Para la ornamentación no sólo se emplean flores y arbustos, sino que también se utilizan árboles. Cada zona geográfica tiene sus árboles más abundantes y autóctonos que permiten exprimir al máximo la belleza del territorio. En este post vamos a hablar sobre aquellos árboles que sirven para la ornamentación, sus características y cuidados.
Si quieres conocer más acerca de los árboles ornamentales, sigue leyendo 🙂
Abeto gigante (Abies grandis)
Este árbol pertenece a la familia Pinaceae y es originario de Norteamérica. Tiene un gran tronco de color marrón rojizo cuando son más adultos. En la etapa más joven se le puede ver con tonos más verde grisáceo. Pueden llegar a tener una altura de 15 metros.
Sus hojas son pequeñas, planas y rígidas. Son del tipo acícula. Este árbol es perfecto como ejemplar aislado de gran envergadura.
Normalmente viven a cierta altura sobre el nivel del mar (preferentemente por encima de los 700 metros hasta casi los 2000 metros). Gracias a este requisito, el abeto gigante se convierte en el árbol ideal para las zonas de montaña donde el tiempo atmosférico puede atacar y servirnos de refugio.
Necesitan de un suelo con un buen drenaje y la mejor forma de crecimiento es dándole el sol de pleno.
Acacia verde (Acacia decurrens Willd)
Se trata de una planta perteneciente a la familia Mimosaceae y originaria de Australia. Fue introducida en Europa en el año 1820. Es capaz de alcanzar los 10 metros de altura y sus ramas son finamente aterciopeladas.
En cuanto a sus hojas, son ramificadas y está compuesta de numerosos folíolos. Son hojas brillantes, separadas, planas y abiertas durante el día y replegadas cuando llega la noche.
Sus flores son pequeñas y disponen de estambres libres de color amarillo vivo. Tienen un gran perfume y florecen en invierno. Gracias a su floración es muy utilizada para la ornamentación de parques y jardines y también por su aroma agradable.
Requieren de abundante riego durante la época estival y evitar que el suelo donde crezca sea calcáreo. Es muy difícil multiplicar esta planta con éxito, es mejor conseguir una nueva planta y esperar a que florezca.
Carpe (Carpinus betulus L.)
Se le conoce por otros nombres comunes como abedulillo, haya blanca, carpino, olmedilla y ojaranzo. Pertenece a la familia Betulaceae y es originario de Europa y el sureste de Asia.
Es capaz de alcanzar una altura entre 12 y 30 metros. Es un árbol de hoja caduca y sus hojas se tornan en color amarillo en otoño. En la naturaleza se le puede encontrar formando parte de bosques caducifolios mixtos.
Sus hojas son de forma ovalada, asimétricas en la base y acuminadas. Cuando el árbol supera los primeros 20 años de edad, es cuando empieza a florecer. Los frutos maduran a finales de verano y principios de invierno.
Es muy conocido por tener una madera de muy buena calidad para tornear. Antiguamente se usó en yugos de bueyes y ruedas de dentadas de molinos por ser muy dura y resistente. A partir de sus hojas se puede preparar colirios.
Con frecuencia se utiliza para la ornamentación en parques y jardines y para la creación de setos. Es ideal para las calles que son más estrechas y funcionan perfectamente como pantallas anti ruido, ya que sólo pierde las hojas cuando salen las nuevas.
Necesitan tanto sol como sombra y temperaturas suaves. Es muy bueno soportando temperaturas muy bajas. Es capaz de adaptarse a todo tipo de suelo, aunque prefiere aquellos que son ligeros, profundos, frescos y ricos en materia orgánica. De esta forma, podrá alcanzar su máximo tamaño y salud. No tolera bien los ambientes cercanos a la costa ni en zonas mediterráneas más secas.
Ciprés fúnebre (Cupressus funebris Endl.)
A este árbol también se le conoce como ciprés llorón chino. Pertenece a la familia Cupressaceae y es originario de China.
Se cultiva de forma aislada para resaltar sus características de árbol llorón. No crece bien en suelos alcalinos.
Es muy utilizado por su madera buena para la construcción.
Eritrina (Erythrina corallodendron L.)
Este árbol también es conocido vulgarmente por árbol del chocho y madera inmortal. Pertenece a la familia Fabaceae y es originario de Sudamérica.
Sus hojas son alternas y están compuestas por tres folíolos ovales romboides de un color verde brillante. Crece en zonas templadas y suele ser un árbol solitario. Tiene un gran valor cromático en la etapa de floración.
Es un árbol bastante resistente. Soporta heladas leves que duren poco tiempo y resiste muy bien los trasplantes, incluso si se realiza en ejemplares ya adultos y sin previo repicado. Necesitan de un riego abundante en primavera y verano, pero poco en invierno. Tolera muy bien la cal, pero no soporta los suelos salinos.
Gingo (Ginkgo biloba L.)
Este árbol se le conoce también por otros nombres vulgares como árbol sagrado, árbol de los 40 escudos y árbol de las pagodas. Pertenece a la familia Ginkgoaceae y es originario de China. Allí es considerado un árbol sagrado, de ahí su importancia.
Se trata de un árbol de hojas caduca, capaz de durar muchísimos años y tiene un porte más erguido durante su juventud y más extendido conforme avanzan los años. Su crecimiento es muy lento y puede alcanzar una altura de 30 metros y una anchura de metro y medio.
Con respecto a sus ramas, son anchas y sus hojas tienen dos lóbulos. En verano se tornan de un color muy atractivo que lo hace ser toda una herramienta ornamental para parques y jardines. Su tonalidad dorada es lo que le otorga ese poder sagrado.
Sus frutos desprende un mal olor al madurar y sus semillas son del tamaño de una ciruela de color pardo amarillento. Los ejemplares masculinos tienden a ser más altos que los femeninos, que suelen ser más extendidos.
A diferencia de otros árboles, a pesar de su capacidad longeva, si no es polinizado durante un año, el árbol morirá. Si se pudre, expelerá un olor muy desagradable.
Es un árbol de gran interés en el mundo de la botánica, puesto que apenas ha sufrido cambios generación tras generación y se le conoce como un «fósil viviente».
Necesita de espacios amplios donde pueda desarrollarse bien. Sirve para la alineación de calles ya que es insensible a la contaminación urbana. Su belleza le otorgará un extra de valor ornamental a las calles. Crece mejor cuando le da el sol directamente y se adapta a cualquier terreno que no esté encharcado.
Seguro que con estos árboles sabrás un poco más sobre la ornamentación de parques y jardines y cómo darles un toque de más color a la ciudad.