La Photinia serrulata es la planta de jardín por excelencia: es una preciosidad a la que le puedes dar forma de seto, de arbolito o de árbol, y que puedes tener tanto en un recipiente decorando el patio como en tierra. Por si fuera poco, resiste heladas y produce unas florecillas realmente decorativas.
Pero… ¿sabes cómo se cuida? Si tienes dudas, no dejes de leer 🙂 .
Origen y características
Nuestro protagonista es un árbol perennifolio originario de Japón, China y Formosa cuyo nombre científico es Photinia serrulata (también se sigue utilizando el anterior, Photinia serratifolia). Popularmente se conoce como fotinia, y es una planta que llega a alcanzar una altura de 10 metros, pero lo normal es que se quede en 2 a 4m.
Su tronco es erecto, con cierta tendencia a inclinarse, y su cruz es baja, lo cual quiere decir que ramifica desde muy abajo. Las hojas son alternas, simples, oblongas u ovaladas, con el borde serrado, terminan en punta y miden 10-18cm de largo. Son verdes, excepto cuando son nuevas que son rojas.
Las flores son hermafroditas, blancas, de 6-10mm de ancho, y aparecen agrupadas en inflorescencias en forma de espigas de 10-16cm de ancho. Florece en primavera. Los frutos son globosos, miden unos 6mm de diámetro y son rojos.
¿Cuáles son sus cuidados?
Si quieres tener un ejemplar de Photinia serrulata, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:
- Ubicación: ha de estar en el exterior, a pleno sol.
- Tierra: crece en todo tipo de suelos, prefiriendo los que tienen buen drenaje. En maceta se aconseja echar una primera capa de greda volcánica, perlita o similar y luego rellenarla con sustrato de cultivo universal.
- Riego: unas 3 o 4 veces por semana en verano, y unas 2 veces/semana el resto del año.
- Abonado: aconsejable abonar en primavera y verano con abonos orgánicos, una vez cada 15 o 30 días.
- Multiplicación: por semillas y esquejes a finales de invierno.
- Poda: a finales de invierno. Se han de quitar las ramas enfermas, débiles o rotas, y se han de recortar aquellas que estén teniendo un crecimiento excesivo.
- Rusticidad: resiste el frío y las heladas de hasta los -18ºC.
¿Qué te ha parecido la Photinia serrulata?