Los frutales enanos son una auténtica maravilla. Nos permiten disponer de frutas sanas y naturales aunque sólo dispongamos de un pequeño patio o balcón, pues no sólo pueden estar en maceta durante toda su vida, sino que además la cantidad de frutos que dan es muy interesante. Evidentemente, no producen tantos como los frutales para jardín pues tienen un tamaño más reducido, pero son los suficientes para que la familia pueda probar el auténtico sabor de la naturaleza.
Pero, ¿cómo se cuidan estos árboles?
Los frutales enanos son plantas que nos darán grandes satisfacciones. Son muy fáciles de cuidar, tanto es así que, aunque no tengas mucha experiencia en el mantenimiento de árboles, cuidar de uno enano no te va a resultar complicado. Y si no me crees, sólo tienes que seguir estos consejos y comprobarlo tú mismo. Ya me contarás 🙂 :
Ubicación
Estos árboles se deben de colocar en una zona donde les dé la mayor cantidad de horas de luz directa posible. En el caso de los cítricos (naranjas, limoneros, etc.) se pueden colocar en semisombra, pero siempre que sea un rincón muy luminoso.
Riego
El riego es, probablemente, lo más complicado de »controlar», y lo más importante. En general, hay que regarlos unas 3 veces por semana en verano, y 1-2/semana el resto del año. Pero tendremos que aumentar o disminuir la frecuencia dependiendo de las características del clima que haya en donde vivimos.
Abono
Como se trata de árboles cuyos frutos se van a destinar para consumo humano, te recomiendo que abones con abonos naturales, orgánicos y ecológicos, como humus de lombriz, estiércol de caballo o de oveja, guano, compost casero. Mezcla alrededor de 100 gramos con el sustrato, y riega generosamente. Repite una vez cada dos meses.
Trasplante
El trasplante de frutales enanos tiene como objetivo principal ponerle al árbol sustrato nuevo. De esta manera, se evita que tenga falta de nutrientes y minerales. Así pues, se trasplantarán cada 2 años, en primavera, después de que el riesgo de heladas haya pasado. Se extraerá de la maceta, y se quitará todo el sustrato que se pueda, con cuidado de no romper las raíces, y después de plantará en una maceta un poco mayor con sustrato compuesto por turba negra mezclada con un 20% de perlita.
Así tus frutales enanos crecerán sanos y fuertes 😉 .