Ir de compras a un vivero es una de las más divertidas experiencias que puede tener cualquier aficionado o experto jardinero. Siempre se descubre algo nuevo: una planta que no habías visto nunca, una nueva variedad de aquella que adquiriste hace poco, los colores que adquieren las hojas de algunos árboles a medida que van pasando los meses…
Pero cuando se trata de sacar el monedero, tenemos que ser pacientes y no llevarnos la primera maceta que nos guste, pues a veces ocurre que un poco más escondida hay otra que tiene mejor aspecto o que se adaptaría mejor a las condiciones que tenemos en el jardín o dentro de la vivienda. Por eso, te vamos a dar una serie de consejos sobre cómo comprar plantas para que puedas disfrutarlas durante años.
Investiga sobre el clima
El clima influye en las plantas, tanto es así que si se producen heladas las plantas consideradas de interior (como las calateas, los potos o la dipladenia) no podrían sobrevivir en el exterior, y si por el contrario las temperaturas son cálidas todo el año, las plantas típicas de regiones templadas (como los arces, las hayas o las azaleas) también tendrían muchas dificultades para salir adelante.
Teniendo esto en cuenta, es necesario que sepas cómo es el clima que hay en tu zona. Debes saber si se producen heladas o no, si es habitual que caiga granizo, o si hay una estación seca.
Calcula de cuánto espacio dispones
Los jardines tipo selva a mí personalmente me encantan. Me gusta tener que apartar las hojas o las ramas para poder pasar y tener que mirar bien por donde paso para no pisar ninguna planta. Pero los jardines exuberantes también tienen su propio diseño. No se pueden poner muchas plantas muy juntas porque de lo contrario sólo sobrevivirían las más fuertes: aquellas que han sido capaces de conseguir más nutrientes del suelo.
Así, es importante que antes de ir a comprar se calcule bien la superficie de la que disponemos. Asimismo, es preciso saber qué tamaño adulto tienen las plantas que tenemos pensado adquirir para saber si realmente nos cabe.
Escoge plantas sanas
En los viveros tratan de cuidar las plantas lo mejor que saben. Deben de hacerlo para poder luego venderlas. Sin embargo, ni el mejor jardinero puede evitar que alguna enferme de vez en cuando. Así, aunque suele haber pocas que estén mal, es conveniente echar dos vistazos en vez de uno a aquella maceta que hemos escogido.
No tiene que tener hojas secas, ni tener ningún signo de plaga o enfermedad. Si tiene las hojas amarillas y/o mordidas, puntitos negros, telarañas, los tallos se notan blandos (en el caso de los cactus), o si tiene cualquier otra cosa que nos haga sospechar de que no está pasando por su mejor momento, la dejaremos y escogeremos otra.
Llévate aquellas que tienen más flores sin abrir
Aunque las plantas que tienen flores abiertas son las más bonitas, a la hora de pasarlas al jardín suelen pasarlo un poco mal debido al trasplante. Producir flores y mantenerlas abiertas suponen un gasto importante de energía. Cuando se sacan de la maceta, las plantas deben de gastar parte de esa energía en superar el trasplante y en producir raíces nuevas, lo que puede llevarlas a perder algunas flores.
Para tratar de evitarlo, es muy recomendable coger aquellas que no tengan capullos florales todavía, o bien optar por llevarse a casa aquellas que sí tienen capullos pero todavía no han abierto.
Con estos consejos, podrás disfrutar de tus nuevas compras como siempre quisiste 🙂 .