Mallorca es una isla del archipiélago balear, el cual está bañado por el mar mediterráneo. Este mar se considera interior, ya que existe gracias al Estrecho de Gibraltar, el cual separa la península ibérica de África. A diferencia de las Islas Canarias, no hay actualmente ningún volcán activo en este archipiélago, por lo que la flora no tiene que preocuparse por eso. Ahora bien, sí que tiene otros problemas.
La sequía es el más grave de todos, ya que la falta de lluvias coincide con el verano, la época más cálida del año, cuando se pueden superar los 35ºC e incluso rozar los 40ºC en algunos puntos. Eso, sumado a la alta humedad relativa que hay debido a la influencia del mar, hace que las plantas típicas de Mallorca sean unas supervivientes, al igual que todas las de Baleares.
Acebuche (Olea europaea var sylvestris)
Imagen – Wikimedia/Pau Cabot
El acebuche es uno de los arbustos o arbolitos de hoja perenne que más podemos ver en la isla. Vive igual de bien en el norte, es decir, en la Sierra de Tramuntana, como en el sur, donde las temperaturas son un poco más suaves y donde llueve menos. Se planta a menudo en los jardines, ya que sirve como seto informal, y además, sus frutos, aunque son más pequeños que los del olivo, también son comestibles.
Almendro (Prunus dulcis)
Imagen – Wiimedia/Daniel Ventura
El almendro no es autóctono de Baleares, sino de Asia, pero lleva milenios cultivándose en toda la región mediterránea. En la actualidad, como en el pasado, se planta en huertos, pero también en los jardines. Alcanza los 10 metros de altura, y florece en primavera, produciendo flores blancas (las más comunes), o rosas según variedades. El fruto es la almendra, y puede comerse verde o madura.
Arce granatense (Acer opalus var granatense)
Imagen – Wikimedia/Qgroom
El arce granatense es el único arce propio de Baleares. En el pasado solía formar bosquecillos mixtos, pero a medida que el clima se va volviendo cada vez más cálido, cada vez resulta más difícil encontrarlo. En Mallorca, solo vive en la Sierra de Tramuntana, casi siempre en sombra aunque no es raro encontrarlo creciendo a pocos metros del mar, a pleno sol. Crece como arbusto de 4-5 metros, o bien como arbolillo de hasta 7 metros, y sus hojas caen en invierno. En Baleares es una especie protegida.
Clavel de roca (Dianthus rupicola subsp. bocchoriana)
Imagen – Twitter/Jardí Botànic Sóller
El clavel de roca es una especie casi amenazada endémica del archipiélago balear, en concreto del Cap de Formentor, al noreste de Mallorca, donde se encuentra protegida. Crece en acantilados y terrenos rocosos, alcanzando una altura aproximada de 30 centímetros, y produce flores lilas desde verano hasta otoño.
Flor de la abeja (Ophrys apifera)
Imagen – Wikimedia/(Hans Hillewaert)
Una de las varias orquídeas autóctonas de Mallorca es la conocida como flor de la abeja. Crece en las montañas, pero también en praderas. Es terrestre, puede alcanzar los 50 centímetros de altura, y desarrolla hojas verdes. La flor es muy curiosa, ya que puede confundirse con facilidad con las abejas. Florece en primavera, entre abril y mayo.
Ginesta (Genista cinerea)
Imagen – Wikimedia/阿橋 HQ
La ginesta, retama o hierba de la sarna es un arbusto que crece en los acantilados de la Sierra de Tramuntana, pero que podemos encontrar también en algunos jardines. Es una planta muy decorativa, que alcanza una altura de 1-1,5 metros, y que se llena de flores amarillas durante la primavera y el verano. Tiene hojas, pero son de pequeño tamaño, así que carecen de valor ornamental.
Helecho (Dryopteris pallida)
Imagen – Flickr/Nicholas Turland
Al principio hemos dicho que la sequía es un problema en Mallorca, pero no se debe confundir la falta de agua con la humedad relativa del aire. Y es que en esta isla llueve poco, pero lo que no nos falta es humedad. Todas las mañanas las plantas amanecen mojadas. Esto permite a muchas crecer bien, como es el caso de algunos helechos, como el Dryopteris pallida. Este es endémico de la Sierra de Tramuntana, donde aprovecha las cuevas y los huecos de las paredes de piedras para desarrollarse. Sus frondes -hojas- son verdes y miden hasta 30 centímetros de largo.
Palmito (Chamaerops humilis)
Imagen – Wikimedia/tato grasso
El palmito es la única palmera autóctona de Mallorca y de toda Baleares. Se encuentra en la Sierra de Tramuntana, y cultivada también en numerosos jardines de la isla. También se emplea en la decoración de calles y parques. Puede alcanzar los 3-4 metros de altura, y desarrolla varios tallos -falsos troncos- con hojas en forma de abanico de color verde.
Pino carrasco (Pinus halepensis)
El pino carrasco es el árbol más común en las playas de Mallorca, pero también crece en las montañas, y se utiliza mucho como árbol de sombra en parques y calles. Es de hoja perenne, y puede alcanzar los 25 metros de altura. Su copa es muy irregular, pero si lo deseas, puedes podarlo a finales del invierno para darle forma.
Zanahoria mallorquina (Daucus carota subsp. majoricus)
Imagen – biodiversidadvirtual.org
La zanahoria mallorquina, o zanahoria marina como también se llama, se diferencia de las demás principalmente por las flores, las cuales se abren tanto que forman una especie de bola redondeada. Además, la encontramos en el sur de Mallorca y en la cercana isla de Cabrera, viviendo cerca del mar. Las hojas son verdes y algo suculentas, y florece hacia finales de primavera.
Espero que te hayan gustado las plantas típicas de Mallorca que te hemos mostrado.