Los cipreses son unas de las coníferas más utilizadas en los jardines: resisten bien el frío y las heladas, no requieren de mucho mantenimiento y, además, tienen un valor ornamental muy, muy alto.
Por si fuera poco, existen diferentes tipos de cipreses que son especialmente adecuados para nuestro rincón favorito, como los que te vamos a presentar a continuación.
Índice
¿Cuál es el origen y las características de los cipreses?
Los cipreses o Cupressus son árboles, o más concretamente, coníferas perennifolias originarias de las regiones templadas del Hemisferio Norte, sobretodo de Europa y Asia. Pueden alcanzar alturas de hasta 40 metros, con un porte piramidal y con un tronco recto de corteza delgada. Las hojas miden de 2 a 6mm de longitud, tienen forma de escama y son de color verde por lo general. Estas permanecen en la planta durante varios meses, incluso años, antes de ser sustituidas por nuevas.
Florecen a finales del invierno. Las flores masculinas y las femeninas brotan en el mismo ejemplar. Las primeras forman conos ovales amarillentos o de color naranja oscuro, y las segundas conos esféricos de color rojizo y marrón.
Tipos de cipreses
Si buscas poner algún ciprés en tu jardín, te recomendamos los siguientes:
Cupressus arizonica
Imagen – davisla6.files.wordpress.com
Conocido como ciprés de Arizona, es un árbol perenne originario del sudoeste de Norteamérica que alcanza una altura de entre los 10 y los 25 metros. Tiene una copa cónica y un tronco cuyo grosor es de unos 50cm. Sus acículas -hojas- son de color verde-grisáceo, y están provistas de glándulas resinosas en el dorso.
Resiste las heladas de hasta los -15ºC.
Cupressus leylandii
Conocido como x Cupresocyparis leylandii, Cupressus x leylandii o, más comúnmente, Ciprés híbrido de Leyland, es un híbrido natural entre Cupressus macrocarpa y Chamaecyparis nootkatensis. Alcanza una altura entre los 20 y los 25 metros, y sus hojas presentan forma de escama ligeramente aromáticas, de color verde oscuro.
Resiste las heladas de hasta los -15ºC.
Cupressus lusitanica
Imagen – Wikimedia/ Sergio Kasusky at Flickr
Conocido como cedro de San Juan, es una especie que puede alcanzar una altura de 30 a 40 metros y que desarrolla un tronco recto con la corteza fisurada. Sus hojas son escamosas, de color verde oscuro.
No resiste heladas, solo hasta -1ºC si es puntual y de corta duración.
Cupressus macrocarpa
Imagen – Flickr/Hornbeam Arts
Conocido como ciprés de Monterrey, es un árbol perennifolio originario del sudoeste de los Estados Unidos que alcanza una altura de unos 30 metros. Su copa es ancha y abovedada, formada por hojas escamiformes de color verde oscuro, gruesas y con el ápice no punzante. La corteza rojiza muy agrietada.
Resiste las heladas de hasta los -15ºC.
Cupressus sempervirens
Imagen – Flickr/Garden tourist
Conocido como ciprés común o ciprés mediterráneo, es un árbol perennifolio más o menos piramidal que alcanza una altura entre los 25 y los 30 metros. Es originario de las regiones del este del Mediterráneo. Las hojas tienen forma de escama de entre 2 y 5 milímetros de longitud de color verde oscuro.
Resiste hasta los -10ºC.
¿Cuáles son los cuidados de los cipreses?
Si quieres tener un ejemplar, te recomendamos cuidarlo del siguiente modo:
Ubicación
Son plantas que necesitan estar en el exterior, para sentir el paso de las estaciones. Es importante que se planten a una distancia mínima de 6-7 metros de tuberías y suelos pavimentados, ya que poseen unas raíces muy fuertes.
Tierra
- Jardín: crecen en suelos ricos en materia orgánica, con buen drenaje, y profundos.
- Maceta: durante sus primeros años se pueden tener en macetas con sustrato universal (en venta aquí).
Riego
Los cipreses, en general, no resisten la sequía. Quizás los que mejor viven en climas cálidos y secos sean el Cupressus arizonica y el Cupressus sempervirens, pues son originarios de lugares donde la sequía es un problema recurrente. Pero para que puedan estar bien es muy recomendable regarlos de vez en cuando, de manera regular.
Durante el verano se regarán una media de 3 veces por semana, y el resto del año cada 4 o 5 días.
Abonado
Durante toda la temporada de crecimiento, es decir, durante la primavera y el verano, es muy aconsejable abonarlos con productos orgánicos.
Multiplicación
Los cipreses se multiplican por semillas. Estas se aconseja sembrarlas nada más recogerlas, en otoño, en un semillero con sustrato universal y luego colocando este en el exterior, en semisombra.
Si se mantiene la tierra húmeda, pero no encharcada, germinarán a lo largo de la primavera.
Poda
La poda se hará a finales de invierno, y siempre recortando un poco las ramas, evitando hacer podas drásticas.
Rusticidad
Dependerá de la especie, pero en general son bastante rústicos.
¿Para qué se usan los distintos tipos de cipreses?
Para esto:
Ornamental
Sin duda es el uso que más se les da. Son árboles muy bonitos, fáciles de cuidar, y con los que se pueden crear magníficos setos en los jardines. Además, son muchos los que se trabajan, también, como bonsái.
Madera
La madera de ciprés es pardo amarillenta, de textura fina. Se utiliza para construir cajas, chapas de guitarras o en tornería.
¿Qué te han parecido los cipreses?
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