Cómo hacer jabón potásico: el mejor insecticida y fungicida orgánico

cómo hacer jabón potásico en casa.

Para proporcionarle el mejor cuidado posible a tus plantas, es importante que estés al tanto de cómo hacer jabón potásico. Porque resulta que este es un excelente insecticida y fungicida orgánico.

Su uso es bastante común en jardinería y horticultura, y lo mejor es que podemos elaborarlo de forma casera. Vamos a conocerlo un poco mejor y a examinar los pasos que hay que dar para hacerlo.

El jabón potásico como insecticida y fungicida para tus plantas

El jabón potásico como uno de los mejores pesticidas.

Este jabón se crea a través de una reacción química entre la potasa y los ácidos grasos. Dando lugar a un producto que es soluble en agua y que tiene importantes efectos insecticidas y fungicidas, porque debilita la capa protectora o cutícula cerosa que recubre tanto a los insectos como a los hongos.

Es un buen aliado para evitar las infecciones, pero también para acabar con las plagas o las enfermedades si estas ya se han producido.

Tratándose de insectos, el jabón potásico es eficaz frente a todos aquellos que tienen un cuerpo blando, como los áfidos, los pulgones, la mosca blanca y los trips. Cuando el jabón entra en contacto con estos insectos, penetra en su cuerpo y causa daños que afectan a su capacidad para alimentarse y reproducirse.

En el caso de los hongos, es particularmente eficaz frente a el oídio y el moho. Si lo aplicas sobre las hojas, puede ser de gran ayuda para eliminar las infecciones fúngicas.

El jabón potásico se aplica siempre diluido en agua tibia y se rocía sobre toda la planta, especialmente en las áreas que estén afectadas por plagas o enfermedades. Siendo recomendable hacer la aplicación a primera hora de la mañana o última del día para que la incidencia directa de los rayos del sol sobre la capa de jabón no cause daños a la planta.

Por lo que respecta a la frecuencia de aplicación, se recomienda su uso cada siete o 10 días, especialmente si hay una infestación persistente. Si se usa de manera preventiva, se puede aplicar cada tres o cuatro semanas.

En comparación con otros insecticidas y tratamiento antifúngicos, el jabón potásico se considera una opción más segura para el medio ambiente, porque su potencial contaminante es menor. Además, es menos perjudicial para aquellos insectos que son beneficiosos y sí queremos cerca de nuestras plantas, como las abejas y las mariposas.

En todo caso, aunque el jabón potásico es una opción segura como insecticida y antifúngico, debemos tener en cuenta que no todas las plantas tienen el mismo nivel de resistencia. Por eso, es mejor comenzar aplicando una pequeña cantidad de la solución en un área concreta y esperar unos días para revisar si hay alguna reacción adversa. En caso de no producirse la misma, podemos aplicar el producto con total tranquilidad.

Al hacer jabón potásico casero, el resultado siempre es diferente, así que te recomendamos hacer esta prueba cada vez que vayas a usar un nuevo jabón.

Cómo hacer jabón potásico paso a paso

cómo hacer jabón potásico paso a paso.

La potasa es un producto químico, y es conveniente que la manipules siempre con precaución, protegiendo tus ojos y tus manos. De ser posible, utiliza también mascarilla para minimizar el riesgo de inhalar gases.

Para hacer jabón potásico necesitas:

  • 150 gramos de potasa cáustica (hidróxido de potasio).
  • 300 gramos de aceite vegetal (puedes usar aceite de oliva usado).
  • 1,5 litros de agua destilada.
  • Un recipiente resistente al calor.
  • Batidor.
  • Termómetro.
  • Guantes, gafas protectoras y mascarilla.
  • Molde para jabón.

Medición y preparación

Las cantidades que te hemos dado son aproximadas. La proporción adecuada es 1:2:10. Es decir, una parte de potasa caústica por dos de aceite vegetal y 10 de agua destilada.

Una vez que hayas protegido tu rostro y tus manos, vierte la potasa con mucho cuidado en el agua. No lo hagas al contrario, porque al añadir agua a la potasa cáustica se pueden producir salpicaduras peligrosas. Remueve bien hasta disolver la potasa.

En un recipiente apto para el calor, calienta el aceite a unos 50º o 60º grados. Sin dejar que llegue a hervir. Añade lentamente la mezcla de potasa y agua en el aceite, removiendo de forma constante. Verás que la mezcla empieza a espesar y emulsionar rápidamente.

Batir y comprobar la consistencia

Continúa batiendo de forma constante hasta que se produzca la saponificación, que es el punto en el que se produce la reacción química que da lugar al jabón. Sigue mezclando hasta que veas que la mezcla adquiere una consistencia similar a la de un puré de manzana espeso. Es posible que este proceso tarde algún tiempo, así que no seas impaciente y sigue removiendo los ingredientes.

Prueba de saponificación

Su objetivo es que te asegures de que la reacción química se haya producido realmente. Para ello, extrae una pequeña muestra de la mezcla y ponla en agua. Si se forma una especie de solución lechosa, es que lo has hecho bien.

En caso de que no funcione, continúa removiendo un rato más para integrar bien los componentes.

Enfriar y almacenar

enfría y almacena tu jabón potásico.

Cuando se trata de cómo hacer jabón potásico, es importante actuar con precaución durante todo el proceso y no tener prisa. Una vez producida la saponificacion, deja que la mezcla se enfríe un poco. Después, puedes verterla en el molde.

Ahora es momento de permitir que el jabón se endurezca totalmente, para lo que debemos esperar a que se enfríe totalmente. Después podemos desmoldarlo, pero todavía necesitamos algo más de tiempo para empezar a utilizarlo.

Si has utilizado un molde tipo bloque, puedes cortar el jabón en piezas más pequeñas. Pero, en todo caso, permite que se seque (cure) durante unas semanas en un lugar fresco y seco antes de empezar a utilizarlo.

¿Sabías cómo hacer jabón potásico? Has comprobado que no es nada complicado, pero que conviene extremar las precauciones porque la potasa es un producto químico que puede causar importantes quemaduras. Si te proteges bien y trabajas con cuidado, crearás un jabón que te será de gran utilidad para la limpieza doméstica, para hacer la colada, y también para cuidar tus plantas. ¿Te animas a probarlo?


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.