El Vaccinium macrocarpon es un arbusto perenne de poco tamaño que pertenece a la familia Ericaceae, conocido comúnmente como arándano. Es originario del lado este de América del Norte y es una planta hermafrodita (posee órganos masculinos y femeninos) polinizada por insectos. Su nombre procede de un antiguo nombre latino, supuestamente derivado de una lengua prehistórica del Mediterráneo.
Características del Vaccinium macrocarpon
El Vaccinium macrocarpon es una planta pequeña que difícilmente supera los 50 cm de altura, siendo de ramas cortas que alcanzan los 20 cm de extensión. Sus flores de color blanco son de poco tamaño y posee pétalos reflejos. Tiene un tallo robusto del cual surgen sus hojas, verdes brillante en el haz y blancas opacas en el envés, lanceoladas y ovaladas.
De flores pequeñas de aproximadamente 1,5 cm de ancho, posee cuatro pétalos de tono blanco muy delgados, las mismas se encuentran dispuestas en grupos de cabezas redondeadas a lo largo de sus ramas. Los frutos de esta planta son esféricos, medianos y presentan un color rojizo brillante.
Cultivo y propagación
El arándano rojo grande tiene diferentes requerimientos con relación al clima y demás condiciones para su mejor desarrollo. Durante el verano y particularmente bajo temperaturas elevadas, es mejor mantenerlo en interiores a media sombra. Tolera las condiciones climáticas húmedas y las bajas temperaturas.
Se recomienda colocar la planta en lugares con poca ventilación debido a que el viento excesivo puede afectar las hojas, especialmente, cuando el agua de la superficie tienda a evaporarse rápidamente. Para conservar el suelo con suficiente humedad, es bueno insertar un poco de corteza para proteger el arándano de la maleza excesiva.
El Vaccinium macrocarpon prefiere los ambientes húmedos y fríos, de ahí la importancia de regarlo frecuentemente, al menos durante el inicio de la primavera y otoño. Aunque hay que procurar que no se forme un estancamiento de agua que pueda crear las condiciones de humedad proclives para la formación de hongos. No obstante, la sequía se constituye como uno de los mayores peligros de la planta.
Durante la primavera se recomienda añadir fertilizantes orgánicos, siempre prestando mucha atención para no tocar las raíces de la planta de arándanos. En todo caso, el arándano requiere de un suelo húmedo, de pH ácido y con buen drenaje, condiciones idóneas para su desarrollo.
Ahora bien y si se dispone de un suelo de naturaleza calcárea, puede mejorar insertando frecuentemente una cantidad pequeña de turba. También existe la opción de cultivar la especie en macetas. Es importante tener en cuenta que esta planta es de raíces bastante delicadas. La propagación de esta planta se produce en la mayoría de los casos por corte leñoso. El procedimiento se inicia con el enraizamiento de las ramas hasta la finalización del verano, después, se inserta en un compost preparado con turba y arena en cantidades similares mientras surgen los primeros brotes.
El Vaccinium macrocarpon presenta un desarrollo lento, hasta tal punto, que los esquejes en ocasiones presentan problemas para enraizarse rápidamente. Con relación a la recolección de los frutos, lo ideal es esperar al menos 2 años.
Plagas y enfermedades
Es una planta no proclive a las plagas o enfermedades. Sin embargo, es importante estar atentos cuando se cultiva en suelo calcáreo, pesado y con un pH muy elevado, ya que estas características tienden a crear unas condiciones que hace que puedan aparecer pudriciones radicales, así como clorosis férrica.
Usos y contraindicaciones
El fruto se usa en la prevención de infecciones del tracto urinario debido a que impide que bacterias que residen en este tracto se adhieran a las paredes de la vejiga y causen infecciones renales graves como son los casos del Escherichia coli o el Staphylococcus aureus. Su consumo regular ayuda en la acidificación de la orina con un efecto antibiótico natural.
También es útil en el tratamiento de enfermedades como la osteoporosis, insuficiencia venosa, retención de agua y las enfermedades cardiovasculares debido a su rico contenido en antioxidantes. Su jugo evita la adhesión de microbios responsables de las caries y trastornos de las encías. Mejora a los pacientes de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Uno de sus componentes es el oxalato, que es considerado un factor de riesgo para los pacientes con cálculos renales. Las personas diabéticas no lo deben ingerir en forma de zumo debido a su alto contenido en azúcar. Según estudios recientes, el arándano parece ser capaz de aumentar el riesgo de sangrado y por lo tanto debe evitarse en pacientes tratados con medicamentos anticoagulantes.