No hay duda de que una de las plantas más llamativas por sus hojas es la alocasia. Tiene tantas variedades con hojas tan dispares entre sí que da igual que no florezca, son igual de hermosas. Pero, ¿qué pasa si tienes una alocasia con hojas amarillas?
Si quieres saber qué puedes hacer para evitarlo, y así no perder la planta, a continuación te damos todas las claves para hacerlo. Presta atención porque muchas veces esto es el resultado de malos cuidados y, si le pones remedio, te lo agradecerá echando más hojas. ¿Empezamos?
Vejez
Imagina que tienes un alocasia con unas hojas espectaculares. Lleva así un año, y está preciosa. Pero, de repente, y sin saber el motivo, tu alocasia empieza a tintar las hojas de un tono amarillo que te asusta. ¿Te ha pasado?
Esto que te contamos es quizá lo mejor que te puede pasar. Y es que no es culpa tuya. En realidad, es «ley de vida».
Todas las hojas de una planta duran un tiempo, no para siempre, así que cuando una alocasia que, en principio, no tiene ningún tipo de problema, empieza con hojas amarillas, sobre todo en la parte inferior, las más antiguas, es porque es el momento de que las pierda.
Pero, en general, casi al mismo tiempo que pierde una vuelve a echar otra nueva, y si sigues con los cuidados que necesita lo habitual es que sea igual de grande, o incluso más.
Esto quiere decir que no tendrás que hacer nada. Es algo que va a pasar, y que forma parte de su ciclo de vida.
Falta de drenaje
A pesar de que las alocasias son plantas que necesitan tener el sustrato húmedo, en ocasiones, ese exceso de agua, acompañado de una falta de drenaje, hace que la planta se enfrente a un encharcamiento. Y eso conlleva la pudrición de las raíces.
En general, cuando compramos las plantas, en los viveros suelen tenerlas en macetas más o menos justas y con muy poco drenaje. Por eso se recomienda que, pasados unos quince o veinte días, las trasplantes con un sustrato más acorde a la planta y, sobre todo, con mucho drenaje.
Es fundamental para que no se le acumule el agua. Y si estás pensando en que así no tendrá la tierra húmeda no es así. En realidad, al usar humus de lombriz o similar, sí que la tendrá (húmeda, que no empapada).
Falta de humedad
Otro de los motivos de las alocasia con hojas amarillas es la falta de humedad. Porque… ¿sabes que las alocasias necesitan una humedad ambiental de entre el sesenta o setenta por ciento? Pues así es. Y el problema es que lo normal en un hogar es que esté entre el treinta y el cincuenta por ciento (en verano puede caer hasta el diez por ciento en zonas muy cálidas).
Esto afecta muy negativamente a la planta, al punto de que amarillea las hojas y las tira en un intento por protegerse (pero acabará por tener problemas y morir si no le pones remedio).
Afortunadamente tienes varias opciones como agrupar plantas o poner un plato con guijarros y agua. Pero no funcionarán tan bien como colocar un humidificador con el que puedas controlar el tanto por ciento de humedad en el ambiente.
Eso sí, cuidado porque para el ser humano una humedad del setenta por ciento no es adecuada (ha de estar como mucho en el cincuenta o sesenta).
Si te lo preguntas, un exceso de humedad también es perjudicial, ya que podría hacer los mismos estragos que con un exceso de riego.
Exceso de riego
Seguimos con los motivos por los que puedes tener una alocasia con hojas amarillas. El riego, como en casi todas las plantas, se convierte en un problema importante. Y puede ser el causante de que tengas esta planta con las hojas amarillentas.
¿Por qué? Cuando esto pasa, y notas que la tierra está demasiado mojada, es un indicador de que hay podredumbre en la raíz. Dicho de otro modo, que se están pudriendo.
Aquí hay que actuar rápidamente, porque si no, el bulbo de la alocasia se puede pudrir y al final no podrá brotar de nuevo.
Tienes que sacarla de la maceta y quitarle toda la tierra posible, hasta dejarla solo con las raíces. Puedes incluso lavarla un poco con agua para dejar visibles las raíces.
Y es que tendrás que examinarlas y eliminar las que ya estén negras, blandas… porque esas las habrás perdido inevitablemente.
Revisa también el bulbo para saber si está demasiado blando o si echa agua (puedes secarlo con servilletas). Si pasa esto es posible que no haya solución, pero puedes intentarlo.
Por último, solo tendrías que volver a plantarla en una maceta nueva con tierra seca. Eso sí, la habrás estresado, así que es posible que pierda todo el tallo, hojas, etc. pero si el bulbo está bien volverá a brotar unas semanas o meses después.
Araña roja
Si bien la alocasia puede tener varias plagas que le afecte, una que provoca en la alocasia las hojas amarillas es la araña roja.
La vas a encontrar sobre todo en la parte trasera de las hojas (en el envés) y allí se alimentará de la clorofila de esta. Para que te hagas una idea, verás puntitos raros de donde empieza a perder el color y se amarillea.
El problema es que, cuando no nos damos cuenta, y la araña se da un festín, es habitual que amarillee toda la hoja.
¿Y la solución? Pues es fácil: limpiar la planta con alcohol, echar insecticida adecuado y, finalmente, aceite de neem o similar para protegerla.
Esto mismo te puede servir si en lugar de la araña roja tienes cochinillas, que también pueden afectarle, o pulgones.
Como ves, tener una alocasia con hojas amarillas puede ser algo habitual, sobre todo si no conoces al cien por cien los cuidados de tu planta. Por eso, para evitarlo, es mejor prevenir y conocer toda la información posible para cubrirle las necesidades que tiene de manera adecuada. ¿Te ha pasado alguna vez? ¿Cómo lo solucionaste?