La Lantana proviene de América tropical, pero también la podemos encontrar en otros países como por ejemplo Uruguay, Brasil y en el nordeste de Argentina.
La poda de Lantana se puede realizar de dos maneras diferentes, la poda de formación y mantenimiento y la poda para rejuvenecer la lantana.
Índice
La poda de formación y mantenimiento
Este tipo de poda la podemos hacerla durante todo el año y cuando sea necesario, de esta manera podemos mantenerla dentro del tamaño y la forma que queremos.
Esta poda la hacemos utilizando unas tijeras para cortar las ramas que no sean necesarias. Con este tipo de poda lograremos que la Lantana brote rápidamente y a su vez, se pueda compactar su masa foliar.
La poda de rejuvenecimiento
A diferencia de la anterior, esta poda debemos hacerla tan solo una vez al año y durante su periodo de reposo invernal, donde a Lantana comienza a perder sus hojas durante la época de invierno en el hemisferio norte.
Ese es el momento ideal para hacer una poda más fuerte y así lograr rebajarla de una manera considerable.
Para este tipo de poda la más recomendable es utilizar herramientas que sean más fuertes, como por ejemplo sierras o tijeras profesionales, ya que pueden existir casos en que las ramas que vamos a cortan, sean demasiado gruesas para podarla como lo hacemos normalmente.
Pasos a seguir a la hora de podar una Lantana
La poda de la Lantana no es una tarea muy difícil de hacer, sin embargo tenemos que tener en cuenta algunas cosas para poder hacerlo de forma correcta:
Lo primero que tenemos que hacer es identificar el tipo de Lantana que tenemos. Algunos tipos de Lantana son de larga duración, en cambio existen otros que solo se dan una vez al año. Es muy importante reconocer cual es nuestra planta para que podamos podarla como es debido.
Tenemos que cortar las puntas de la Lantana para que podamos estimularla y permitir de esta forma su nuevo crecimiento y a su vez su floración.
Lo recomendable es cortar pequeñas partes de aproximadamente 1 a 3 pulgadas comenzando desde los extremos de cada una de las secciones, así conseguiremos rejuvenecer a nuestra planta de lantana.
Debemos podar la Lantana cuando haya sobrepasado la altura del espacio que hayamos destinado para ella.
Esta planta crece demasiado rápido y si no la mantenemos a una altura adecuada, va a superar en tamaño a las plantas que tenga a su alrededor. Para que podamos tener un mejor resultado, tenemos que podar la planta a un tercio aproximadamente de su tamaño y extensión.
Siempre tenemos que regar y fertilizar las plantas que hayamos podado recientemente. Podemos utilizar un abono ligero, para que nuestras Lantana puedan nutrirse y al mismo tiempo sacar el mayor provecho de manera sana de su nueva etapa de crecimiento.
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Buen día son muy buenos los artículos yconsejos que publican,
Nos alegra de que te gusten 🙂