Flores… ¿Qué decir de ellas? Tienen colores y formas tan diversas que es imposible que no haya alguna que nos encante. Además, si están bien combinadas hacen que el rincón donde las pongamos se vea espectacular.
Pero, ¿te gustaría saber cómo tener macizos de flores sanos? Para que tu sueño de jardín-paraíso se haga realidad, es muy recomendable tener en cuenta unos cuantos consejos que, por supuesto, te voy a ofrecer a continuación.
Escoge plantas adecuadas para tu clima
Es lo ideal. No todas las plantas viven bien en todos los tipos de clima, y, si hablamos de flores, es muy normal que una que vive varios años en un entorno con condiciones meteorológicas adecuadas nos dure uno o dos años en una zona más fría o más cálida de lo que puede soportar.
Para que no tengas problemas, te dejamos estos enlaces:
- Flores tropicales
- Rosales – arbustos para clima templado
- Flores que florecen en invierno
- Geranios – plantas para clima tropical/subtropical o templado cálido
Pon las plantas más altas detrás
Las plantas de flor -exceptuando algunas como los pensamientos o los alhelíes, que pueden estar en semisombra también- necesitan que les dé unas 4 horas de luz solar directa al día, como mínimo. Por eso, es muy importante que se coloquen las más grandes detrás delas pequeñas para que todas ellas reciban la misma cantidad de luz.
Riégalo cada vez que sea necesario
El riego es una de las tareas más necesarias y, al mismo tipo, difíciles de controlar. Para que todo vaya bien, debes regar tu macizo de flores cada vez que sea necesario, intentando evitar que la tierra se seque. Aunque la frecuencia variará dependiendo del tipo de flores y del clima, por lo general se debe regar 4-5 veces por semana en verano y algo menos el resto del año.
Abónalo para que produzca más y más flores
Durante toda la temporada de floración es aconsejable abonar con abonos ecológicos una vez al mes o cada 15 días (dependiendo de lo que se indique en el envase del abono). De esta forma, las plantas crecerán que dará gusto verlas y, además, sacarán cada vez más flores. Eso sí, no te olvides de ir quitando las que se vayan marchitando, así como los tallos secos, enfermos o rotos.
Con todos estos consejos, seguro que tendrás un macizo floral muy bonito 🙂 .