Si tienes una suculenta con flores amarillas que te ha encantado, seguro que ahora puedes estar pensando en otras que también la tengan igual. Si a ese le unimos el hecho de que se dice que este tipo de plantas con ese color de flores atrae la buena suerte y el dinero, ¿ya quieres saber cuáles hay?
Pues dicho y hecho, aquí tienes una selección de suculentas con flores amarillas que puedes querer tener en casa. ¡Échales un vistazo a todas ellas!
Echeveria Fabiola
Fuente_Succulent Alleya
La echeveria Fabiola es una de las más bonitas que hay. Y si bien las flores no son del todo amarillas (por completo), si te fijas en las fotos verás que, por fuera, son rosas, pero el interior de ellas sí son amarillas.
En cuanto a sus cuidados, esta suculenta es bastante fácil. Es una roseta de hojas carnosas y requiere de mucha iluminación, poco riego y estar un poco pendiente de la temperatura que haya en el ambiente. Florecerá en primavera y verano, con una vara floral (a veces doble) de la que saldrán flores acampanadas de esos colores.
Echeveria derenbergii
Otra de las echeverias que deberías tener en cuenta si quieres una suculenta con flores amarillas es esta. Es muy parecida a la echeveria Fabiola, pero en este caso las flores sí son amarillas por fuera con algunos toques de color rojizo. En cuanto a las hojas, estas, cuando les da el sol, suelen tener las puntas rojizas. Eso le da un toque especial, porque el borde de estas se vuelve rojo que contrasta con el verde más oscuro que adquieren.
Las flores también salen de una vara floral (a veces echa varias) y tendrán forma de campana pero hacia arriba (no caen salvo que el peso haga que se combe).
Faucaria tigrina
Seguimos con suculentas de flor amarilla con esta. No es una suculenta común, más bien solo los coleccionistas de estas plantas se fijan en ella, pero si eres uno de ellos verás que tiene un cuerpo formado por varias hojas que acaban en púas (aunque estas no suelen pinchar).
En el interior de esas hojas, y en el centro de la planta, se forma una vara floral de la que salen flores completamente amarillas, con pétalos muy abundantes y estrechos.
Fenestraria rhopalophylla ssp. Aurantiaca
Esta suculenta de flores amarillas, llamada comúnmente fenestraria (a secas) es originaria de África y se compone de columnas delgadas que se englosan al final. De las juntas de esos tallos es de donde salen tallos florales. Pero cuidado, no te dejes engañar.
Y es que, cuando el capullo empieza a mostrar los pétalos, los verás rosas y conforme vayan creciendo, en su interior verás que son amarillos.
Cuando la flor termina de abrirse habrá perdido ese tono rosado para dar paso a uno amarillo fuerte o incluso anaranjado muy llamativo (sobre todo en contraste con el verde de la planta).
Hatiora salicornioides
Esa planta de tallos como un árbol y hojas como si fueran dedos te llamará la atención. En principio son verdes (aunque si les da el sol pueden cambiar la tonalidad a una más rojiza. Además, en su época de floración lo normal es que esta eche flores amarillas (o amarillas y naranjas por igual), atrayendo así al dinero y al éxito.
En cuanto a los cuidados debes tener presente que, si bien necesita sol, si la expones demasiado y con temperaturas altas, se puede quemar o perder fácilmente. Además, requiere un riego algo más abundante que otras suculentas (lo notarás porque los “dedos” se le empiezan a arrugar y a perder fuerza).
Lithops lesliei
Los Lithops lesliei tienen la capacidad de florecer en otoño, y es verdad que solo abrirá la flor 2-3 horas por la tarde (el resto del tiempo la tendrá cerrada). Pero te durará una semana o así. ¿Y de qué color crees que son las flores? Pues sí, de color amarillo.
Se caracteriza por estar formada por muchos pétalos amarillos pero blancos en el centro de la flor, de donde saldrán los pistilos, agrupados y blancos hasta que empiezan a tornarse amarillos.
Machairophyllum bijlii
Esta suculenta con flores amarillas te llamará la atención porque hablamos de una planta formada por hojas carnosas y alargadas, terminadas en punta, que pueden crecer en diferentes direcciones (es un poco caótica en ese sentido) o retorcerse. Pero lo que nos trae aquí y por lo que te la citamos es porque, en primavera y verano tendrás unas flores formadas de pétalos muy finitos y de color amarillo (en el centro son algo blancos o con una tonalidad amarilla muy pálida).
Sedum acre
El sedum acre se caracteriza por tener tallos más o menos gruesos como si fueran pilares. Sin embargo, en la época de floración estos echan en los extremos unas flores de cinco pétalos de color amarillo. De hecho, es un espectáculo verlos.
Senecio kleiniiformis
Fuente: GardenTags
El senecio kleiniiformis, como muchos senecios, tiene una forma curiosa. Parecerá una suculenta y al mismo tiempo no. Esta está formada por tallos de los que salen hojas alargadas con una forma peculiar. Además, saca tallos florales, bastante largos, de los que, al final, tiene un montón de capullos que, al abrirse, te dejarán ver unas flores minúsculas y de color amarillo.
Kalanchoe de hojas amarillas
Si lo que quieres es una planta más similar a una normal (hojas y flores), entonces puedes optar por el kalanchoe. Como sabrás, estas pueden dar flores de muchos colores: naranja, rojo, blanco… y sí, también amarillos.
Son muy fáciles de cuidar y las hojas parecerán como cera. Requiere una humedad un poco mayor a la de otras suculentas, pero a cambio te florecerá todo el año.
Echeveria pulidonis
Esta echeveria, de borde rojizo, es una de las más hermosas con flores completamente amarillas y en forma de campana. Florecerá en primavera y verano y, al estar hecha de una roseta, es fácil que crezca redondeada y que puedas obtener hijuelos de ella para plantar nuevas.
Como ves, no hay una suculenta con flores amarillas, en realidad puedes encontrarte con muchas de ellas. ¿Qué tal si te haces un grupo para que el éxito y el dinero lleguen a tu casa y se queden allí para siempre?