El ser humano puede llevar una dieta muy variada. Aún y así, los cereales son básicos en nuestra alimentación, especialmente el trigo. Debido a su alto consumo, este vegetal es de los más cultivados en España, ocupando el segundo puesto justo después de la cebada.
Si te interesa el tema y quieres saber más sobre este nutritivo cereal, te recomiendo que sigas leyendo. Explicaremos qué es el trigo, cuáles son sus características, cuáles son las variedades más comunes, las aplicaciones que tiene, y más cositas.
¿Qué es el trigo?
Todos tenemos una idea del aspecto que tiene el trigo. ¿Pero qué más sabemos realmente sobre él? Esta planta no perenne forma parte de la familia de la gramíneas y cuenta con diferentes variedades. Las más cultivadas son las denominadas Triticum durum y Triticum compactum. En cuanto al cereal más cultivado para hacer harina y pan, es el Triticum aestivum. Más adelante comentaremos en detalle las diferentes variedades de trigo existentes.
Este vegetal produce un conjunto de frutos que se fusionan con una única semilla que se encuentra en una espiga terminal. El trigo puede encontrarse de forma silvestre o cultivado. Según los historiadores, el origen de este cereal se dio en la civilización mesopotámica de los egipcios. Ellos descubrieron el trigo y su uso para elaborar determinados alimentos.
Después de que tuviera lugar en el Oriente próximo la revolución neolítica, este cereal comenzó a ser cultivado en diferentes lugares del mundo, convirtiéndose hasta el día de hoy en uno de los alimentos más básicos de nuestra dieta. La mayoría de alimentos actuales se elaboran con trigo. Se estima que este vegetal abarca entre el 10% y el 20% de las calorías ingeridas diarias.
Características
Ahora que ya conocemos un poco el origen del trigo, vamos a hablar sobre sus características según la parte de la planta. En primer lugar tenemos las raíces, que pueden llegar a alcanzar un metro o más de profundidad. Aún y así, la mayoría de ellas se sitúan en los primeros 24 centímetros del suelo. Estas comienzan a crecer durante el período de ahijado, durante el cual todavía están poco ramificadas. Los expertos consideran que el desarrollo de las raíces se ve completado cuando termina el encañado.
El tallo del vegetal es hueco, como si se trata de una caña, y posee un total de seis nudos. Tanto su solidez como su altura determinan la resistencia al encamado. Respecto a las hojas, estas son paralelinervias, cintiformes y acabadas en punta. La flor está compuesta por tres estambres y un pistilo. Además, cuenta con una protección otorgada por dos brácteas verdes o glumillas. En cuanto al fruto, se trata de una cariopsis cuyo pericarpo está soldado al tegumento seminal. La masa principal del grano está constituida por el endosperma que contiene las sustancias de reserva.
También hay que destacar las inflorescencia del trigo. Se trata de una espiga que se compone por un tallo central de cortos entrenudos, denominados raquis. Cada uno de estos nudos se encuentra en una espiguilla, que está protegidas por dos brácteas a ambos lados. Las espiguillas poseen nueve flores cada una. Sin embargo, acaban abortando la mayoría de las flores, hasta quedarse con dos a cuatro normalmente. De forma excepcional puede llegar a mantener hasta seis flores.
Variedades de trigo
Al igual que muchos otros vegetales, el trigo, o Triticum, tiene diferentes variedades. A continuación comentaremos las más comunes.
Triticum aestivum o Triticum vulgare
La especie de trigo más cultivada en todo el mundo es el Triticum aestivumo o Triticum vulgare. Entre el 90% y el 95% de la producción mundial de este cereal corresponde a esta variedad. Se trata del trigo harinero, pan o blando, pues es el más utilizado para le elaboración de harina y pan. Normalmente se cultiva esta especie en las latitudes altas de los dos hemisferios.
Triticum monoccum
También conocido como trigo escaña cultivada o escanda, el Triticum monoccum es una variedad primitiva de trigo. Antiguamente tuvo mucha importancia pero a día de hoy está casi extinta. Son muy pocos los cultivos existentes de esta especie y se encuentran en escasas zonas montañosas de Europa. Un dato curioso: Ötzi, el hombre que se encontró en los Alpes italianos y que vivió alrededor del año 3300 a. C., tenía semillas del Triticum monoccum en el intestino.
