El Concello de Vigo ha puesto en marcha un dispositivo específico para retirar los árboles y ramas arrastrados al cauce del río Lagares por los recientes temporales. La actuación, con un presupuesto de 18.000 euros, se desarrollará a lo largo del mes de octubre para despejar puntos críticos y mejorar la seguridad hidráulica.
Según detalló el alcalde, la intervención se realizará con una combinación de medios, priorizando el trabajo manual sobre el mecánico por la sensibilidad del entorno fluvial y la dificultad de acceso en determinados tramos. El objetivo es actuar con el máximo cuidado medioambiental y sin alterar el equilibrio del río.
Calendario y alcance de los trabajos
Los trabajos han comenzado esta semana y se extenderán durante todo octubre, avanzando por tramos a lo largo del curso del Lagares y sus márgenes. Se intervendrá allí donde las ramas y troncos caídos supongan un riesgo para el flujo del agua o para el tránsito en la senda fluvial.
El dispositivo da prioridad a la eliminación de los obstáculos que puedan provocar taponamientos con la llegada de nuevas lluvias. Además de recuperar la capacidad de desagüe, se busca reducir el riesgo de desbordamientos en episodios de precipitaciones intensas.
Fuentes municipales señalan que los temporales pasados, entre ellos el temporal Kirk, dejaron numerosos ejemplares dañados en el entorno de la senda, con especial incidencia en zonas urbanas de gran uso ciudadano. Esa acumulación de restos vegetales ha venido afectando a la imagen y funcionalidad del paseo.
El Concello ha pedido comprensión por las posibles molestias durante las tareas, que podrían implicar cortes puntuales de paso o presencia de equipos en tramos muy frecuentados. La planificación se ha diseñado para minimizar interrupciones y mantener la seguridad de los usuarios.
Medios, presupuesto y criterios de intervención
La intervención dispone de un presupuesto de 18.000 € y combinará herramientas manuales con apoyo mecánico únicamente donde resulte imprescindible. El uso de maquinaria se limitará a zonas accesibles y con garantías de no dañar la vegetación de ribera ni el propio lecho del río.
Debido a la orografía y a la sensibilidad del ecosistema, el trabajo será eminentemente manual, con retirada selectiva de troncos y ramas. Esta metodología permite un control más preciso y reduce el impacto sobre el hábitat fluvial, manteniendo elementos que no comprometen la seguridad hidráulica.
En el plano administrativo, el regidor ha señalado que la competencia sobre estas tareas correspondería a la Xunta de Galicia, si bien el Concello asume la ejecución y el coste para agilizar la limpieza del cauce. La prioridad, subrayan, es garantizar el buen estado del Lagares de cara a la temporada de lluvias.
Con el avance por tramos, el Ayuntamiento confía en dejar saneados los puntos más problemáticos antes de finalizar octubre, mejorando la capacidad de evacuación del río y la seguridad de la senda del Lagares para peatones y ciclistas. El éxito del operativo se medirá en la reducción de material acumulado y en la menor probabilidad de incidencias con episodios de lluvia.
La actuación combina un alcance claro, un presupuesto acotado y una metodología prudente para retirar los árboles caídos sin comprometer el entorno del Lagares; una medida preventiva que busca evitar taponamientos, reducir riesgos de desbordamiento y recuperar el uso cotidiano del paseo fluvial en Vigo.

