En lugar de tener un árbol de navidad artificial siempre puedes pensar en uno natural que agregarle adornos y luces. Una conífera ideal en estos casos es el Picea glauca “Conica”, más conocido como abeto blanco “Conica”, un árbol de crecimiento lento originario de Canadá y América del Norte que tiene la ventaja de que no requiere mucho mantenimiento.
Este pino además puede crecer en macetas por lo que también es ideal para terrazas y balcones. Además, es ideal para hogares con niños pues no tiene púas o bayas y no es una planta tóxica. Tiene hojas perennes y es un pino resistente a las heladas y a los vientos que crece en condiciones óptimas cuando está en un suelo con PH ácido o neutro y en un terreno fértil, húmedo pero bien drenado.
Si quieres tener un abeto blanco debes tener un espacio soleado pues necesita condiciones de semi sol a sol. La multiplicación es por esquejes a finales del verano aunque también es posible reproducirlo por semillas.
Entre los cuidados, se recomienda realizar un abonado con compost en otoño o primavera y algunas podas muy suaves pues es un árbol de lenta cicatrización.
Por ser un árbol decorativo y de pequeñas dimensiones, es ideal para plantarlo y disfrutar de la navidad adornando un pino real.
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