¿Podemos ayudar a una planta a crecer con luz artificial?

Luz artificial para plantas y su efectividad para el crecimiento.

Todas las plantas y árboles, con independencia de su tipo y variedad, necesitan tres cosas básicas para crecer fuertes y sanas: agua, nutrientes y luz. Sin embargo, no siempre reciben la cantidad de luz natural que es necesaria. ¿Qué podemos hacer entonces? ¿Es posible utilizar luz artificial para plantas?

Vamos a ver con más detalle hasta qué punto es importante la luz para el crecimiento de las plantas y si podemos sustituir la falta de luz natural con algún sistema de iluminación artificial.

La importancia que tiene la luz del sol para las plantas

¿Por qué es atan importante la luz del sol en las plantas?

La luz solar es una fuente de vida para las plantas, y es que influye de manera clave en su proceso vital, afectando a su desarrollo y crecimiento.

Las plantas son seres vivos con millones de años de evolución, y a lo largo de este tiempo han ido desarrollando complejos mecanismos que les permiten aprovechar la energía solar y convertirla en nutrientes que para ellas son vitales. Esto es lo que conocemos como fotosíntesis.

La fotosíntesis es el proceso biológico más importante que llevan a cabo las plantas. Se trata de utilizar la luz solar para convertir el dióxido de carbono y el agua en glucosa y oxígeno. Lo que produce una reacción química que genera nutrientes y aporta energía a la vida vegetal.

La evolución de las plantas ha sido tan detallada, que sus hojas son capaces de absorber de forma selectiva ciertas longitudes de onda. Es decir, que solo absorben aquella parte de la luz solar que les resulta realmente útil.

Si queremos saber hasta qué punto es importante la luz para las plantas, solo tenemos que pararnos a observar su crecimiento. La dirección y la intensidad de la luz afectan a la orientación de las hojas y a la formación de estructuras como las flores y las frutas.

Por ejemplo, algunas plantas tienden a la etiolación si no reciben la luz suficiente (esto es común en algunas suculentas). De modo que sus tallos se vuelven más largos y débiles para poder llegar a un lugar en el que reciban mayor cantidad de sol.

Además, si una planta no recibe suficiente luz, o la recibe de manera desigual, notaremos rápidamente que su aspecto empieza a ser más débil, incluso que el lado que recibe más sol crece más y mejor que el que está más en penumbra.

En definitiva, la luz (o la ausencia de ella) afecta de manera notable a las plantas e incide dentro de sus funciones vitales básicas. Por eso, debemos procurar que todas ellas reciban un mínimo de seis horas de luz (directa o indirecta, según la especie) cada día. Sin embargo, esto no siempre es posible. Si es tu caso, es importante que sepas que hay soluciones viables.

Luz artificial para plantas: una alternativa viable

Qué hacer si tus plantas no pueden llevar luz natural.

Al principio de este artículo nos preguntábamos si era posible utilizar luz artificial para hacer crecer nuestras plantas, y la respuesta es que sí. En caso de que tus plantas no reciban la cantidad de luz natural que necesitan para crecer fuertes y sanas, se la puedes aportar de forma artificial a través de lámparas de cultivo o de luces LED específicas para plantas.

Pero hay una serie de consideraciones que debes tener en cuenta para que el resultado sea positivo:

Espectro de luz

Para poder realizar la fotosíntesis, las plantas necesitan diferentes longitudes de onda de luz. Por eso, no nos vale con cualquier lámpara para aportar iluminación, necesitamos una luz artificial capaz de ofrecer un espectro de luces que incluya colores como el rojo y el azul, que inciden directamente en las etapas de crecimiento y floración de las plantas.

En función de la variedad a la que vayas a aplicar la iluminación artificial, tendrás que elegir el espectro más adecuado para sus necesidades.

Duración de la luz

El fotoperiodo, o duración diaria de la exposición a la luz, es también muy importante para conseguir un buen crecimiento. Porque las plantas necesitan luz, pero también requieren de unas cuantas horas de oscuridad para poder crecer de una forma más saludable y florecer cuando llegue el momento.

En algunas especies, el fotoperiodo debe ser más largo durante la fase de crecimiento y más corto durante la floración. Por tanto, si utilizas luz artificial para plantas, asegúrate de hacer una buena regulación de la misma en base a las necesidades específicas de cada planta.

Intensidad lumínica

Otro factor a tener en cuenta es la intensidad de la luz artificial, porque cada planta requiere un nivel diferente de luz.

Las lámparas diseñadas para plantas suelen contar con un regulador de intensidad lumínica. Si no es así, necesitas hacerte con un medidor de luz para asegurarte de que estás proporcionando la cantidad adecuada de luz para cada tipo de planta.

Distancia y posicionamiento

La distancia para colocar la luz artificial para plantas

Al utilizar luz artificial para plantas es esencial controlar la distancia que existe entre la fuente de luz y las plantas. Si la luminaria está muy cerca esto puede generar un exceso de calor que afectará a la planta. Por el contrario, si colocamos la lámpara muy lejos, es posible que las plantas no reciban la cantidad de luz que necesitan.

Te recomendamos ir haciendo pruebas hasta encontrar la altura y posición de las luces que sea más efectiva a la hora de conseguir una distribución efectiva de la luz sin llegar a causar un calor excesivo.

Monitoreo y ajustes

El uso de luces artificiales para plantas no es una ciencia exacta. El éxito depende del tipo de lámpara utilizada, del número de horas de exposición y del tipo de plantas sometidas a esa luz, entre otros factores.

Por tanto, es posible que no aciertes a la primera. Pero no te desanimes, lo mejor es que vayas probando diferentes ajustes poco a poco y examines cómo responden las plantas. Si notas síntomas de estrés o que el crecimiento es inadecuado, realiza los ajustes que estimes convenientes en cuanto al espectro de luz, el tiempo de exposición o la intensidad de la luz.

Además, ten en cuenta que hay algunas variedades de plantas que responden mejor que otras al estar sometidas a cultivo bajo una luz artificial.

Cuando se trata de emplear luz artificial para plantas, todo es cuestión de ensayo y error. Con un poco de paciencia, seguro que acabas dando con la fórmula perfecta.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.