Triticum dicoccum
Otro de los trigos más comunes es el Triticum dicoccum, o farro. Este cereal antiguo está muy estrechamente relacionado el el trigo escanda y el trigo espelta, por lo que muchas veces suele ser confundido con estas especies. Contiene gluten, por lo que su consumo no es apto para aquellas personas que poseen trastornos relacionados con él.
Triticum durum
El trigo duro, o Triticum durum, también se conoce como trigo candeal, siciliano, fanfarrón, semolero o moruno. Debido a su alto contenido de gluten y proteínas, es una de las especies de trigo con el valor nutritivo más alto. Esta variedad es muy resistente tanto a las enfermedades como a la sequía, pero rinde menos en los cultivos en comparación con otras especies.
Triticum spelta
Entre las variedades más comunes de trigo se encuentra también la espelta, cuyo nombre científico es Triticum spelta. Otra forma de denominar esta especie es escanda mayor o escaña mayor. Este cereal puede sobrevivir en climas duros, fríos y húmedos. En cuanto a su valor nutritivo, este se parece mucho al del trigo común. Sin embargo, la espelta contiene una mayor proporción tanto de niacina como de riboflavina.
El campo de trigo
Actualmente, el cultivo más representado en España es la cebada, seguida por el trigo. Este último se cultiva en todas las comunidades autónomas del territorio español, con una mayor concentración en Castilla y León que produce el 40% de todo el trigo en España. Después le sigue Castilla La Mancha que se encuentra en torno al 22%.
A la hora de obtener buenos cereales en los campos de trigo, la clave son tanto la temperatura como las precipitaciones. Estos dos factores son determinantes para el buen desarrollo del cultivo. Generalmente, este vegetal es bastante resistente al frío, pudiendo sobrevivir a temperaturas por debajo de los cero grados. No obstante, para que estas plantas puedan florecer, necesitan unas temperaturas de al menos 16 grados. Respecto al agua y a la humedad, no requieren grandes cantidades. Aún y así, lo ideal es que se lleguen a superar los 300 a 400 milímetros.
También la fertilización es un factor influyente en el rendimiento del trigo. Depende de la estación del año en la cual se haya sembrado el trigo, las cantidades y el tipo de fertilizantes varía. También influyen la variedad del trigo y el clima.
Propiedades del germen de trigo
Las propiedades más destacables del germen de trigo son las siguientes:
- Antienvejecimiento y antioxidante natural.
- Alto contenido en proteínas e hidratos de carbono. Esto aporta salud y energía a nuestros músculos.
- Alto contenido en ácido linoleico o vitamina F. Ayuda a asimilar proteínas, grasas y azúcares.
- Contiene vitaminas B. Por ello es considerado un tratamiento de belleza natural que mejora la vitalidad y la salud de pelo, piel y uñas.
En definitiva, los beneficios que aporta el germen de trigo son varios gracias a los ácidos grasos esenciales y las vitaminas que contiene:
- Control del ácido úrico.
- Mejoramiento de la circulación.
- Regulación de la presión arterial.
- Ayuda al desarrollo muscular y al tránsito intestinal.
- Reducción de fatiga.
- Reducción de problemas nerviosos como, por ejemplo, el estrés, la ansiedad o el insomnio.
- Mejoramiento del aspecto de la piel, sobre todo de la seca.
- Mejoramiento del aspecto del cabello.
Principales usos del trigo
De los granos molidos del trigo se obtiene la harina que utilizamos para elaborar principalmente pan, pero también otros alimentos como galletas, pastas y pasteles. Existen en total dos tipos de harina:
- Harina tipo A: Es la harina panificable. Tiene en total tres grados de calidad, que serían la común o estándar, la fina y la extrafina.
- Harina tipo B: Son las sémolas y no son panificables. Estas suelen ser las harinas utilizadas para elaborar macarrones y pastas.
Con el grano del trigo no sólo podemos producir harina o harina integral, si no también cerveza, sémola y otros tipos de alimentos. Si ingerimos este cereal de forma regular, ayudamos a nuestro organismo a llevar a cabo la digestión, ya que facilita la deposición, favorece la asimilación de alimentos y ayuda a depurar el organismo. Todo esto es gracias a la fibra que contiene.
En conclusión se puede decir pues que el trigo es un alimento básico en nuestra dieta gracias a los múltiples beneficios que nos aporta y su alto valor nutricional. Además, sin él no existirían las harinas, y sin las harinas no podríamos crear tan deliciosos pasteles.