal, este es un árbol o arbolito perennifolio originario del Mediterráneo occidental y de las Islas Canarias. Se cree que es endémico del noroeste de África, puesto que los restos más primitivos podrían haber sido encontrados en esa parte del continente africano por el mismo autor (Pierre Marie Auguste Broussonet, naturalista y médico francés que vivió entre el 1761 y el 1807) que descubrió los del Quercus canariensis.

Crece hasta alcanzar una altura de 5-6 metros, con una copa compuesta por ramas purpúreas o pardo rojizas de las que brotan hojas verdes con muchas glándulas encargadas de secretar la sal. Las flores, que brotan en primavera, se agrupan en inflorescencias más o menos colgantes, tienen 5 estambres cada una, y son blanco-rosadas.

¿Cuáles son los cuidados que requiere?

Si quieres tener un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:

Ubicación

El Tamarix canariensis es una planta que ha de estar en el exterior, a pleno sol. No tiene raíces invasivas, pero es preferible plantarlo a una distancia de al menos cinco metros de paredes, muros, tuberías, etcétera.

Tierra

En su hábitat natural crece en suelos salinos, depresiones, y cerca de los arroyos, por lo tanto estamos ante una planta muy adaptable.

  • Maceta: puedes usar el sustrato universal para plantas que venden en viveros, tiendas de jardinería, y aquí.
  • Jardín: no es exigente. Pero si tiene buen drenaje crecerá mejor. De todas formas, te diré por experiencia que tolera bien los arcillosos y los que no son demasiado fértiles.

Riego

El Tamarix canariensis es un árbol de bajo mantenimiento

Imagen – Wikimedia/ Xemenendura

Más bien escaso. Dependiendo del clima y de la zona, con un riego cada 3-5 días en verano y otro cada semana o diez días el resto del año, estará bien sano.

En el litoral mediterráneo, con temperaturas de hasta 40ºC de máxima en verano y heladas suaves de hasta los -5ºC, con una marcada temporada de sequía la cual coincide con la veraniega, y con unas precipitaciones anuales que rara vez llegan a los 500mm, esta es una planta que solo se riega el primer año que está en el suelo.

A partir del segundo, sus raíces se han fortalecido y extendido lo suficiente para sobrevivir a la falta de agua.

Teniendo esto en cuenta, podrás hacerte una idea de más o menos cuándo tienes que regar 🙂 .

Abonado

Desde comienzos de primavera hasta finales del verano, y especialmente si está en maceta, es muy aconsejable abonar al Tamarix canariensis. Para ello puedes usar abonos químicos (universal, para plantas verdes, o etc.) siguiendo las indicaciones especificadas en el envase, o si lo prefieres fertilizantes caseros.

Poda

En realidad no la necesita, pero va a depender de cómo quieres que crezca. Es una planta que tiende a sacar ramas desde poca distancia del suelo, por lo que si quieres tenerla como árbol o arbolito te aconsejamos mantenerle el tronco desnudo hasta cierta altura.

Estas podas hazlas a finales de invierno, antes de que reanude su crecimiento, con unas tijeras o una pequeña sierra -dependiendo del grosor de la rama- previamente desinfectadas con alcohol de farmacia o unas gotas de lavavajillas.

Plagas y enfermedades

No tiene. Pero cuidado con regarlo en exceso ya que las raíces podrían empezar a pudrirse, y a ser por lo tanto muy vulnerables a los hongos.

Multiplicación

Esquejes

Aunque produce semillas, estas son pequeñas y muy ligeras, motivo por el que los Tamarix se suelen multiplicar más por esquejes a finales de invierno. La manera de proceder es la siguiente:

  1. Primero, corta un rama de madera dura que mida unos 30cm.
  2. Después, impregna la base con hormonas de enraizamiento (en venta aquí).
  3. Luego, rellena una maceta -con agujeros de drenaje- con vermiculita (en venta aquí).
  4. Por último, plántalo (no lo claves) en la maceta, en el centro, y riega.

Manteniendo la maceta en el exterior, en un lugar protegido del sol directo, y el sustrato húmedo, enraizará al cabo de unas 3-4 semanas.

También puedes obtener nuevos ejemplares de esquejes de madera blanda a finales del verano.

Semillas

Si consigues semillas, puedes sembrarlas durante la primavera en bandejas de semillero (en venta aquí) con sustrato universal, poniendo un máximo de dos semillas en cada alvéolo.

Luego solo tendrás que colocar el semillero en el exterior, en semisombra, y mantener el sustrato húmedo. Así germinarán en unos 15-20 días.

Rusticidad

El tronco del Tamarix canariensis no es muy grueso

Imagen – Wikimedia/Krzysztof Ziarnek, Kenraiz

Resiste hasta los -7ºC sin sufrir daños.

¿Qué te ha parecido el Tamarix canariensis?


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