La Urtica membranacea o también conocida como ortiga u ortiga larga, es considerada por la gran mayoría como una planta perteneciente a las malas hierbas. Sin embargo, algunas culturas y tradiciones le han dado muchos usos con el paso del tiempo y gracias a ir existen suficientes razones.
Está es una gran familia que está compuesta por varias especies con características similares entre sí. El día de hoy te estaremos hablando sobre esta mala hierba que puedes tener en tu hogar o jardín.
Datos generales
Si bien es cierto que esta planta pertenece a la familia de las Urticáceas y es considerada una mala hierba, es usada ampliamente por todo el mundo como planta medicinal. Y aunque su origen radica en la zona del mediterráneo, se puede encontrar por casi todo el mundo distribuida.
Una de las principales razones por las que la planta es utilizada para preparaciones de remedios caseros y naturales, es que posee ciertos minerales al igual que vitaminas. También posee flavonoides que son efectivos para tratar problemas diuréticos, así como también depurativos.
Sin mencionar que puede ser muy efectiva para lidiar con problemas estomacales y trastornos en el proceso digestivo. Suele aparecer con gran abundancia en la Península Ibérica y se extiende por si sola por todo el litoral que tiene próximo.
Y así como se pueden encontrar en estos lugares, también son vistas en Galicia, así como en 4 provincias más del territorio Español. Por otro lado, la planta posee características anuales y a diferencia de la Urtica dioica que es una especie perenne.
Como verás y aunque posean características muy parecidas, siempre hay aspectos que las diferencian entre sí y junto con ello, el uso que se le puede dar y las propiedades que estas poseen.
Características de la Urtica membranacea
Lo principal a conocer, es que la planta posee una especie de pelos urticantes, los cuales se encuentras dispersos con un pedicelo, y el cual no mide más de 1/3 de tamaño.
En cuanto al tamaño de la planta, esta puede medir entre 15cm y un metro y medio de altura. Cabe destacar que la planta es altamente invasiva, unas características únicas de las malas hierbas.
Pero esta en particular tiene la capacidad de crecer en un gran número de hábitats y tierras con múltiples sustratos. Además, que la planta en si genera un excesiva cantidad de semillas que no poseen demasiado tamaño y peso.
Con un viento lo suficientemente fuerte como para mover esta planta, es suficiente para esparcir sus semillas.
Raramente la planta genera ramificaciones en su base. Lo normal es que lo haga a una altura un poco alejada de la base del tronco. De igual forma, la planta posee hojas cuya disposición se encuentre opuestas entre si y miden entre 2 y 12 cm de longitud.
La forma de sus hojas puede ser tanto ovada o bien con una forma lanceolada. Incluso puede desarrollar hojas con aspecto redondeado en su base, mientras que en la parte más alejada tiene forma de sierra.
En cuanto al pecíolo de la planta, puede llegar a ser tan larga como una lámina. Posee alrededor de 4 espítulas las cuales se encuentran soldadas en pares.
Ahora bien, con respecto a las flores de la Urtica membranacea, cabe destacar que posee una inflorescencia en axilas foliares. Algo así como si se tratara de un racimo pero de los simples.
Lo más común es ver a las flores al final de las últimas ramas que se han desarrollado a partir del tallo principal.
Usos
Si bien es cierto que esta planta es excesivamente utilizada por muchas culturas, no todos los usos que se le da han sido investigados.
Lo que si se ha podido identificar es que la planta es muy efectiva para tratar con:
- Problemas digestivos y puede ser utilizado como depurativo natural.
- La preparación de té o jugo a base de Urtica membranacea puede convertirse en una rica fuente de energía.
- Es efectivo para propósitos remineralizantes.
- Puede lidiar con la fatiga en el cuerpo así como el debilitamiento en ciertas zonas del cuerpo.