¿Estás buscando alguna planta para tu jardín que te cubra bastante y te aporte ese «algo» especial? Entonces, ¿por qué no le echas un vistazo a la Imperata cylindrica? Se trata de una planta que llama mucho la atención por el tono rojizo que tienen las puntas de las hojas.
¿Quieres saber más sobre ella? ¿Conocer cuáles son sus cuidados? Entonces sigue leyendo porque te hemos preparado una ficha sobre sus características y cuidados.
Cómo es la Imperata cylindrica
La Imperata cylindrica también recibe otros nombres, como son Imperata cylindrica red barón, hierba roja japonesa, Imperata cylindrica rubra, hierba cogon, marciega, hierba sangrienta, cisca... Y sí, antes de que te lo preguntes, es originaria de Japón.
Se trata de una gramínea o hierba de hoja perenne que va creciendo formando grupos de matas compuestas de hojas verdes y verticales pero, con la características especial de que las puntas son de color rojo, hasta el punto de que cambia de tonalidad conforme avanzan las estaciones (en el otoño es una de las plantas más hermosas que hay).
No es común que florezca y en caso de hacerlo, es necesario que el clima sea frío para lograrlo. Por eso, aunque muchos puedan pensar que no es demasiado agradable para un jardín, la tonalidad roja, en contraste con el verde, ya de por sí hace que sea lo bastante atractiva para ponerla en el jardín. Llega a crecer hasta un metro de alto y unos 70 centímetros de ancho. Aun así, si tienes la suerte de que te florece, lo hará en septiembre u octubre, con unas flores que pueden ser blancas con tonalidades plateadas.
Ahora bien, debes tener en cuenta que la Imperata cylindrica es una planta que tiene fama de ser invasiva, porque se desarrolla bastante rápido y va ganando terreno donde la plantas. Por eso, se puede tener en el jardín, pero con barreras que impidan que invada el espacio de otras plantas, o bien en una maceta.
Cuidados de la Imperata cylindrica
Ahora que has conocido un poco más cómo es la Imperata cylindrica, ¿qué tal si te hablamos de los cuidados? No es una planta demasiado complicada de tener. Pero como hierba que es sí necesita que se conozcan las peculiaridades.
Ubicación y temperatura
Empecemos por la ubicación. La Imperata cylindrica es una planta que necesita estar en el exterior. En este sentido, puede estar en semisombra o al sol directo. ¿De qué depende? Básicamente del clima que tengas. Si es frío o templado, la podrías dejar al sol directo y así disfrutar de los cambios de tonalidad que va experimentando. Por su parte, si es cálido, y hace demasiado calor en verano, sería mejor la semisombra para que las horas de mayor incidencia no quemaran las puntas (que es lo más bonito de esta hierba).
Con respecto a la temperatura, puede tolerar las altas, y también las bajas. De hecho, se dice que aguanta bien hasta los -15ºC. Aun así, durante los primeros años sí te diríamos que la protegieras, al menos el suelo, para impedir que se hiele y se adapte bien al clima donde la tengas.
Sustrato
La Imperata cylindrica no es una planta demasiado exigente en este punto. Salvo por un detalle: no le gusta la tierra caliza. Así que intenta darle una tierra que sea rica en nutrientes, ligera y, por supuesto, drenada.
Deberías darle una tierra con un pH neutro. Por tanto, una mezcla con tierra muy nutritiva y perlita o similar será su ideal.
Ahora bien, como te hemos dicho antes, la Imperata cylindrica es una planta que puedes tener en el jardín o en una maceta. En el caso del jardín, antes de plantarla conviene echar en el hoyo que hagas un poco de estiércol o de compost para nutrir esa parte de la tierra (además de mezclarlo con la que uses para fijar la planta al suelo).
En el caso de la maceta no será tan necesario.
Riego
Dependiendo de cuál sea el clima, dónde la hayas puesto, etc. tendrás que regarla más o menos. En general, es de riego medio y necesita tener la tierra ligeramente húmeda siempre, pero sin pasarse porque podría sufrir de pudrición.
Así, podríamos decirte que habría que regarla en primavera y verano de dos a tres veces a la semana, mientras que en otoño e invierno podría ser suficiente con una vez a la semana o cada dos semanas.
Abonado
Antes te hemos hablado un poco del abonado a la hora de plantar. Pero, ¿qué hay después? Al ser una planta perenne, la Imperata cylindrica agradece que, de vez en cuando, sobre todo en primavera y verano, que es su época de crecimiento, se le aporten nuevos nutrientes.
Te recomendamos apostar por algo de estiércol o compost para nutrirla en el jardín. Pero, si la tienes en maceta, quizá sea mejor usar un fertilizante líquido que mezcles con el agua de riego.
Poda
En este aspecto no deberías preocuparte en absoluto porque, salvo que la veas muy mal, no hay que podarla. Recuerda que es una planta perenne y lo único que tendrías que cortar es cuando vieras las hojas quemadas, en mal estado, marchitas…
Plagas y enfermedades
En el caso de las plagas y enfermedades la Imperata cylindrica no es una planta a la que le afecten mucho. Primero, porque es una hierba y no suelen atacarla; segundo porque, al no florecer, no atrae a los pájaros. Aun así, sí podrías verte en problemas con caracoles o babosas que quieran alimentarse de ella.
Con respecto a las enfermedades, quizá las más importantes tengan que ver con el exceso o falta de agua o de iluminación.
Multiplicación
¿Quieres propagar la Imperata cylindrica? Antes te hemos dicho que es una planta invasora, lo que quiere decir que va creciendo en matas y expandiéndose. Y eso mismo es lo que a ti te sirve para reproducirla.
Lo único que tienes que hacer es, durante el otoño e invierno, dividir la mata para ponerla en macetas diferentes (o en zonas diferentes del jardín).
Ahora ya sabes cómo es y qué necesita la Imperata cylindrica. ¿Te gustaría tenerla en tu jardín?