¿Has escuchado alguna vez sobre el tulipán Rembrandt? Su nombre está relacionado con el famoso pintor. De hecho, es posible que hayas visto algunas de sus obras relacionadas con los tulipanes. Pero, ¿por qué a este se le llamó así? ¿Qué tiene de especial?
Pues bien, si quieres saber cómo es el tulipán Rembrandt, qué características tiene así como los cuidados que precisa, aquí te dejamos una guía práctica con toda esta información. ¿Vamos a ello?
Cómo es el tulipán Rembrandt
El tulipán Rembrandt es uno de los más hermosos e impresionantes dentro de las variedades de tulipanes. Lo que más caracteriza a este cultivar es, sin duda, el colorido que tienen sus pétalos. Obviamente, no es algo natural sino que está provocado por un virus que se transmitió al bulbo y que hace que nazca y florezca de esta manera. Pero si ya te estás preocupando porque sea contagioso (porque lo es), te diremos que mientras lo mantengas en grupos o solitario no debería pasar nada. Sobre todo si tienes otros áfidos en tu jardín.
El tulipán Rembrandt es relativamente grande, porque sus tallos pueden alcanzar fácilmente los 50-70 centímetros de longitud, a veces más. Por eso, y por el colorido de sus flores, son muy apreciados y raros. De ahí que el precio de estos no sea barato que digamos.
Pero quizá lo más bonito de este tulipán son sus flores. Estas suelen ser blancas, aunque lo cierto es que también hay algunos amarillos. Pero este color base se pierde a través de las manchas que le salen, en color rojizo o rosado. Ningún tulipán es igual al otro, de ahí que sea de los más apreciados pudiendo encontrar algunos con solo unas manchas en ese otro color y otros cubiertos casi en su totalidad.
Ahora bien, no es un tulipán muy cultivado. De hecho, solo en unos pocos lugares puedes verlos así. Por ejemplo, en el caso de Holanda y Alemania (que son los principales cultivadores) o en otras partes de la Europa septentrional. ¿Quiere eso decir que no vas a conseguir bulbos? No, en realidad, y gracias a Internet, ahora es más fácil hacerlo, no solo fuera de España, sino también en el país. Como planta completa es más difícil aún de conseguir.
Cuidados del tulipán Rembrandt
Ahora que conoces más sobre el tulipán Rembrandt, ¿qué tal si te damos las claves para cuidarlo? No es nada difícil hacerlo, pero el hecho de que son contagiosos hace que no siempre se cultiven. Nosotros te recomendamos que, de tenerlos, en lugar de ponerlos en el jardín, lo hagas en una maceta. Así te asegurarás de que la tierra no se contagia y no te encuentras de pronto con una parte del jardín sin poder usar.
Dicho esto, aquí te hablamos de los cuidados principales.
Ubicación y temperatura
Como cualquier tulipán, necesita el sol directo para desarrollarse de manera adecuada. Es por eso que te recomendamos ponerlo fuera de casa y en uno de los lugares donde reciba más sol posible. De esta manera te asegurarás de que florezca más y que su crecimiento sea el adecuado.
Teniendo en cuenta que se planta en otoño, podríamos decir que no es una planta que le tema al frío, más bien es al contrario, lo resiste muy bien. Lo único que tendrías que tener cuidado es con las heladas. Porque, como has visto por la ubicación, con el calor no tiene ningún problema.
Sustrato
A la hora de plantarlo, ya sea en maceta o en jardín, debes asegurarte de que el bulbo esté a unos 15 centímetros de profundidad. Además, has de dejar una separación entre los bulbos de al menos 10 centímetros.
¿Y el tipo de tierra? Apuesta por una mezcla de sustrato universal, humus de lombriz y perlita. De esta manera logras que tenga una tierra que se mantenga húmeda pero no con acumulaciones de agua.
Riego
El riego, como habrás comprobado, es necesario, sobre todo porque necesita la tierra húmeda siempre. Eso sí, suele necesitar más riego que otros tipos de tulipanes.
A la hora de regar, evita las horas de mayor incidencia solar. Eso al menos en primavera y en verano. Pero a partir de otoño has de reducirlos, y en invierno son solo «simbólicos» (es decir, cuando te acuerdes de regarla).
Abonado
Al ser una planta que florece en abril y mayo, necesita que a primeros de la primavera empieces a abonarlo (realmente cuando tenga las primeras hojas). Uno de los mejores es el abono para plantas con flor. Usa la dosis que te ponga el fabricante (puedes empezar por la mitad y cuando vaya siendo más grande aumentar).
Plagas y enfermedades
Los tulipanes en general no suelen tener plagas y enfermedades de las que preocuparse, por lo que lo normal es que puedas pasar un poco de ello. Pero sí que hay un problema importante a tener en cuenta: la pudrición de la raíz.
Esto pasa cuando se hace un mal riego, y este puede llegar a pudrir las raíces. En este caso, si el bulbo está sano, no debería pasar nada porque solo hay que dejarlo descansar y volver a probar suerte en la primavera siguiente. Pero si las raíces acaban por dañar el bulbo entonces no tendrás nada que hacer.
Otro problema que te puedes encontrar es el hecho de que el tulipán no florezca. Esto suele estar provocado por la falta de sol. Si lo cambias de ubicación debería solucionarse.
Reproducción
Finalmente tenemos la propagación del tulipán Rembrandt. En este caso, como todos los tulipanes, se hace a través del bulbo. Eso sí, no siempre se consigue. Pero cuando finaliza la época de la planta y el bulbo entra en letargo, puedes desenterrarlo y ver si ha desarrollado hijuelos. Si lo ha hecho y están grandecitos, puedes separarlos usando un cuchillo afilado y dejándolos al aire para que se cicatrice la herida infligida para, en primavera, plantarlos y tener más plantas.
Como ves, el tulipán Rembrandt es toda una delicia a la vista. ¿Tienes alguno en tu jardín? Si no es así puedes probar comprando algunos bulbos y aplicando los cuidados que te hemos dicho.