Ciprés totem: cómo es este árbol y qué cuidados necesita

¿Has oído hablar alguna vez del ciprés totem? ¿Sabes qué tipo de ciprés es y cómo cuidarlo? Se trata de una de las plantas con mayor porte y presencia, utilizado sobre todo para senderos o para dividir y crear un manto de intimidad entre casas.

Pero, ¿qué sabes de esta planta? A continuación te hablamos de ella y te damos las claves para que puedas cuidarla de la mejor forma diferente. ¿Empezamos?

Cómo es el ciprés totem

El ciprés totem también es conocido como Cupressus sempervirens tótem o ciprés italiano. Y este último nombre hace referencia a su origen, ya que está muy extendido en los prados de la Toscana italiana. De hecho, en ese país se utilizan a menudo para delimitar senderos de entrada en las mansiones. Y no es para menos.

Te vas a encontrar con un ciprés que tiene una forma columnar y compacta. Crece en vertical y va ensanchándose poco a poco hasta convertirse en un ejemplar bastante grande y hermoso (pero no desarrolla ramas que hagan que se expanda a lo ancho, sino solo en vertical.

Es de crecimiento bastante lento, aunque eso lo único que consigue es que su precio suela ser mayor que con otros cipreses. Y es que conseguir ejemplares que sean bastante grandes y ya desarrollados implica que han pasado bastantes años para conseguirlo, y de ahí que sea más caro que en otras plantas de la misma especie.

Otra de las características del ciprés totem es que apenas desarrolla semillas. Es decir, va a tener muy pocas bolitas de las que sacar semillas, de ahí que no sobresalgan apenas y mantenga su estética.

En el caso de las hojas, estas son acículas y verdes intensas, de ahí que llame mucho la atención en los jardines, e incluso teniéndolo en una maceta. Si bien lo ideal sería tenerlo en el suelo plantado para que pudiera desarrollarse de manera adecuada.

Cuidados del ciprés totem

Ahora que conoces un poco mejor al ciprés totem, ¿te animarías a tenerlo en tu jardín? Es cierto que hablamos de un ciprés, y por ende hay que tener cuidado de las raíces y que estas no estén en zonas donde podrían dañar superficies o incluso cimientos, pero más allá de eso, es una planta que no entraña muchos problemas. Al contrario, si le das los cuidados que necesita crecerá muy bien, lento, pero bien.

¿Y cuáles son esos cuidados? Te hablamos de ellos a continuación.

Ubicación y temperatura

Tal y como te hemos dicho antes, el ciprés totem es una planta cuya mejor localización es en el exterior. Eso implica que estará mejor plantado en el suelo que en una maceta, si bien puedes tenerlo en ella (aunque no te va a crecer todo lo que debería).

En cuanto a su ubicación, esta dependerá del clima que tengas. Por ejemplo, si vives en una zona de calor extremo (y clima templado-cálido) sería preferible que lo colocaras en una zona de semisombra, sobre todo donde no le diera el sol las horas de mayor incidencia.

Si, por el contrario, vives en una zona de clima frío, puedes ponerlo sin problema a pleno sol.

Con respecto a las temperaturas, siempre que estas no caigan de -10ºC te resistirá bastante bien, y lo mismo en el extremo contrario, soportando las altas. Además, puedes colocarlo cerca del mar o en zonas con alta salinidad, porque también se adapta y va bien.

Sustrato

Como muchas otras plantas, el ciprés totem necesita de un sustrato con drenaje. En realidad, mucho más drenaje porque no tolera en absoluto los encharcamientos y una de las formas de prevenirlo (además de regar poco), es el que la tierra que uses tenga drenaje extra para que no se le acumule el agua.

No es excesivamente exigente con el tipo de tierra que debes darle, por lo que estará bien si le das sustrato universal con algo de drenaje extra.

Eso sí, en maceta tendrás que trasplantarlo cada cinco años aproximadamente, o cuando veas que las raíces empiezan a aparecer por abajo.

Riego

Si has leído todo lo anterior te habrás fijado en que el riego que demanda el ciprés totem no es abundante, ni tampoco frecuente. Tolera bien la sequía una vez está acostumbrado (si acabas de comprarlo lo normal es que no lo haga).

Así que riega solo cuando veas que la tierra está lo bastante seca. No hace falta regar mucho, solo lo suficiente como para nutrirlo.

Abonado

Si bien el ciprés totem no es una planta que requiera un abonado, si se lo das sí que puede estimularlo, al menos durante los primeros años, ya que ayudarás a que alcance de manera más rápida el metro de altura. Para ello, aplica a partir de la primavera un abono granulado alrededor del tronco.

Ten en cuenta que hablamos de un abono que durará en el tiempo, así que con una vez que lo echas va a ser más que suficiente. Ahora bien, si notas que se le consume rápidamente podrías aplicarle otra vez al mes hasta un máximo de tres veces.

Plagas y enfermedades

No te confíes con el ciprés totem porque al igual que otros cipreses, este también cuenta con muchas plagas y enfermedades que pueden acabar con él.

Entre las plagas más importantes están la cochinilla blanca, así como la seca del ciprés o los barrenillos.

En el caso de enfermedades, la mayoría tienen relación con el exceso de agua, pero también puede actuar la Phytophthora, que afecta a la savia del árbol.

Multiplicación

Para finalizar, en cuanto a la reproducción, la única manera de hacerlo es a través de las semillas. Una técnica para tener más éxito a la hora de que germinen es coger las semillas en invierno, ponerlas en un recipiente con turba y humedad, y meterlas así en el frigorífico (necesitan pasar por un periodo de frío para salir adelante después).

Tener un ciprés totem en tu jardín puede ayudar a darle un porte más majestuoso a la vez que mantendrás la intimidad de tu hogar. Solo tienes que tener cuidado con lo que necesita y armarte de paciencia ya que no crece tanto como otros cipreses. ¿Te animas a plantarlo en tu casa?