Mayo es un mes en el que las temperaturas cálidas terminan de despertar a nuestras queridas plantas, las cuales comienzan a crecer a buen ritmo gracias al constante suministro de agua y abono que les proporcionamos. Sin embargo, también son unos días durante los cuales las plagas y las enfermedades pueden aparecer en cualquier momento.
Así, el riego, el abonado y el tratamiento preventivo son tres de las tareas del huerto en mayo más importantes. Aunque no son las únicas.
Siembra plantas hortícolas
Mayo es un buen mes para sembrar algunas plantas hortícolas de rápido crecimiento, como por ejemplo los calabacines, coles, pepinos, melones, sandías, rabanitos, espinacas, calabazas, zanahorias, guisantes y/o espinacas. Todas ellas las puedes sembrar primero en semillero y, cuando tengan una altura de unos 5cm, pasarlas a suelo o al recipiente definitivo, el cual debe de ser grande (como mínimo, de 35cm de diámetro).
Aumenta la frecuencia de riegos
Durante este mes las temperaturas empiezan a subir bastante, de modo que las plantas van a necesitar más agua. Para evitar que se deshidraten es muy importante que se aumente la frecuencia de los riegos, de manera que si antes sólo era necesario regar tres veces por semana, ahora se riegue 4-5 veces.
Haz tratamientos preventivos contra plagas y enfermedades
Con el calor los pulgones, las cochinillas, los trips, así como los hongos y bacterias se disponen a detectar cualquier signo de debilidad de las plantas. Si queremos evitar daños, es conveniente hacerles tratamientos preventivos con aceite de neem y/o jabón potásico, que son dos remedios naturales muy eficaces contra las principales plagas y enfermedades que las afectan.
Abona tus cultivos
Para que puedan crecer y desarrollarse fuertes y sanas será fundamental abonarlas. Como son plantas de huerto, es decir, para consumo humano, hay que usar abonos orgánicos, como puede ser el compost, el estiércol de animal herbívoro, o el humus de lombriz, entre otros. Si están en macetas, es importante usar abonos en presentación líquida ya que de lo contrario correríamos el riesgo de que las raíces se terminasen pudriendo por exceso de humedad; por otra parte, si están en el huerto se pueden usar los que vienen »en polvo».
Que disfrutes de tu huerto 🙂 .