No hay nada más gratificante que cosechar tus propios alimentos, ¿verdad? Y lo mejor es que ni siquiera tienes que salir de casa. Pero, si quieres disfrutar aún más de tu huerto y que cumpla las tres B, es decir, que sea: bueno, bonito y barato, estás de suerte.
A día de hoy, cuando ya sólo quedan unas semanas para la llegada de la primavera, te voy a dar unos consejos que te serán útiles tanto si es la primera vez que vas a tener tu huerto, como si ya llevas tiempo con él y quieres tenerlo aún mejor.
Plantas que no te deben faltar
Especialmente si eres principiante o no tienes mucha experiencia en el cuidado de las plantas, hay unas que son más apropiadas que otras. Puedes hacerte con plantones ya crecidos o bien sembrar las semillas en semillero y, cuando tengan dos pares de hojas verdaderas pasarlas a tierra. Los más aconsejables son: tomateras, lechugas, pimientos y habas. Estas cuatro tienen un muy rápido desarrollo, tanto es así que, por ejemplo en el caso de las lechugas, en tan sólo tres meses después de la siembra ya puedes utilizarlas para hacer ricas ensaladas. No te olvides de ponerlas a pleno sol y de regarlas a diario.
Si tu clima es húmedo o estás en plena temporada de lluvias, hazte con varias capuchinas. Estas plantas son la comida que más prefieren los moluscos, los cuales no dudarán en ir hacia ellas en vez de hacia las plantitas de tu huerto.
Cuidando del medio ambiente
Es muy necesario que se evite el uso de productos químicos los cuales pueden dañar al medio ambiente. El huerto se verá mucho más sano si se utilizan productos ecológicos, tanto insecticidas como abonos. Éstos últimos, además de alimentar a las plantas, también aportan nutrientes a la tierra, haciéndola así más fértil y contribuyendo a mejorar el estado de salud del huerto.
También hay que tener en cuenta que hay muchos insectos que serán nuestros aliados, entre ellos la mariquita (foto superior) o las abejas. Para atraerlas puedes plantar flores como: cosmos, margaritas silvestres, caléndula y lavanda. Todas ellas de muy fácil cultivo y mantenimiento, y sobretodo muy agradecidas: con sólo tenerlas en una ubicación a pleno sol y darles riegos regulares, te regalarán una enorme cantidad de flores dando así color a tu huerto bueno, bonito y barato.