A pesar del avance de la desertificación en el continente africano, todavía es posible encontrar especies que consiguen sobrevivir en condiciones muy complejas. Es lo que ocurre, entre otros, como el albizia ferruginea.
Este árbol africano crece en las regiones tropicales y es muy apreciado por su madera. De hecho, esta es una de las especies de árboles que más se explotan con fines comerciales.
¿Cómo es el albizia ferruginea?
También conocido como falsa acacia, es originario de la zona de América Central y del Sur. No obstante, debido a su madera resistente y duradera, se ha introducido en otras regiones.
Sí existen, sin embargo, otras variedades de albizia que sí son originarias de África como la lebbeck o albizia de Siria. De igual manera, estas variedades se han exportado a regiones tropicales.
Para saber si estamos ante un albizia ferruginea, vamos a prestar atención a estas características:
- Altura. Es un árbol capaz de alcanzar una gran altura. Lo habitual es que mida entre 15 y 30 metros, pero puede llegar a ser más alto.
- Tronco y ramas. Se caracteriza por tener un tronco recto con hasta un metro de diámetro de anchura. Las ramas crecen desde el tronco principal y se distribuyen en capas.
- Copa. La forma de la copa de este árbol suele ser redondeada u ovalada cuando es joven. A medida que envejece, se puede volver más amplia, pero lo normal es que siga manteniendo su forma redondeada..
- Follaje. Es denso, formado por hojas bipinnadas que crecen en ramificaciones opuestas a lo largo de las ramas. Su color verde brillante consigue que este árbol presente un aspecto exuberante.
- Flores. Este árbol produce racimos de flores de color blanco o rosado que resultan muy vistosas y ejercen un fuerte poder de atracción sobre los polinizadores.
- Frutos. El fruto de este árbol es una vaina plana y alargada de color marrón oscuro, que puede medir hasta 20 centímetros de longitud, y dentro de la que nos encontramos las semillas que permiten reproducirse a esta especie.
La explotación del albizia ferruginea para obtener su madera
La madera procedente de este árbol es muy apreciada por diferentes factores:
Versatilidad
Es una madera relativamente fácil de trabajar, que cuenta con una textura uniforme y suave. Esto la hace muy popular entre los artesanos y los fabricantes de muebles.
Por eso, tiene un gran número de aplicaciones. Se utiliza para hacer muebles, revestimientos, embalajes, y todo tipo de productos que necesiten una madera de calidad y con un buen acabado estético.
Resistencia y durabilidad
Aunque esta madera no es tan resistente como la procedente de otras especies de árboles tropicales, puede llegar a tener una vida muy útil si se trata con los productos adecuados.
De hecho, tiene cierto grado de resistencia cuando está a la intemperie, y sobrelleva bien el desgaste.
Poco peso
En comparación con otras maderas, esta es algo más ligera, por lo que resulta más fácil de manejar y transportar.
Esta condición la hace ideal para aplicaciones en las que es importante aligerar el peso. Por ejemplo, en la fabricación de muebles o paneles.
Estética
La madera del albizia ferruginea tiene un color natural que va desde el marrón claro a tonos más oscuros con vetas. De ahí que sea una elección habitual en la fabricación de muebles y de artículos de decoración.
¿Qué cuidados necesita este árbol?
Esta es una especie muy apreciada por su madera, pero también tiene un alto valor ornamental. Porque se trata de un árbol con un porte muy bonito. Así que no es mala idea valorar su adición a un jardín.
Plantación adecuada
Para asegurar que el árbol crece bien, es importante prestar atención y cuidado al acto de plantación.
Debemos ponerlo en un lugar que tenga un suelo drenado y fértil, enterrando las raíces de manera que estas queden bien cubiertas, pero no demasiado profundas.
Este es un árbol cuyas raíces se expanden a medida que va creciendo, así que debemos dejarle espacio y no situarlo demasiado cerca de otros árboles. Ya que en este caso tendrá que competir con otros para acceder a los nutrientes que necesita.
Riego del albizia ferruginea
El primer año tras la plantación, es importante regar de forma regular, sin dejar que la tierra llegue a secarse del todo.
Una vez que el árbol está establecido, se vuelve bastante resistente frente a la sequía, pero nunca le viene mal recibir un poco de agua.
Fertilización
Este árbol crece mejor en suelos fértiles. Si el sustrato es pobre en nutrientes, es conveniente que fertilices durante la primavera, pero siempre con precaución para no causar daño a la falsa encina.
Poda
La poda es necesaria para darle forma al árbol, estimular su crecimiento al eliminar ramas muertas o enfermas, y prevenir la obstrucción de las vistas o que las ramas puedan impedir el paso.
Durante los primeros años se hace una poda de formación para definir la estructura de ramificación. Esto implica eliminar ramas cruzadas o que crecen demasiado verticalmente.
Después, se pasa a una poda de mantenimiento, que se puede realizar en cualquier época del año. Pero que es aconsejable realizar en invierno para minimizar el estrés que va a sufrir el árbol.
Para mantener la forma del árbol, te recomendamos eliminar los chupones (brotes verticales que surgen del tronco o de las ramas principales).
Mantenimiento del suelo
Además de añadir fertilizante si el suelo es pobre en nutrientes, se aconseja crear una capa protectora de mantillo orgánico para ayudar a conservar la humedad.
Por otro lado, es recomendable eliminar las malas hierbas que crecen alrededor del árbol, para que no tenga que competir con otras especies por los nutrientes.
Protección invernal
Este árbol no tiene demasiada tolerancia frente al frío. Al llegar el invierno, aplica una capa de mulch en la base para aportar calor a las raíces, y protege las ramas con tela o fundas protectoras para vegetación cuando sepas que va a helar por la noche.
Durante la época invernal procura no regar demasiado, porque un suelo saturado puede aumentar la sensibilidad del árbol frente al frío. Riega esporádicamente y, a ser posible, a primera hora de la mañana, para que la humedad se evapore a lo largo del día.
Con estos cuidados, puedes conseguir una albizia ferruginea tan bonita que se convertirá en el protagonista de tu jardín.