Tulipán Princesa Irene: todo lo que debes saber de él

Tulipán Princesa Irene

Hay ocasiones en las que los tulipanes reciben nombres exóticos en recuerdo a personalidades famosas. De hecho, ocurre con muchas plantas como por ejemplo la rosa Julio Iglesias. Pero, ¿y en cuanto a tulipanes? Uno de ellos es el Tulipán Princesa Irene.

Debe su nombre a la Princesa Irene desde 1949. Pero, ¿qué sabes de esta variedad de tulipanes? ¿Es monocolor, tricolor, o se parece a un lirio? De esto, y de algunas cosas más, es de lo que queremos hablarte a continuación. ¿Vamos a ello?

Cómo es el Tulipán Princesa Irene

tulipanes

Antes de nada, es importante que sepas qué tipo de tulipán es el Princesa Irene. Se trata de un cultivar que puede crecer unos 30-35 centímetros de altura. Sus hojas en forma de lanza y tallos son de color verde oscuro pero no destacan tanto como sí lo hacen las flores, grandes y bicolores. Es decir, que no solo serán de un color sino que tendrá dos predominantes: el naranja, y el rojo. Estas tienen la forma de una copa y principalmente son naranjas. Sin embargo, se les crean estrías de color rojo (o púrpura rojizo) en los pétalos. A veces pueden tener ligeros tonos de naranja, o incluso parecer que son amarillas, pero realmente su color es el naranja.

Tiene un precio, ganado en 1993, el Award of Garden Merit, y concedido por la Royal Horticultural Society. Eso hizo que fuera mucho más conocido y hoy en día es fácil de encontrarlo en las tiendas. Su precio tampoco es demasiado caro (comparado con otras variedades) y suele combinarse con tulipanes blancos o flores de otra especie también en blancas para que estos destaquen.

Cuidados del Tulipán Princesa Irene

Campo de tulipanes

Ahora que conoces un poco mejor el tulipán Princesa Irene, ¿qué tal si te hablamos de sus cuidados? Como te decíamos antes, no es difícil conseguirlo, tanto las flores como bulbos de esta variedad. Y puedes plantarlos en el jardín o en una maceta y disfrutar de ellos. Pero para conseguir que florezcan y estén bien, es necesario darle los cuidados que necesita. ¿Y cuáles son esos? Te los comentamos a continuación.

Ubicación y temperatura

Lo primero que tendrás que decidir es dónde lo vas a poner. Y en este caso el tulipán Princesa Irene necesita sol, mucho sol, y directo. Pero cuidado. Si está empezando a brotar y lo metes en sol directo, y con temperaturas muy elevadas, es posible que la planta no lo resista. Aunque son muy duros y no deberían tener problema, habría que estar un poco encima de ellos al principio para evitar que su crecimiento no sea el más adecuado.

Aun así, el mejor lugar es en pleno sol, porque demanda una gran cantidad de luz directa. Cuanta más le des, mejor.

Ahora bien, en cuanto a la temperatura, el calor lo tolera muy bien, al igual que el frío. Si bien, en caso de heladas, y si dejas los bulbos plantados, te recomendamos que sí los protejas un poco (con alguna malla en el suelo). Los bulbos se han de plantar entre octubre y diciembre, antes de que lleguen las heladas. Y ha de hacerse a una buena profundidad (10-20 centímetros) para que no se vayan a deteriorar. Pero si además los proteges de la forma que te decimos, tendrás más probabilidades de que salgan adelante.

Eso sí, acuérdate de separar un bulbo de otro entre 15 y 20 centímetros para evitar que compitan entre sí y que al final las plantas mueran.

Sustrato

Este tulipán sí es algo más exigente. Y es que le gusta mucho un suelo poco compactado (de los que cojas con la mano y se te deshaga entero, aun cuando esté regado). Por eso, nuestra recomendación es que uses sustrato universal con algo de humus de lombriz (o alguna tierra que aguante la humedad), y perlita o arcilla expandida.

De esta manera, estará muy suelta y no tendrán problema las raíces del bulbo para expandirse.

Si vas a plantarlo en el jardín y la tierra suele ser muy compacta, lo mejor que puedes hacer es hacer un agujero algo más grande y rellenarlo con la mezcla de tierra que te hemos comentado. Así te asegurarás de que tendrá suficiente espacio nutrido y con la tierra que de verdad le gusta a la planta.

Riego

ramo de tulipanes

El tulipán Princesa Irene es una planta que no necesita un riego demasiado abundante. Le gusta tener la tierra húmeda, pero no demasiado (ni demasiado poco), así que deberás encontrarle un término medio.

Dependiendo de cada cuánto se le seque la tierra, deberás regar más o menos. Pero en general el riego se produce solo en primavera y verano, porque durante otoño no se riega para evitar que el bulbo se pudra.

Abonado

El abonado dependerá de si has sacado los bulbos de la maceta o del jardín, o bien los has dejado quietos. Si es la primera opción, no deberías abonar porque al echarle tierra nueva esta debería tener los nutrientes que necesita.

Pero, si la tierra ya tiene un tiempo, entonces sí es aconsejable abonarlos un poco para darle más energía y nutrientes, los necesarios para que la planta pueda florecer.

Plagas y enfermedades

Los tulipanes son plantas resistentes. Pero no invencibles. Así que en algún momento de su desarrollo podrían verse afectadas por plagas y enfermedades.

En el primer caso, las más habituales son los pulgones, los caracoles y las babosas. Es importante estar pendiente de ello para eliminarlas cuanto antes. Eso sí, ten en cuenta que la planta es tóxica, por eso se recomienda que, a la hora de manipularla, se haga con guantes.

En cuanto a las enfermedades, hay que tener cuidado con el «fuego del tulipán» (brotytis), y la fusariosis. En ambos casos se puede salvar si se coge a tiempo.

Multiplicación

Por último, la propagación del tulipán Princesa Irene se lleva a cabo a través de la división de los bulbos. Esto se hace en otoño, cortando los bulbos para así obtener nuevas plantas. Eso sí, asegúrate de que, al cortar, lo dejes sacar al aire unos días para que cicatrice. Si lo plantas directamente lo único que vas a conseguir es que la planta acabe por morir porque puede contraer una mayor cantidad de enfermedades.

Como ves, el tulipán Princesa Irene no te va a dar demasiados problemas a la hora de cuidarlo. Pero con esta guía que te hemos dejado podrás proporcionarle todo lo que necesita y, sobre todo, lograrás que te dure mucho más tiempo porque tendrás hijuelos que irán reemplazando a los bulbos más antiguos y que ya no puedan sacar plantas de nuevo. ¿Te animas a tener un lugar en tu jardín lleno de tulipanes?


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