Cómo secar hojas rápidamente

Si necesitas secar hojas para luego utilizarlas en proyectos manualidades o para cocinar, hay varias maneras de hacerlo. Y todas son muy sencillas de hacer, ya que además podrás conseguirlo con cosas que, o bien son fáciles de obtener, o bien ya las tienes en casa ? .

Así que si quieres saber cómo secar hojas rápidamente, a continuación te explicaremos cómo puedes lograr tu objetivo.

Cómo secar hojas para proyectos manualidades

Si vas a hacer alguna manualidad, puedes secarlas de distintas formas:

• Ata las hojas en racimos y colócalas en el exterior, a pleno sol, durante unos días.
• Coloca una hoja grande o varias pequeñas entre dos toallas de papel, y ponlas entre las hojas de una enciclopedia. Para que queden más planas, coloca encima otros libros u objetos pesados. Revísalas una vez por semana a ver si están secas.
• Introduce una hoja gruesa entre capas dobles de papel absorbente en un plato y una taza pequeña con agua en el microondas durante 30 segundos.

Para mantener su textura, puedes remojarlas en glicerina y agua por 4 días. Y si quieres que mantengan su color, nada como planchar las hojas frescas colocando éstas entre dos láminas de papel cera y poniendo encima una toalla. Presiona durante 2-5 minutos hasta que ese lado se haya secado, y le daremos la vuelta colocando la toalla encima para repetir el proceso.

Cómo secar hierbas

Si necesitas hojas para darles un uso culinario, sigue este paso a paso:

1. Lo primero que tienes que hacer es limpiarlas bien, quitándoles la suciedad.
2. Ahora, ponlas encima de papel absorbente y déjalas ahí hasta que ya no tengan humedad. En el caso de que sean hojas gruesas, como el romero o el tomillo, puedes secarlas atándolas en racimas y colgándolos boca abajo en un lugar oscuro.
3. Finalmente, sólo tienes que guardarlas en un contenedor hermético protegido de la luz solar directa.

Hacer esqueletos de hojas

Otra de las cosas que podemos hacer para segar las hojas rápidamente es hacer excrementos de hoja. Para ello, debemos escoger hojas que tengan patrones con venas gruesas. Esta hoja debe ser resistente para que no se pueda romper durante el proceso. Algunas de las hojas que caen en otoño y las hojas de roble en cuestión son bastante buenas para esto te vamos a realizar. Otro tipo de hojas bastante útiles son aquellas como las de la hiedra o de la magnolia.

A continuación, llenaremos una olla con un litro de agua. Se puede emplear una olla más pequeña si tenemos menos hojas, pero también hay que reducir la cantidad de agua. Es conveniente ponerse guantes ya que la mezcla que vamos a preparar puede llegar a dañar nuestra piel. Lo ideal es colocarse guantes de látex o goma antes de manipular el resto de los ingredientes. Una vez hemos terminado, debemos lavar todos los utensilios utilizados en agua corriente. Para ello, también lo realizaremos usando guantes.

Para hacer este esqueleto de hojas necesitaremos agregar bicarbonato de sodio o carbonato de sodio. Solamente necesitamos dos cucharadas. Gracias a la aplicación de bicarbonato de sodio hace que la hoja se convierta en una pulpa y no afecte al tallo ni a las venas. Es esta la razón por la que hemos escogido hojas que tienen las venas muy pronunciadas. Agregamos las hojas a la olla y pondremos todas las que podamos, siempre y cuando podamos remover el contenido de la olla de forma fácil.

Llevamos hasta el punto de ebullición. Un buen indicador es que toda la mezcla debería burbujear un poco. Las hojas deben hervir hasta desintegrarse por completo. Tan sólo debemos remover de forma ocasional. Dependiendo del hombres antes eran las hojas que hemos cogido, tardará un poco más. En algunas ocasiones puede llegar a tardar un día entero, pero probablemente sólo serán un par de horas. Hay que añadirle agua conforme se va degradando o reemplazar el líquido con una mezcla de agua fresca y bicarbonato de sodio cada cuadro horas para poder acelerar el proceso.

Una vez tenemos la pasta de hojas vamos a transferir todas aquellas que se está desintegrando a una olla al agua fría. Utilizaremos un plato de vidrio para poder hornear. Retiramos cada hoja usando una espátula y la dejamos en el plato para hornear teniendo cuidado de que no estén una encima de la otra. De esta forma, logramos que no se peguen. Usamos una roseta pequeña y dura para poder sacar la pulpa. A estas alturas, todas las hojas deben ser muy delgadas y tener una capa de pulpa pastosa sobre ellas. Sacaremos con suavidad y paciencia esta pulpa y dejaremos tan sólo una red de venas.

Una vez hemos terminado, dejamos que las hojas se sequen al aire en toallas de papel o dándoles toquecitos suaves y prensándolas entre páginas de libros o en una prensa de flores.

Consejos para secar las hojas rápidamente

Cuando estés prensando las hojas, ha utilizado un material como es una barrera entre la superficie de la plancha y la capa superior del papel cera. Puedes utilizar una toalla de cocina ya que es una muy buena opción. Esto es debido a que no inhibe la transferencia de calor pero a la vez como sigue qué papel haga un sello fuerte y pueda prensar las hojas para que queden completamente planas.

Aparte de bicarbonato de sodio y bicarbonato de sodio, también puedes comprar glicerina. Todos estos ingredientes se pueden encontrar en la gran mayoría de farmacias. Hay que observar con mucho cuidado las hojas mientras se están secando. Si utilizamos un microondas para ello debemos fijarnos si comienzan a humear o volverse de color negra. Es entonces cuando debemos detener el proceso. Para terminar el secado de la hoja puedes utilizar otros métodos como es el prensado para no dañar la hoja y hacer que acaben quemándose dentro del microondas.

Como pueden ver, existen algunos consejos para poder secar las hojas rápidamente y con muy buenos resultados. Espero que con esta información puedan conocer más sobre cómo secar las hojas rápidamente.