En estos tiempos de crisis, sólo nos queda confiar en la buena suerte. Por ello, la planta del dinero es una de esas plantas interiores adecuadas para tener en casa sobre todo en esta época. Dicen que dónde haya una planta del dinero, habrá dinero. Puede ser cierto o puede ser que sólo sea una forma de hacer que las personas adquieran estas plantas.
Sin embargo, el radiante color de su follaje y las bonitas flores que produce, son más que motivos suficientes para tener esta planta en casa, y no únicamente por las creencias.
Es una planta con hojas redondas dentadas, de un color verde brillante. No es una planta alta, sino que puede alcanzar como máximo los 30 centímetros, que los desarrolla de forma colgante. Es ideal para colocar sobre una mesa camilla o sobre cualquier armario y dejar que sus hojas caigan por encima de este mobiliario.
Sus flores son de un color lila aunque también pueden ser moradas. Tiene forma de espiga con varias flores alargadas y muy bonitas. Suele florecer en otoño, cuando casi no hay flores ya, por lo que es una planta ideal para el hogar y que nos alegra cuando comienza el frío.
Requiere bastante luz, aunque puede aguantar bien la sombra. El sol directo quema sus hojas y las pone de un color amarillo, aunque en verano se puede sacar la planta al balcón o en cualquier rincón del exterior, pero siempre en algún sitio donde el sol no la vaya a estropear. Además, la luz solar ayuda en su floración.
Es necesario un riego abundante, pues no tolera la escasez de agua. Sabremos cuando necesita ser regada cuando sus hojas se vean débiles y sin su color habitual. Por supuesto, el suelo debe estar bien drenado.
Se puede reproducir esta planta a través de esquejes en otoño o primavera.
Más información – Como cuidar tus plantas de interior.