La zanahoria es un vegetal popular en muchos países y es que desde su consumo bruto, hasta su papel en muchas ensaladas y platos típicos, resulta difícil encontrar un país en el cual se desconozca la existencia de ésta. Entre sus principales características, podemos destacar su típico color anaranjado, su forma de cilindro que le hace ser puntiaguda y su gorro de hojas verdes.
Su sabor es algo dulce, no un sabor dulce excesivo, su textura es dura por fuera, pero algo más suave por dentro. Sus propiedades son empleadas para fines medicinales-tropicales, es decir, su consumo va motivado en gran parte para las dietas balanceadas, la alimentación nutritiva, etc. No obstante, la zanahoria tal como la conocemos hoy en día no será el tema central de este artículo. Principalmente, hablaremos de la zanahoria morada, de sus características, su historia y su cultivo, además comentaremos algunos datos sobre su origen.
Origen de las zanahorias moradas
Resultará impresionante para muchos saber que primeramente la zanahoria era de color morado, de hecho, este tono es en realidad su forma y color original. Desde el principio de los tiempos, la zanahoria era conocida por los europeos bajo un tono morado, por tanto, si el lector pudiera consultar a una persona perteneciente al siglo XVIII, éste le respondería que sí, que las zanahorias eran de color Morado.
La zanahoria morada existe desde hace aproximadamente 3000 años a.C, pero a pesar de esto, sus propiedades no se distinguen en gran medida de la zanahoria de hoy en día, por tanto, aspectos como su sabor y aportes no poseen grandes diferencias, de hecho, las principales y pocas diferencia que podemos discriminar al simple vista entre la zanahoria morada y la zanahoria naranja es su tamaño y color y sin embargo, la zanahoria morada es de color naranja por dentro, por tanto, se reducen las diferencias entre estas.
La zanahoria morada llega al mundo como obra de los holandeses, como parte de un experimento en el cual, el principal objetivo era dar el tono de la casa real holandesa, aparte de que las zanahorias moradas son reconocidas por sus grandes aportes nutricionales, siendo su componente principal, la antocianina, siendo también responsable de cada uno de los beneficios que este vegetal le ofrece al cuerpo, entre los cuales, podemos mencionar:
A nivel cardiovascular, mantiene los vasos sanguíneos limpios y purifica la sangre, manteniendo al consumidor activo durante actividades de alto desempeño físico.
Buen aporte en fibra, lo cual le permite al consumidor la posibilidad de generar dietas saludables para bajar de peso, así como también, mantener dietas balanceadas.
A nivel inmunológico, eliminan las toxinas que pueden encontrarse coladas en algunos alimentos. También, aportan nutrientes que dan pie al desarrollo del sistema inmunológico.
Su cultivo debe realizarse bajo las siguientes recomendaciones:
Debe guardarse una distancia de 10 x 10cm de cualquier otra planta, en este sentido, debemos ubicar un lugar despejado para sembrar la semilla.
Seguidamente, debe escogerse un lugar húmedo en el cual la semilla quede 1 cm por debajo del abono, siendo recomendable sembrar una gran cantidad de semillas, dado que puede resultar difícil que las semillas nazcan y de resultar efectivo, la cosecha comenzará a los 3-4 meses de haber sido sembradas las semillas.
Una de las ventajas que ofrece la zanahoria morada, es que ésta puede tolerar los climas más hostiles, de tal manera que su siembra puede realizarse durante cualquier estación del año mismo. Así pues, el usuario estaría capacitado a la hora de realizar la siembra en el momento en el que considere oportuno, sin responder a condiciones climáticas en las cuales podría comprometerse el estado de esta semilla como tal.
Como podemos concluir, la zanahoria morada es el primer espécimen de zanahoria que existió alguna vez.
Irónicamente, sus producciones actuales presentan niveles sumamente bajos, lo cual ha dado lugar a medidas de producción vigorosas, las cuales buscan mantener con vida a este tipo de zanahoria, tanto por cuestiones nutritivas como por cuestiones éticas.