Cereus repandus: todo lo que debes saber sobre este cactus

Cereus repandus

Dentro de la familia de los cactus hay muchísimas variedades de ellos. Casi tantas como gustos puedes tener por estas plantas. Uno de ellos es el Cereus repandus, también conocido como Cereus peruvianus. ¿Lo conoces?

Aquí te dejamos una guía con las características que debes saber del Cereus repandus así como los cuidados en caso de que tengas uno en casa o bien quieras tenerlo. Podrás consultarla para mejorar la calidad de tu planta.

Cómo es el Cereus repandus

detalle de las espinas del cactus

A la hora de buscar datos sobre el Cereus repandus debes saber que es más habitual encontrarlo por otros nombres. Uno de los más comunes es el Cereus peruvianus. Sin embargo, hay algunos otros como es el Cereus Uruguayanus, cactus candelabro o cactus ordenador.

Es originario de Brasil, Uruguay y Argentina, aunque ahora se puede encontrar en muchos otros países. Fue descrito por primera vez en 1768 por el horticultor y botánico británico Philip Miller.

Visualmente, hablamos de un cactus columnar compuesto por uno o varios tallos, que puede alcanzar fácilmente los 15 metros de altura. Es grande (los tallos pueden medir 15-20 centímetros de grosor (diámetro)), recto y espinoso. Sin embargo, cuando está en maceta no es fácil que alcance esa altura y sí se quede en 1-2 metros como mucho.

Los ejemplares más jóvenes tienen una tonalidad verde azulado pero, conforme van madurando, esta se va perdiendo y entonces son verdes más oscuros.

En cuanto a costillas, las tiene. Lo normal es que sean de cinco a ocho, que sean bastante anchas y prominentes (sobre todo porque aparecerán muescas y hendidudas profundas).

Dispone, además de areolas en esas muescas de las que te hablábamos que estarán llenas de pelo blanco y de las que saldrán unas siete espinas de color marrón, separadas y pequeñitas (salvo casos excepcionales que pueden llegar a medir cinco centímetros).

Como muchos otros cactus, el Cereus repandus también florece, pero esto solo lo verás en los ejemplares grandes y ya más maduros. Las flores serán de unos 15 centímetros de largo, con pétalos blancos y verdes amarronados. Su época de floración es el verano y, además, tiene la particularidad de que solo se abren las flores por la noche. Una sola noche, porque tras eso se marchita. Si tienes la suerte de tener polinización en la flor, llegarán los frutos, que serán rojos y de entre 2,5 y 5 cm de diámetro.

Cuidados del Cereus repandus

cactus floreado

Tras conocer un poco más a fondo al Cereus repandus, ¿te animas a tenerlo en casa? Este es uno de los cactus que podrías tener tanto dentro de casa como fuera. De hecho, si lo tienes en interior crece mucho más rápido que en exterior. Pero, ¿qué otros cuidados necesita? Te los explicamos.

Ubicación y temperatura

Tal y como te decíamos, el Cereus repandus se puede tener en interior o en exterior. Es una variedad que, si bien necesita sol, este no tiene por qué ser directo (sobre todo si no está acostumbrado) porque se quema muy fácilmente. Por eso:

Si lo quieres en interior, colócalo en una zona donde recibe varias horas de sol directo (pero controlando que este no lo queme, si es así, mejor luz indirecta siempre), y el resto del día sol indirecto. Con esto será capaz de crecer unos 30 centímetros al año.

Si lo quieres en exterior, es mejor una localización de semisombra porque así conseguirás que el sol no haga de las suyas, sobre todo en verano. Si el ejemplar ya está acostumbrado al sol entonces sí que puedes dejarlo a pleno sol. ¿Y su crecimiento en este caso? Pues hablamos de entre 50 centímetros y 1,2 metros anuales (por supuesto, dependerá de que le des las condiciones adecuadas y de que tenga espacio para crecer).

En cuanto a la temperatura, el calor no da problemas, y el frío tampoco, al menos hasta que llegue a los -3ºC. Si es menor, entonces sí se puede deteriorar. Aun así, los primeros años, o si el ejemplar es joven, sí tendrá más peligro porque no estará acostumbrado a ello.

Sustrato

Como muchas otras plantas, la tierra del Cereus repandus ha de ser ligera y, en este caso, con bastantes nutrientes. Una mezcla que le irá bien es utilizar sustrato para cactus con mantillo y perlita ya que así le aportarás todo lo que necesita la planta.

Su trasplante se realiza cada dos años aproximadamente (al menos si lo tienes en maceta). Sin embargo, has de rellenarle con mantillo todos los años para que mantenga la tierra acidificada.

Riego

Cactus completamente desarrollado

El riego del Cereus repandus debe ser siempre en su periodo de crecimiento, es decir, en primavera y verano. En ese momento deberás regar siempre que veas que tiene la tierra seca varios centímetros por arriba. En caso de que no sea así, conviene esperar.

Por su parte, en invierno (y otoño) se puede regar una vez al mes, pero si hay humedad en el ambiente entonces te recomendamos no hacerlo.

Abonado

El Cereus repandus es uno de los cactus que agradece, y mucho, que se fertilice. Si tenemos en cuenta que es una planta que crece muy rápido, los nutrientes extra le vendrán muy bien. ¿El mejor? Uno de liberación lenta, rico en potasio y fósforo, y bajo en nitrógeno.

Plagas y enfermedades

Si bien es bastante resistente para resistir las plagas, te recomendamos que tengas cuidado con las cochinillas, que no solo pueden afectar a la zona visible, sino también a las propias raíces. También puede ser un atractivo para la araña roja, que hará de las suyas.

En cuanto a enfermedades, la más importante es la podredumbre de la raíz, que puede pudrirla y que el cactus desaparezca.

Multiplicación

Finalmente, para propagar el Cereus repandus lo mejor es utilizar las semillas de sus frutos.

Estas se recogen de los frutos del cactus y se deben limpiar para plantar en primavera. Son bastante rápidas (germinan antes que otras variedades de cactus) pero también por eso son delicadas.

En primavera has de plantarlas en macetas con una buena tierra y, si las mantienes a unos 25ºC constantes, en 14-28 días verás que empiezan a salir y a crecer. Hasta que no estén bien enraizados no debes tocarlos, y solo entonces los deberás pasar a una maceta pequeña para que empiecen a crecer.

Otra forma de reproducirlo es a través de partes de tallo enraizadas. Sin embargo, no es fácil de hacer y además supone «romper» la propia planta. Finalmente, los esquejes son otra opción, menos destructiva, y que puede darte mejor solución.

Como ves, el Cereus repandus no es un cactus que te vaya a dar mucho problema, y, sin embargo, sí que puede ser muy ornamental para tu jardín de cactus. ¿Te animarías a tenerlo?


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.