Las plantas trepadoras, enredaderas o arbustos trepadores son una especie de plantas de lo más interesante y útil. Se llaman así debido que no se mantienen erguidas por sí mismas, sino que necesitan un soporte para encaramarse, como un muro o un peñasco. ¿Cómo se adhieren? Bien, a través de sus órganos como zarcillos o bien a través de las raíces o de ventosas. Algunas simplemente se enroscan alrededor de algún soporte.
Las enredaderas forman un grupo muy variad y hay muchas especies. Son plantas que sirven para adornar para jardines, terrazas y porches así como para formar para arcos, columnas o pérgolas. Las más típicas son las Bignonias, Dama de noche, Hiedras, Jazmines, Madreselva y Rosal trepador.
En los viveros y centros de jardinería hay una gran variedad que se distinguen por la forma de sus hojas, flores, aromas. Son ideales también para cubrir muros, celosías, fachadas, y vallas ya que dan una agradable sombra y además son bellas y aromáticas
Existen algunas especies llamadas cubresuelo aptas para tapizar terreno y jardines tales Hiedra, Madreselva, Parra virgen, algunas Clematis. Existe otra especie de trepadora que pueden ser cultivadas en macetones para apoyarlas dentro de las casas. Por eso, si tienes un jardín pequeño o poco espacio las trepadoras te serán muy prácticas puesto que al crecer planas y en altura ocupan relativamente poco.
Como los árboles, hay enredaderas de hoja caduca (en otoño tiran todas sus hojas hasta que vuelven a brotar en primavera) y enredaderas de hoja perenne, que conservan sus hojas todo el año.
Está claro que las plantas trepadoras tienen muchas cualidades tanto ornamentales como funcionales para que las cultivemos abundantemente.
Más información – Decorar un jardín con estilo romántico II
Fuente – Infojardín
Foto – Jardín plantas