Los arbustos de flor son una maravilla. Tenerlos en el jardín o en maceta es una manera perfecta de conseguir que la estancia mejore muchísimo, viéndose más alegre y con más vida. Pero si además una de esas plantas es el rosalillo de cumbre, conseguir que el lugar sea más especial es muy fácil.
Así que si te apetece saber más sobre esta increíble planta, aquí tienes su ficha .
Origen y características
Nuestro protagonista es un arbusto perennifolio endémico de las islas de Tenerife y Gran Canaria cuyo nombre científico es Pterocephalus dumetorum. Su nombre común es rosalillo de cumbre, y es una planta que alcanza una altura máxima de 2 metros (lo normal es 1m). Ramifica mucho, algo que le da a su copa un aspecto denso. Las hojas son lanceoladas a ovadas, y pubescentes.
Las flores aparecen desde finales de primavera hasta principios de verano. Miden 3-4cm y son de color rosado-violeta.
¿Cuáles son sus cuidados?
Si quieres tener un ejemplar en tu patio o jardín, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:
- Ubicación: pon tu rosalillo de cumbre en el exterior, a pleno sol.
- Tierra:
- Maceta: sustrato de cultivo universal mezclado con perlita a partes iguales.
- Jardín: es indiferente siempre que tenga buen drenaje. No tolera el encharcamiento.
- Riego: unas 2-3 veces por semana en verano, pero menos el resto de estaciones.
- Abonado: desde comienzos de primavera hasta finales del verano/comienzos de otoño es aconsejable abonarlo con abonos ecológicos. En caso de tenerla en maceta, se deben de usar abonos líquidos para que el drenaje del agua no empeore, algo que podría perjudicar a las raíces.
- Multiplicación: por semillas en primavera. Siembra directa en semillero.
- Rusticidad: soporta el frío y las heladas débiles de hasta los -2ºC. En caso de vivir en una zona más fría se debe de proteger o bien con plástico de invernadero y malla antiheladas, o bien en el interior del hogar.
¿Qué te ha parecido esta planta?